Durante el marco de la celebración del Día de Acción Global por el Aborto Legal, Seguro y Accesible, el jueves 28 de septiembre un grupo de alrededor de 15 mujeres marcharon hacia el Hospital Materno Infantil exigiendo la descentralización de la información para el libre acceso a la interrupción legal del embarazo.
A pesar de que el aborto está permitido por ley hasta la doceava semana de gestación desde 2021, miembros de colectivos feministas y mujeres en pro del aborto, señalaron que aún existe una falta de promoción de la información sobre el acceso por parte de las autoridades gubernamentales.
“Volteen a ver el trabajo que ya hemos hecho las mujeres en tema de aborto seguro, ya llevamos muchos años, lo hemos hecho de manera segura, viable y de calidad sin tener todos los recursos, ni legales, ni económicos, ni de personal que tiene cada estado; no tienen excusas para decir que no tienen los recursos, que no tienen las formas de capacitarse, que no tienen la información, es más que nada voluntad política”, señaló Crystal Lira, fundadora del Colectivo Bloodys & Projects.
De igual forma, resaltó la cantidad de intervenciones que ha realizado el sector salud, ya que de acuerdo a información de la Secretaria de Salud de Baja California, durante el 2023 se han realizado 676 interrupciones legales del embarazo; mientras que por parte del trabajo que realizan los colectivos se realizan entre 150 y 300 acompañamientos solamente en un mes, cuestionando así el presupuesto que se otorga al Programa de Aborto Seguro.
Informó que entre algunos de los problemas que enfrentan las mujeres por la desinformación del acceso al aborto se encuentran fraudes digitales, violencia económica de clínicas privadas que cobran precios elevados llegando hasta 15 mil pesos y en otros establecimientos las intentan convencer de no realizar el procedimiento.
Por su parte, América Gil Lamadrid, técnica en urgencias médicas y médica pasante del servicio social compartió: “creo que el sector salud todavía está muy lejos de donde debería estar, hay muchos estigmas, no es una atención laica por completo como debería de ser y creo que lo importante aquí es darnos cuenta que quién realmente importa es nuestra paciente; sea cual sea la razón por la que está embarazada, si no desea estarlo, no debería estarlo, como personal de salud debemos poder llegar a esa resolución”.
De igual manera, destacó que el principal problema que ha notado durante su labor en las estancias de salud es el estigma, principalmente de médicos de generaciones más viejas, quienes no separan el trabajo de sus creencias.
Mónica Rosas, psicóloga y educadora menstrual destacó la necesidad de comenzar a tener conversaciones incómodas para cuestionar y visibilizar el tema: “vengo a apoyar, visibilizar este movimiento sobre el día de acción global en apoyo al aborto y también que podamos tener acceso a información sobre nuestros ciclos, porque desde ahí parte toda esta cuestión, si no hay acceso a la información sobre cómo es nuestra ciclicidad, impacta en las decisiones que tomamos”.
Alejandra del Bosque, médica tradicional, terapeuta holística y educadora menstrual resaltó la importancia de que la mujer pueda ejercer autonomía sobre su propia vida, además de contemplar todo el contexto al que se enfrentan al encontrarse en este tipo de situaciones antes de emitir una opinión: “toda la situación emocional, socioeconómica que atraviesa la mujer, que muchas veces no es un factor que es considerado al tratar estos temas”.
De manera pacífica, las manifestantes se reunieron para compartir sus experiencias sobre el tema, posteriormente marcharon hasta el Hospital Maternal Infantil acompañadas de mantas y carteles, proclamando consignas y repartiendo folletos con información sobre como acceder a un aborto seguro.