Alfonso Durazo Montaño, titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) del Gobierno de México, aseguró ayer jueves 1 de octubre, que el Centro Federal de Readaptación Social (CEFERESO) número 2 “Occidente”, mejor conocido como Puente Grande, se cerró debido a que se mantenía un “autogobierno” por parte de miembros del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Durante una conferencia virtual organizada por el Colegio de México (COLMEX), el funcionario federal explicó que “los reos pertenecientes al Cártel Jalisco Nueva Generación, al estar en el penal de Puente Grande, es tener todas las condiciones para conservar el autogobierno, y parte del objetivo es precisamente dispersar a estos criminales para anular la posibilidad”.
Según lo consignaron los diarios Milenio y El Universal, Durazo Montaño detalló que el traslado de reos del penal de máxima seguridad fue para sacarlos de “su zona de confort”, además de que indicó que así se buscará evitar que los presos reproduzcan el autogobierno en otras prisiones.
El pasado lunes 28 de septiembre, Durazo Montaño, en su calidad de titular de la SSPC, publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF), un acuerdo por el que desincorpora del Sistema Penitenciario Federal el CEFERESO número 2 “Occidente”, mejor conocido como Puente Grande, ubicado en la Carretera libre a Zapotlanejo Km. 17.5, a la altura del municipio de El Salto, Jalisco.
El acuerdo fue publicado “con fundamento en lo dispuesto por los artículos 1, 2 fracción I, 26 y 30 Bis fracciones IX y X de la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal; 3, fracción III y 14 de la Ley Nacional de Ejecución Penal; 3, apartado C, fracción IV, 6 fracción II, XI y XII, 53 y 54 del Reglamento Interior de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana; 8, fracción II del Reglamento del Órgano Administrativo Desconcentrado Prevención y Readaptación Social, así como 6, fracción II, del Reglamento de los Centros Federales de Readaptación Social”.
Aunque el acuerdo no especificó las razones de la desincorporación de Puente Grande del Sistema Penitenciario Federal, sí indicó que en el objetivo número 7 del Plan Nacional de Desarrollo, señala “la Recuperación y Dignificación de las Cárceles, precisando la necesidad de que las instalaciones penitenciarias cuenten con la infraestructura, recursos humanos y materiales suficientes para atender a la población penitenciaria que se alberga en los centros penitenciarios federales”.
Asimismo, recalcó que “las personas privadas de la libertad que alberga el Centro Federal de Readaptación Social número 2 ‘Occidente’ serán trasladadas a los centros federales de readaptación social que determine el Comisionado de Prevención y Readaptación Social, quien realizará las acciones y gestiones necesarias para ello, respetando en todo momento sus derechos humanos”.
“Los derechos de los trabajadores adscritos laboralmente al Centro Federal de Readaptación Social número 2 ‘Occidente’, serán respetados conforme a la ley, por lo que serán reubicados en otros centros penitenciarios federales que determine el Comisionado de Prevención y Readaptación Social, de acuerdo a las necesidades del servicio de la Institución”, agregó el acuerdo, firmado por el titular de la SSPC, institución que determinará, “en su momento”, el destino final del bien inmueble que ocupaba el CEFERESO.
Puente Grande fue la segunda cárcel federal en su tipo, que seguía el modelo arquitectónico y disciplinario de máxima seguridad del Centro Federal de Readaptación Social (CEFERESO) número 1, “El Altiplano”, ubicado en el municipio de Almoloya de Juárez, Estado de México.
De dicho centro penitenciario se fugó el capo sinaloense Joaquín Archivaldo Guzmán Loera, alias “El Chapo”, por primera vez, el 19 de enero de 2001, en un carrito de lavandería, durante el Gobierno encabezado por Vicente Fox Quesada, del cual Durazo Montaño fungió como su secretario particular.
Otros personajes relevantes que estuvieron presos en Puente Grande fueron: José Javier Antonio Vera Palestina, asesino material del periodista cofundador del semanario ZETA de Tijuana, Héctor “El Gato” Félix Miranda; además del capo sinaloense Rafael Caro Quintero, fundador del Cártel de Guadalajara; Héctor Luis “El Güero” Palma Salazar, ex líder del Cártel de Sinaloa; y, Miguel Ángel Treviño Morales, el “Z-40”.
En la actualidad en Puente Grande se encontraban recluidos Miguel Félix Gallardo, alias “El jefe de jefes’, líder del Cártel de Guadalajara; Jesús Alfredo Beltrán Guzmán, mejor conocido como ‘El Mochomito’, hijo del ex líder del Cártel de los Beltrán Leyva; así como líderes de los cárteles de los Zetas, Zodiaco, y Jalisco Nueva Generación (CJNG).
El Centro Federal de Readaptación Social número 2 “Occidente” -que se inauguró en octubre de 1993, durante el Gobierno de Carlos Salinas de Gortari- tenía una población aproximada de 400 personas privadas de libertad, ya que aunque contaba con un capacidad para mil 050 reos, desde el año pasado comenzó a disminuir el número de presos.