Francisco Reina, de 65 años, es el hombre que falleció tras el desplome del techo de la Plaza Otay, ocurrido la tarde del martes 14 de diciembre, mientras pasaba la primera tormenta invernal de la región
El hombre que falleció en la Plaza Otay era empleado de limpieza del centro comercial y estaba a punto de jubilarse; sus compañeros intentaron rescatarlo, pero fue demasiado tarde.
A las 2:15 p.m. del martes 14 de diciembre se reportó el derrumbe del techo de la plaza, específicamente en el área de juegos infantiles.
“Creo que esto pudo estar peor porque pudo haber habido niños ahí, familias completas; digo era un área cerrada, pero imagínese que esto hubiera ocurrido cuando había chiquillos allí”, dijo Bárbara Salas, comerciante de la Plaza Otay.
Bomberos, paramédicos de la Cruz Roja, personal de Protección Civil y de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana Municipal acudieron al lugar; evacuaron alrededor de 300 personas.
En total se atendieron a cinco personas lesionadas y una más necesitó ser traslada a las instalaciones de la Cruz Roja, sin embargo, un hombre perdió la vida al caerle encima los escombros.
Por la mañana del 15 de diciembre, Marco Antonio Limón Salazar, empleado de mantenimiento de la Plaza Otay, regresó al lugar del derrumbe y mencionó que la víctima era su compañero Francisco Reina.
“Nos estábamos coordinando en dónde íbamos a trabajar, el accidente fue más o menos como a las dos de la tarde… y resulta que fue así rápido, pues nomás se escuchó como un fuerte tronido y todo se vino para abajo”.
“Afortunadamente yo, mi supervisor y otro compañero salimos ilesos porque corrimos hacia el lado izquierdo, pero sí un compañero que se llama Francisco, de limpieza, perdió la vida”.
“Sí tenía familia, supe que Francisco tenía familia porque yo platicaba mucho con él; ya estaba a punto de pensionarse, yo creo que anda entre los 65 años”, declaró Marco Antonio Limón Salazar.
Por la misma mañana del miércoles 15 de diciembre los locatarios y empleados de negocios clausurados por seguridad, acudieron para conocer cuándo podrán regresar, ya que la plaza continúa siendo evaluada por Administración Urbana y Protección Civil municipal.
“Hasta el momento nadie nos ha dicho nada, nadie de la Plaza -Otay-, nadie de Protección Civil; o sea yo entiendo que se debe revisar todo, pero cómo es que hay otros locales abiertos, se viene la mejor temporada para todos”, declaro Oscar Méndez, propietario de local.
Varios de los empleados coincidieron en que el techo afectado ya era viejo, tenía fisuras y días antes ya se habían escucho ruidos extraños en la estructura, por lo que consideran que la tormenta del martes sirvió para derrumbarlo.
“Ya se había escuchado como un craqueo, para mí que ya estaba mal el techo y coincidió en que se cayera el día que llovió; la verdad es que volvimos a nacer y pues es una lástima lo que le pasó al señor” respondió Matías Ugalde, empleado.
Durante un recorrido realizado por ZETA se buscó entrevistar a los encargados de la Plaza Otay, sin embargo, se mencionó que por el momento no se encontraban disponibles.