Alexander Parra López es buscado por la Fiscalía General del Estado (FGE) por el homicidio culposo en contra de Jonathan Vélez, registrado el 2 de septiembre de 2022 sobre el bulevar Agua Caliente en Tijuana. Hasta el momento no hay rastro de él.
El presunto el responsable, que conducía en estado de ebriedad, fue detenido por elementos municipales y puesto a disposición de las autoridades correspondientes; sin embargo, la juez Griselda Rábago lo dejó en libertad por un error en procedimiento del arresto y desde entonces está impune del homicidio.
Ahora, el rostro de Alexander está en volantes pegados en espacios públicos y cercanos a las oficinas de la FGE en Tijuana, en el que la familia del difunto Jonathan solicita información en el correo electrónico justiciaparajona.02@gmail.com para localizar al presunto homicida, que se ausentó de la audiencia celebrada el 30 de septiembre.
Aunque la familia sabe que Jonathan ya no regresará, lo que quieren es que Alexander se haga responsable de sus actos que mantienen en duelo a una familia. De acuerdo a las autoridades de la Fiscalía, el responsable podría estar escondido en Estados Unidos por lo que Parra López también es buscado en California.
“Lo último que me dijeron es que ya le habían asignado el caso al comandante Mario y él se encargará de buscar a esta persona. Este mes ha sido muy difícil porque estamos en qué va a pasar; y esta semana me entero de que ya no está en Tijuana y no se sabe dónde esté, pero confío en que lo encontrarán las autoridades”, comentó Vanesa Juárez, madre de Jonathan Vélez.
La familia pide ayuda a la población en México y Estados Unidos para localizar a Alexander; desde el 18 de septiembre han protestado en tres ocasiones. Advierten que las manifestaciones se mantendrán para evitar que su caso quede en el olvido y la impunidad.
“Si despertarme y dormir es difícil, ya ni le cuento el resto del día”, comentó Carolina Aragón, la pareja sentimental de Jonathan durante sus últimos cinco años.
Carolina no concilia el sueño, pues cada exigencia de justicia le impide descansar. Previo a la tercera protesta ante la Fiscalía, la joven sólo había dormido tres horas, con la ansiedad que enfrenta al recordar a su pareja con la que planeaba casarse el pasado 26 de septiembre.
“Sentí demasiado, porque yo estaba en el velorio de mi hijo y el siguiente día iba a sepultarlo cuando me dan la noticia de que esta persona ya está libre; ¿cómo es posible que yo no termino de sepultar a mi hijo y esta persona ya está en libertad, como si nada?”, comentó la señora Vanesa.