“La fiesta estaba normal, o sea la verdad no estaban haciendo mucho ruido, y de repente se escuchó una ráfaga (disparos) bien fuerte, lo primero que hice fue tirarme al piso, luego le marqué a mi tío que vive a dos casas, cuando me asomé ya había llegado la placa (policías)”, fue lo que declaró un vecino de la colonia Esmeralda, donde la madrugada del jueves 10 de septiembre tres hombres fueron asesinados a tiros y dos mujeres resultaron heridas.
Mediante un recorrido realizado por ZETA, el viernes 11 de septiembre, se pudo apreciar que en la casa número 9121, en la calle Jade, aún hay manchas de sangre en medio de latas y botellas de cerveza vacías, pastel tirado, bolsas de papitas abiertas, entre otras cosas.
Vecinos informaron que los disparos se escucharon alrededor de las 3:30 horas del jueves, en la casa donde viven las mujeres heridas, Mariana Villegas y Mauri Valenzuela, ambas de entre 25 a 30 años, por lo que presumen que los hombres asesinados eran invitados de la fiesta.
“Ellas son muy amables, ya tienen mucho tiempo viviendo en ese casa, nunca vi que hubiera niños en la casa, creo que una de ellas es enfermera, en general unas personas muy tranquilas, pues quien sabe qué pasó adentro de la casa”, mencionó residente.
Hiram Sánchez Zamora, fiscal central, de la Fiscalía General de Estado (FGE), informó que hasta la noche del viernes las víctimas aún no habían sido identificadas, así como fue una sola persona quien realizó los disparos, y el ataque se debió a un problema personal.
“Hasta ahorita es probablemente que se trate de un problema personal que trascendió lamentablemente y culminó con la vida de tres personas del sexo masculino y dos personas del sexo femenino se encuentran lesionadas.
Estamos trabajando con ellas (mujeres heridas) para identificar a la persona que cometió el triple homicidio y las lesionó, pero es probable que se trate de un problema personal, de una de las víctimas”, dijo el Fiscal Central.
Por la noche del viernes 11 de septiembre, la FGE informó que los hombres fueron localizados en el interior de la vivienda, la cual es de una planta, presentaban impactos de bala en la cabeza y abdomen, aunque no se dio a conocer el calibre del arma asesina.
“La verdad yo no sé de armas verdad, pero yo creo que fue con una metralleta porque se escuchó así como trabado y muy fuerte, en cuanto vi que podía salir de mi casa me fui a la casa de mi hermana”, dijo una vecina de la colonia Esmeralda.