Ficción, thriller, suspenso y drama, son los géneros que definen a “El Juego del Calamar” (“Squid Game”), creada por Hwang Dong-hyuk, pero su historia va más allá de esas premisas. Se trata de la segunda serie más vista en Netflix (132 millones), acaparando la atención del 53% de los suscriptores en el mundo, con una ganancia de 900 millones de dólares -según Bloomberg-, comparado a los 21.4 millones de costo de producción, lo que refleja la apuesta de Netflix por la creación de material audiovisual sudcoreano.
Protagonizado por Lee Jung-jae, Park Hae-soo, Wi Ha-joon, Oh Young-soo, Jung Ho Yeon y Heo Sung-tae, logró ser más que el drama de “cientos de jugadores cortos de dinero que aceptan la invitación a competir en juegos infantiles… y un riesgo mortal”, pues su trama, al igual que la cinta “Parásitos”, aborda la miseria y la pobreza, lo que cautivó a millones en sus primeros 23 días, convirtiéndola en la serie más rentable y, por ende, sus nominaciones a los Globos de Oro a Mejor Serie de Drama, Mejor Actor de Serie Dramática (Lee Jung-jae) y Mejor Actor de Reparto (Oh Young-soo).