El 11 de septiembre de 2001 un atentado múltiple en Nueva York, Washington y Shanksville, Pennsylvania, en Estados Unidos, perpetrado por Al Qaeda -una organización terrorista, paramilitar y yihadista, comandada por Osama Bin Laden- dejó casi 3 mil personas muertas, la mayoría de ellos en las Torres Gemelas.
La tragedia de aquel día no comenzó a las 8:40 horas con el impacto de un avión contra la Torre Norte del World Trade Center de Nueva York, sino que en realidad empezó tres horas antes, cuando los primeros terroristas pasaron sin problemas los controles de seguridad en un pequeño aeropuerto en Maine, el estado más grande de la región de Nueva Inglaterra.
Los secuestradores Mohamed Atta y Abdul Aziz al-Omari pasaron por seguridad en Portland International Jetport en Maine a las 5:45 horas. Ambos abordaron un vuelo al aeropuerto internacional Logan, de Boston, donde conectaron con el vuelo 11 de American Airlines.
Otros tres secuestradores se unieron a Atta y al-Omari a bordo del vuelo 11. Menos de dos horas después, los cinco terroristas que secuestraron el vuelo 77 de American Airlines fueron grabados en video mientras pasaron por el puesto de control oeste del Aeropuerto Internacional Washington Dulles.
Tres de los secuestradores, Nawaf al-Hazmi, Khalid al-Mihdhar y Majed Moqed activaron detectores de metales, pero no se encontraron armas, por lo que pasaron a la puerta de embarque. Los cuatro aviones secuestrados fueron desviados para ser estrellados contra las Torres Gemelas del World Trade Center de Nueva York y el Pentágono en el área de Washington DC.
El cuarto cayó en una zona rural de Pennsylvania cuando un grupo de pasajeros intentó retomar el control y evitó que llegara a lo que los investigadores determinaron que era su destino en Washington, quizá la Casa Blanca o el Capitolio. Estaban a unos 20 minutos de vuelo de Washington DC. El avión había ido perdiendo altura, por lo que se concluyó que los secuestradores tenían problemas para controlarlo. Fallecieron los 33 pasajeros y siete tripulantes a bordo.
Durante una visita a una escuela en Sarasota, Florida, donde promocionaba su política educativa, el entonces presidente George W. Bush fue informado de que un “pequeño avión” había impactado la Torre Norte del WTD, en lo que se asumió, en ese momento, como un accidente. Ante ello, la Torre Sur fue declarada “segura”, por lo que no fue desalojada.
Los cinco secuestradores del vuelo 175 de United Airlines estrellaron el avión entre los pisos 77 al 85 de la Torre Sur del World Trade Center 2. Los 51 pasajeros y nueve miembros de la tripulación a bordo del avión mueren inmediatamente, así como un número desconocido de personas dentro del edificio.
El impacto inutilizó dos de las tres escaleras de emergencia y corta la mayoría de los cables del ascensor en dicha área, atrapando muchos por encima de la zona de impacto y dentro de las cabinas de los ascensores. Poco después, algunos trabajadores en el edificio saltaron o cayeron, algo que ya había estado ocurriendo en la Torre Norte.
Sentado en un aula de una clase de segundo grado en la escuela primaria Emma E. Booker en Sarasota, Florida, el presidente Bush es alertado por su jefe de personal, Andrew Card, quien le susurró: “Un segundo avión chocó contra la segunda torre. Estados Unidos está bajo ataque”.
Otro avión se estrelló, momentos después, contra la fachada oeste del edificio sede del Departamento de Defensa. Murieron los 53 pasajeros y 6 tripulantes que iban a bordo, junto con 125 personas que estaban en dicho edificio.
Tras el ataque al Pentágono miles de aviones fueron desviados a los aeropuertos más cercanos. Asimismo, se ordenó la evacuación de la Casa Blanca y del Congreso, que para ese momento empezaba a sesionar en sus dos cámaras. Además, otros edificios federales y simbólicos del país son evacuados como precaución.
A las 09:59 horas a haber sido la segunda en ser impactada, la estructura de la Torre Sur cedió menos de una hora después del choque del avión. Exactamente 28 minutos después, colapsó la Torre Norte. Cientos de bomberos, policías y paramédicos murieron en el colapso, que los sorprende tratando de evacuar a los ocupantes del edificio.
Un total de 2 mil 977 personas murieron ese día, la mayoría tras la caída de las Torres Gemelas, que colapsaron poco después de haber sido impactadas y que severos incendios se desataran en su interior derritiendo la estructura de soporte.
Por la noche, a las 20:30 horas, el presidente Bush dijo desde el Despacho Oval de la Casa Blanca dijo: “No haremos ninguna distinción entre los terroristas que cometieron estos actos y los que los albergan”.
-Con información de Univisión.