El periodista Israel Vázquez Rangel fue asesinado durante una cobertura policíaca en el municipio de Salamanca, en Guanajuato, mientras otros dos colegas resultaron lesionados al cubrir una manifestación feminista en Cancún, la cual fue reprimida con disparos de arma de fuego por parte de la policía municipal de esa ciudad; ambos hechos ocurrieron el pasado lunes 9 de noviembre.
En lo que respecta al asesinato de Vázquez Rangel, se sabe que fue atacado a balazos tras acudir a cubrir un reporte del hallazgo de restos humanos en la colonia Villa Salamanca, el periodista llegó al sitio en un vehículo con logotipos del medio El Salmantino, para el que laboraba, un par de hombres lo sacaron de este para dispararle. Falleció en un hospital regional de Petróleos Mexicanos a consecuencia de las lesiones que tuvo por el ataque.
Al día siguiente varios colegas del reportero se plantaron afuera del palacio municipal de Salamanca para exigir justicia, y la alcaldesa Beatriz Hernández Cruz los invitó a sostener un dialogo al interior del recinto, ocasión en la que vertió polémicas declaraciones con las que intento desestimar el asesinato del periodista.
“La verdad es que ir a la seis, seis y media de la mañana, a cubrir una nota a ese lugar que sabemos todos que es tan peligroso…”, comentó la alcaldesa morenista a los periodistas, que de inmediato mostraron su inconformidad antes sus declaraciones.
Los compañeros de Vázquez Rangel también aprovecharon para pedir que se esclareciera el actuar que tuvo ese día la policía municipal, que no acudió de inmediato al lugar de los hechos, pero la alcaldesa negó hablar al respecto y estos se retiraron del encuentro.
Por su parte, las autoridades del estado de Guanajuato solo se limitaron a manifestar un posicionamiento rechazando este tipo de actos en contra de la prensa, sin presentar avances de la investigación.
Vázquez Rangel es el periodista número 23 asesinado durante la administración de Andrés Manuel López Obrador; apenas la semana anterior se informaba de los asesinatos de los periodistas Arturo Alba Medina (Chihuahua) y Jesús Alfonso Piñuelas Montes (Sonora), ambos también fueron víctimas de ataques armados.
Por otra parte, el mismo lunes 9 de noviembre los periodistas Sonia Solís y Roberto Becerril resultaron lesionados por arma de fuego en la cobertura de una manifestación feminista que exigía justicia por el asesinado de una joven en la ciudad de Cancún, Quintana Roo.
Solís dio su testimonio a varios medios, tanto nacionales como internaciones, y aseguró que las balas eran de los policías municipales que intentaron repeler las manifestaciones, acto que nunca había visto en sus más de 20 años de experiencia en el gremio.
A raíz del escarnio público por las acciones de los elementos policiacos, tanto el director de la policía municipal de Cancún, Eduardo Santamaría, como el secretario de Seguridad, Alberto Capella, fueron separados de sus cargos, mientras se realizan las investigaciones correspondientes.