Los empleados del restaurante Cocobeach que se accidentaron en un camión de transporte, 8 de junio, en Playas de Rosarito, acudieron el 13 de julio a la Procuraduría de la Defensa del Trabajo en Tijuana, para carearse con sus empleadores y poder llegar a un acuerdo, pero estos no acudieron a la cita.
A las 11:30 horas se citó a los dueños del establecimiento Cocobeach para que acudiera a la institución estatal para atender los reclamos de los empleados, quienes en lo general argumentaron estar en desacuerdo con la indemnización que les están ofreciendo.
“Muchos compañeros perdieron sus extremidades, van a necesitar una prótesis en este momento de su vida, el cuerpo va a cambiar, y nos dijeron que la cifra que la aseguranza tenía para las personas afectadas era de 283 mil pesos…eso es una burla
“Y en mi caso mi hermana falleció y también nos dijeron que la suma que se buscaba entregar era lo mismo que lo de una prótesis”, exclamó una joven que acudió a la cita.
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Los empleados de Cocobeach fueron atendidos personalmente por Luis Javier Algorri Franco, secretario del Trabajo y Previsión Social, los empleados de la dependencia colocaron sillas fuera del recinto para que el titular pudiera dialogar con todos los afectados.
“La Secretaría está trabajando por dos vías: inspecciones que se están realizando a los establecimientos; y por otro lado estamos en la etapa de conciliación, ya que estamos buscando a la empresa para que se haga responsable.
“Hoy era el primer citatorio que se envió, por desgracia me comentan que se envió el día de ayer -lunes 12 de julio- creo que fue cerca de 12 horas, no se presentó nadie por parte de la empresa, estamos emitiendo un segundo citatorio para el día viernes -16 de julio-”, dijo el secretario del Trabajo y Previsión Social.
Los afectados manifestaron que lo único que buscan es que la empresa se haga responsable de los daños que surgieron a raíz del accidente.
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“Es que son gastos y gastos, radiografías, tuve que hacer varios pagos y no se me hace justo que quedemos desamparados, y que los dueños del lugar se queden, así como si nada”, reclamó una empleada afectada.
