Brandon Rodríguez fue presentado ante
el juez el 29 de abril; el Ministerio Público
del Fuero Común lo acusó del homicidio,
calificado con alevosía y ventaja, cometido
en contra de su sobrino adolescente,
Brian Efrén, localizado sin vida tres días
antes en un arroyo en Rosarito, Baja California
El consumidor de drogas Brandon Rodríguez vivía con una menor de 16 años y el hijo de ambos. Conforme a los hallazgos registrados en la carpeta de investigación que lo ubican como el homicida de su sobrino, Brian Efrén Cortez de 13 años, el hombre de 20 años argumentó sentir celos de la relación entre su pareja adolescente y el niño.
“…problemas que no están justificados, no había razón para ellos”, detalló al respecto el Fiscal Central de Baja California, Hiram Sánchez, en conferencia de prensa.
De acuerdo a la investigación, el adicto y tío materno de la víctima ya había agredido anteriormente al menor. Y las acciones del criminal, previas al asesinato, quedaron grabados en múltiples videos de vigilancia en poder de la autoridad.
Reportado desaparecido
De acuerdo a la versión de la familia del adolescente, todo empezó a las seis de la tarde del domingo 25 de abril, cuando Brian Efrén le pidió permiso a su abuela, Gloria Benítez Domínguez, para que lo dejara salir a jugar al parque Florida Vargas Cano, el cual se ubica frente de su casa, en la colonia Huacatay, en la Zona Centro de Playas de Rosarito.
Brian Efrén le dijo a su abuela que regresaría a más tardar a las 8:30 p.m., pero las horas pasaron y nunca volvió.
“Ay…yo ese día, pues yo no sentía, así como a veces dicen, un presentimiento. No, fue un día común y corriente, y ese día el niño me pidió permiso de salir y yo le dije ‘sí mijo, ve, nada más cuídate mucho por favor hijo’”.
“Y él me dijo ‘llego al ratito; como a las 8, 8:30 regreso Lola’, me dijo; entonces yo así sin pendiente le dije ‘sí, está bien hijo, ve un ratito para que te distraigas’… Y pues ya no regresó, ya no regresó mi niño”, recordó Gloria Domínguez.
Por la noche del mismo domingo, la familia de Brian Efrén y amigos cercanos salieron a buscarlo. Su madre marcó al número 911 para reportar la desaparición. El reporte fue atenido y llegaron al lugar policías municipales de Playas de Rosarito.
Durante horas las personas y los uniformados buscaron al niño por el parque, las calles de alrededor y el arroyo que se ubica a un costado del parque; sin embargo, en la oscuridad no lo pudieron encontrar.
Con los primeros rayos del sol, el lunes 26 de abril los familiares reanudaron la búsqueda y alrededor de las seis de la mañana Efrén Benjamín Cortez Meza, padre del menor, fue quien localizó el cuerpo ya sin vida de su hijo.
“Esta relativamente cerca-arroyo-, nada más porque pues está como solitario; allá hay como unos ranchitos, tienen caballos y eso, pero realmente pues no está lejos de aquí de la casa. Está cerca, vivimos cerca”, dijo la abuela del menor.
Los primeros agentes de la Fiscalía General del Estado (FGE) que acudieron a la escena del crimen confirmaron que el menor se encontraba a la orilla del arroyo, el cual cuenta con una extensa vegetación.
Los elementos confirmaron que el cuerpo de Brian Efrén presentaba varias lesiones en la cabeza y encontraron una piedra ensangrentada, con la que -desde el primer momento- presumen que fue privado de la vida.
Familiares del niño confirmaron que durante el martes 27 de abril la mayoría de ellos fueron interrogados por agentes de la FGE para descartándolos.
“Falta de platicar con algunos miembros de la familia todavía; ya viene el agente y pues platican con todos, entonces todavía faltan algunos. De hecho, yo creo que el agente va venir al ratito porque va hacer una entrevista a uno de mis hijos todavía [el presunto asesino]”, conversó el martes la abuela del niño.
El cateo y la conferencia
Por la noche del mismo martes, luego de que agentes estatales realizaron un cateo en la vivienda donde vivía el menor, es una construcción grande dividida y separada en tres casas, que albergan a tres familias nucleares, todas con relación consanguínea.
En una de las casas detuvieron a Brandon Rodríguez, tío materno del menor, en ese momento fue capturado por posesión de droga, pero los videos y las declaraciones obtenidos en la carpeta de investigación de homicidios, ya lo ubicaban como el presunto responsable de la violenta muerte del niño.
El miércoles 28 de abril se realizó una conferencia de prensa en las instalaciones de la FGE, en donde Hiram Sánchez Zamora, Fiscal Central, dio a conocer los avances relacionados con la indagatoria del asesinato de niño de 13 años.
Sánchez informó que al salir de su casa, Brian no fue a jugar al parque, sino que se vio con un adulto -el tío- y caminaron por varios puntos hasta llegar al arroyo en donde finalmente lo asesinó.
El niño de 13 años recibió siete golpes en la cabeza con una piedra y cinco heridas provocadas con un arma punzocortante, que no había sido localizada.
“Hoy podemos informar que el niño Brian salió después de las 18:00 horas del 25 de abril de su domicilio, y después cerca de él llega también otra persona -asesino- y de forma voluntaria hacen un recorrido por las calles cercanas a su domicilio; de forma voluntaria llega con este sujeto hasta el área que fue privado de la vida”, afirmó Sánchez Zamora.
El Fiscal Central advirtió que hay muchas horas de video que captaron los hechos, y que a un costado del arroyo donde sucedieron los hechos (del lado contrario al parque), hay empresas con cámaras de vigilancia.
“Lo que observamos es que el adulto es el que lo va conduciendo, él -Brian Efrén- va siguiendo al adulto por diferentes partes. Afortunadamente, hay muchos videos que estamos trabajando, llevando fijación de imágenes, ampliación”, declaró el funcionario.
En la misma conferencia relataron que el presunto homicida tenía celos de Brian Efrén, y que el niño creció en un entorno violento, dentro de un predio donde hay tres casas en las que viven miembros de la misma familia.
“Este sujeto había manifestado cierto celo respecto del menor, había necesariamente un rencor grave hacia el niño. El móvil sería problemas que tenía con el menor, problemas que no están justificados; no había razón para ellos, pero bueno… existía un tema familiar, una problemática familiar con el menor y una violencia que fue escalando hasta este grado, que terminó con la vida de Brian”, dijo el Fiscal Central.
“Se recuperaron varios indicios, los cuales se encuentran siendo investigados por personal forense, diversos dictámenes, sobre todo en materia de química y genética forense para establecer si se encontraron algún rastro de sangre -dentro del predio familiar- que perteneciera a Brian”, finalizó Sánchez Zamora.