¿El voto es un fragmento de poder en decisiones, como quién le representará y la autodeterminación en la forma de gobierno?
Sí lo es. Perú, otro ejemplo: al declarar gobierno de transición encabezando Francisco Sagasti, homenajeando a estudiantes Inti Sotelo y Bryan Pintado: “No podemos volverlos a la vida, pero sí podemos, desde el Congreso y Ejecutivo, tomar acciones para que eso no vuelva a suceder”.
¿Quiénes eran los jóvenes? ¿Por qué murieron? Parte de jornadas de movilización ciudadana (12 noviembre), reuniendo más de 15,000 personas, en la capital, realizadas ejerciendo derecho a protestar contra Manuel Merino, presidente sustituto de Martín Vizcarra, quien llegó por dimisión de Pedro Pablo Kuczynski, detenido por blanqueo capitales, bajo arresto domiciliario, sin dejar de mencionar al expresidentes Alejandro Toledo, detenido en Estados Unidos; Alan García, se suicidó (abril 2019) antes de ser detenido; Ollanta Humala, investigado en libertad provisional, señalados en caso Odebrecht; Alberto Fujimori, condenado por masacres de Barrios Altos 1991 y La Cantuta 1992.
El movimiento masivo, objeto de uso excesivo de fuerza pública, es derivado de la crisis política que vive Perú; además de estudiantes Inti y Bryan muertos, hubo lesionados y desaparecidos, consecuencia de ausencia de poder, ingobernabilidad democrática, crisis social y política, desconfianza e indignación ciudadana.
La sociedad apoya al presidente destituido por el Congreso -Vizcarra-, la población considera que la vacancia parece más una trampa para Ejecutivo, porque se estaban aprobando reformas y medidas que no les convenían a los congresistas (Rafael Robles, periodista peruano).
La situación es tal, que la Secretaría General de la Organización de Estados Americanos (OEA) y Human Rights Watch (HRW), se pronunciaron ante la fragmentación del estado de Derecho. Sin embargo, el congreso peruano, aún ante las demandas de la población, y lema al unísono: “Merino, escucha, el pueblo te repudia” y “Perú, te quiero, por eso te defiendo” … Aun así, nombraron a Merino presidente, quien permaneció solo siete días; después de días de protestas, conciliaron intereses congresistas y designaron a Sagasti.
Interesante saber por qué fue destituido el expresidente Martín Vizcarra. Después de asumir la presidencia en marzo de 2018, con tres intentos fallidos para destituirlo, lo enjuiciaron políticamente por tráfico de influencias y contrataciones irregulares, revelando audios implicándolo; basado en “moción de vacancia”, solicitada por “incapacidad moral permanente para gobernar”, respaldado por Tribunal Constitucional, votándolo 5-2 rechazando suspensión del debate del congreso; autorizaron tramitar el juicio político en contra del presidente, decidiendo -Poder Legislativo y Judicial-, en contra del 79% del pueblo, que prefería que Vizcarra culminara en julio de 2021(encuesta por Ipsos).
¿Qué es la moción de vacancia presidencial? Es el procedimiento para sacar al presidente por incapacidad moral; pero es necesario convencer al Congreso para evitar ser relegado.
Parece atractiva la “moción de vacancia” a propósito de la catástrofe democrática que vive América. Jurídicamente es sencillo someter a escrutinio moral a servidores públicos, para analizar y concluir si la conducta desplegada públicamente, es congruente con vida privada del funcionario y familia; teniendo el pueblo la última palabra en la permanencia en cargos de elección popular, ejerciendo su soberanía.
¿Qué es la soberanía? Viene del latín, formado por el término sober (encima), el sufijo anus (traducido en procedencia) y el sufijo ía, relativo a poder o autoridad por encima de otros.
Es la autoridad más elevada en la cual reside el poder político y público de un pueblo sobre su territorio y sus habitantes; y, consecuentemente, la independencia, elaborando leyes, control de recursos, sin coerción. Ejemplo de ello es “el voto”, ejercicio democrático nacional, a propósito de las consultas populares, plebiscitos o referéndum; trascendente que las iniciativas de ley fueran aprobadas o rechazadas por el pueblo directamente votando, máxime cuando regulen designación o remoción de funcionarios de primer nivel. Prohibido el confundir soberanía nacional (ejerce la autoridad) con soberanía popular, exclusiva del pueblo, indelegable; los ciudadanos no pueden encomendar la emisión del voto, debe ejercerse directamente.
Así, todo acto contrario a lo que constitucionalmente se ha reservado para el pueblo derivado de la soberanía popular, como elección presidencial, gobernador, munícipes y legisladores, inevitablemente sería inconstitucional.
Interesante revisar los ejemplos democráticos en ejercicio del poder soberano que reside en los pueblos al sur del continente, lo que demuestra que la democracia latina es real y eficaz.
La abogada María de Lourdes Molina es catedrática en Derecho y jueza del Juzgado Décimo Civil de Tijuana. Correo: molina.morales@msn.com