El gobernador de Baja California, Jaime Bonilla Valdez, informó que el municipio de Tecate recibió un préstamo del gobierno del estado por 20 millones de pesos, sin que hasta el momento el Ayuntamiento encabezado por la alcaldesa Olga Zulema Adams Pereyra haya reportado qué destino le dio.
“Nosotros le prestamos inclusive 20 millones de pesos al municipio de Tecate para que se hiciera uso correcto de ese dinero y hasta ahorita la Función Pública me acaba de reportar que no tiene conocimiento de cómo se esparció ese dinero, cómo se gastó ese dinero, cómo se acomodaron los pagos que estaban comprometidos”, señaló Bonilla Valdez este domingo 6 de septiembre en conferencia matutina.
“…no tenemos conocimiento, mis ojos son la Función Pública y la Función Pública me dice no hay rendición de cuentas en Tecate”, agregó el mandatario estatal.
Según indicó, en Tecate existe “desesperación” entre la población en vista de “una convulsión dentro del mismo municipio”, pues en lugar de trabajar, Adams Pereyra se ha dedicado a “hacer grillas” y “cotos de poder”. Sostuvo que con el préstamo de 20 millones de pesos, la administración estatal ha tratado de brindar apoyo al municipio. Sin embargo, “si no se dejan ayudar es muy difícil alguien que no se deja ayudar”, opinó.
Afirmó que su administración sigue apoyando al Pueblo Mágico y en ese sentido aclaró: “no necesariamente en coordinación con la presidencia municipal”.
Entre la alcaldesa de Tecate y el gobernador bajacaliforniano ha habido fricciones a raíz de que el 2 de julio ella lo acusó de haberla amenazado por no apoyar la reforma para que alcaldes, regidores, síndicos y diputados puedan buscar la reelección sin separarse del cargo.
En su vídeo-transmisión del día de hoy, Bonilla Valdez insistió en “la infraestructura y los apoyos” que su gobierno le sigue otorgando a Tecate y mencionó que “otra cosa son los manejos internos del municipio”.
Sobre ello aseguró: “nos mantenemos ajenos a eso”.
Planteó que en todo caso “los tecatenses son los que tienen que resolver ese problema”, toda vez que ellos “votaron por presidente municipal” y en ese sentido son quienes tienen que exigirle a la munícipe.
“El pueblo es el jefe y la mano del gobernador puede ayudar solamente hasta tanto, pero si tenemos una presidencia municipal que hace caso omiso, no a la instrucción del gobernador, porque yo no soy nadie para decirle, pero la instrucción del pueblo, es cuando tenemos un problema”, sentenció.
Dirigiéndose a los ciudadanos del municipio fronterizo, Bonilla Valdez remató: “Son ustedes los que van a determinar quién se queda y quién se va, el pueblo pone y el pueblo quita”.