Inversionistas extranjeros retiraron 124 mil 312 millones de pesos de valores gubernamentales mexicanos al cierre de mayo, lo cual significa una reducción anual del 6.5% en la inversión foránea de la deuda extranjera del país, según datos del Banco de México (Banxico).
Datos del banco central indican que los más de 124 mil millones de pesos equivalen a casi la mitad de los capitales que abandonaron el país en 2020, cuando inversionistas extranjeros se deshicieron de valores gubernamentales mexicanos por 257 mil 238 millones de pesos.
A lo largo de la pandemia del virus SARS CoV-2, el monto total de la deuda extranjera del gobierno mexicano en manos de capitales foráneos pasó de 2 billones 166 mil millones de pesos, a un billón 891 mil millones de pesos. Es decir, los inversionistas vendieron 275 mil 929 millones de pesos, monto que significa una disminución de 12.7%.
Especialistas consideran que la salida de capitales, se debe al incremento de la percepción de riesgo del país como consecuencia de pandemia, entre otros factores.
Durante mayo de 2021, la percepción de riesgo de México -medido por el Índice de Bonos de Mercados Emergentes, EMBIG- se ubicó en 195 puntos, cantidad superior a la registrada al inicio del sexenio, cuando en noviembre de 2018 el indicador que estima la posibilidad de que los países emergentes incumplan con sus compromisos de deuda externa llegó a ubicarse en 150 puntos.
Sin embargo, la cifra reportada en mayo es menor a la de diciembre de 2020, cuando la percepción de riesgo se situó en 361 puntos. La mejora se debe a la revisión al alza del crecimiento de la economía mexicana, entre otros indicadores macroeconómicos.
Por otro lado, el Banxico alertó que persisten riesgos en el sistema financiero mexicano que podrían incrementar y afectar su operación, entre estos, una mayor inflación a nivel global que cause el aumento de las tasas de interés por encima de lo estimado en algunas economías, lo cual afectaría la recuperación de países emergentes; aunado a una recuperación económica desigual entre sectores y países a mediano plazo.
En cuanto al ámbito interno, el Reporte de Estabilidad Financiera refiere que los principales riesgos para el sistema financiero, son que las agencias calificadoras bajen la calificación soberana de la deuda de México y de Petróleos Mexicanos, lo cual encarecería el financiamiento al gobierno, las instituciones financieras y las empresas.
