El 26 de julio en varias páginas de Facebook de colectivas feministas se expuso una denuncia contra cinco menores de edad, que supuestamente vendían fotografías íntimas de mujeres. Los señalados son estudiantes de una escuela secundaria en Tijuana.
De acuerdo con el padre de uno de ellos, la publicación original, que fue retomada por las páginas feministas, carecía de sustento, no aportaba pruebas y fue eliminada en cuanto ellos les hicieron saber que ya habían interpuesto una denuncia con la Policía Cibernética de la Guardia Nacional.
“Lo primero que hicimos fue hablar con ellos, que nos contaran qué era lo que estaba pasando; reprobamos este tipo de situaciones y estamos con toda la disposición de que se castigue cualquier delito. Pero en este caso, los muchachos fueron acusados de algo que no hicieron y así se lo informamos a las páginas, para que bajaran esa información”, relató el señor González.
Después de la exposición pública por presuntamente vender fotografías intimas de mujeres menores de edad, los cinco mencionados recibieron todo tipo de mensajes en sus redes sociales; las más alarmantes eran sobre hacerles daño o hasta quitarles la vida. Fue cuando el grupo de padres de familia se acercó al Ministerio Público, tanto para verificar si existían denuncias contra los menores, como para poner una denuncia por las amenazas que estaban recibiendo.
Personal del Ministerio Público les informó que ese tipo de demandas no procedían y que no había denuncias formales contra los menores. Después de esto, se acercaron con la división cibernética de la Guardia Nacional y dejaron un precedente.
Solo la página que hizo la publicación original, que no es de carácter feminista, eliminó la publicación; el resto no accedió a dialogar con los padres de los señalados, González refirió que en la mayoría de las interacciones recibieron insultos por parte de quienes administran estas páginas.
La última acción que ejercieron fue acercarse a las instituciones educativas que tienen relación con dos de las páginas, la Universidad Autónoma de Baja California y el Instituto Tecnológico de Tijuana, aunque en el primer acercamiento no obtuvieron una respuesta favorable.
Este Semanario también consultó a ambas universidades. UABC por su parte indicó que no podía proceder porque la página en cuestión no les pertenece, aunque aseguró que de manera interna se está revisando el tema del uso de la imagen y el nombre, por las implicaciones legales que pudieran tener.
En cambio, el ITT, a través de departamento de Comunicación Social, contactó a los padres de familia y les aseguraron el interés por revisar la situación y revisar que se podía hacer al respecto, debido a la preocupación de que se relacione a la institución con un problema tan grave que afecta a menores de edad.
Por su parte, las colectivas feministas publicaron el 1 de agosto un desplegado en el que denunciaron a los familiares y amigos de los cinco menores por acoso, hostigamiento y por “persecución y agresión física de las menores implicadas”. ZETA intentó contactar a una de las colectivas, pero no hubo respuesta. El señor González comentó que esto no era verídico, pero siguen buscan la manera de que se les repare el daño ocasionado a los jóvenes.
