“Así como los formatos audiovisuales evolucionaron a resoluciones 4K y 8K, los actores también tienen que transformarse y nivelarse a grandes producciones”, enfatizó a ZETA el actor mexicano Silverio Palacios, quien, del 11 al 15 de octubre, impartirá el Taller de Especialización Actoral 1 en la Escuela de Cine y Medios Audiovisuales Observatorio en Tijuana.
Actualmente en pantallas de cine en la cinta “Chilangolandia” y vía streaming en Amazon Prime Video con “Matando Cabos 2: La máscara del Máscara” -en la que retoma su papel de “El Caníbal” junto a Joaquín Cosío como Rubén “El Mascarita”-, el histrión abundó:
“Pretendemos dar continuidad a esos jóvenes que empiezan en la actuación, porque la industria cinematográfica y del entretenimiento audiovisual está demandando cada vez más actores para cine o series de temas e historias que no sólo se cuentan en el centro de la República. Películas importantes, premiadas en festivales internacionales, se están desarrollando en distintas ciudades del país.
“En Baja California hay tremendos actores, pero les falta un poco de adiestramiento, experiencia y profesionalización. Existe talento y capacidades, y a esos son a los que tenemos que proveer de herramientas. La constancia del oficio me ha desarrollado, y ahora quiero compartir la experiencia con los colegas, actores y actrices cachanillas. Para poder destacar en el ámbito actoral, algunos tienen que emigrar para seguir con la profesión, pudiendo haberse quedado en su ciudad si fuéramos capaces de desarrollar un mercado”, reconoció Palacios, quien será parte de los Talleres de Otoño a impartir por Observatorio.
“Tijuana es uno de los mercados fílmicos más importantes de este país y está desarrollándose de manera muy acelerada, tiene la virtud de estar en una condición geográfica fronteriza, que además, siempre estará en contacto directo con la industria de Hollywood; y la otra es que van producciones hollywoodenses a Baja California y generan empleos, es lo que les ha dado a ustedes esa capacitación para poder adiestrarse y ser solventes en las producciones que llegan. Falta que los histriones nos pongamos a ese mismo nivel, proveerles de enseñanza para estar frente a la cámara, y, sobre todo, cómo funciona la industria audiovisual, de qué manera te exige y te demanda”, añadió el dos veces nominado al Premio Ariel por “Cero y van cuatro” (2005) y “Conozca la cabeza de Juan Pérez” (2010).
Para concluir, Palacios se refirió a la proliferación de los denominados “no actores” tanto en cine y plataformas: “La preparación del actor frente a la inclusión del no actor en las producciones es una desventaja. Ahora se les están dando atributos para protagonizar historias, y eso implica que están ocupando un puesto que le corresponde a un actor preparado, una actriz preparada, y eso es una alerta que tenemos que entender: así está funcionando la industria, se quieren ahorrar un presupuesto. La demanda interpretativa no es tanta, o los actores no estamos dando el ancho para cubrir la perspectiva interpretativa, y tenemos que prepararnos”.