Desde la pandemia, el comercio informal creció en todo México, aproximadamente 3 millones más, sin embargo, México se está quedando atrás en cuanto a las contribuciones tributarias y no existe la disposición para que el problema se solucione en un corto plazo.
Gabriela Arias Granados, presidenta de la asociación mexicana de Derecho Fiscal, comentó a ZETA que México dio un gran avance con la digitalización del Sistema Tributario en la administración de Enrique Peña Nieto (2012-2018), sin embargo, a raíz de la pandemia en 2020, el comercio informal creció, cuando las personas se empezaron a quedar sin empleo.
“El problema es que tenemos en México una gran informalidad, hoy por hoy, tenemos a 32 millones de personas que no pagan contribuciones, a esas personas ¿Cómo les vas a hacer una factura electrónica o su CFDI, si tienen su puesto de tacos de canasta o de burritos y cómo van a expedir la factura?”, cuestionó.
La investigadora del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), señaló que los 32 millones de personas que viven del comercio informal, representan el 50 por ciento del PIB, de acuerdo con información de la Encuesta Nacional de Oficios y Empleos.
“El tema es que las políticas fiscales en materia de formalidad han fracasado sexenio tras sexenio, tenemos el ejemplo de la época de Calderón -Felipe- con el IETU o el IDE, que al final fueron abrogados en la época de Peña Nieto -Enrique-, que lo que hizo fue quitar los repecos y el impuesto sobre la renta para integrar el famoso régimen de incorporación fiscal, y ahora tenemos un nuevo régimen que es el resico, el régimen de confianza”, rememoró.
La especialista en materia fiscal recalcó que en México no se han hecho estudios de corte sociológico para saber las percepciones de las personas no contribuyentes que están en la informalidad y conocer por qué no pagan contribuciones y cuál es su relación con la contribución.
“En México nunca hemos tenido un departamento de sociología fiscal o de psicología fiscal, si partiéramos de esos tipos de estudios donde te acercas a las personas, obviamente tendríamos un sistema muy rico para saber cómo confeccionar políticas públicas”, dijo.
Asimismo, mencionó a ZETA que en esta administración “hay un total desprecio en cuanto a todos los estudios académicos, hoy por hoy estamos muy separados, en cuanto a la Academia y el poder”.
“Hemos buscado acercarnos y no0 ha habido respuesta, en otros gobiernos teníamos mayor influencia, logramos hacer cambios legislativos y ahora no hacen casos a los estudios, no hacen caso a los datos, sería mucho más interesante hacer políticas públicas con base en realidades, con base a numeralia, con base en estudios”, finalizó.