22.6 C
Tijuana
lunes, octubre 7, 2024
Publicidad

El tsunami ya inició  

El horizonte magisterial, en un breve lapso, se tornará más negro que una noche de tormenta. Esto, estimado lector, no una es profecía o lectura de cartas de alguna adivinadora gitana. Desafortunadamente, es lo que se vislumbra acontecerá al magisterio de Baja California y a todos los trabajadores al servicio de la educación y a los compañeros burócratas en Baja California. A continuación, de manera sucinta, me permito fundamentar mi comentario inicial.

A los trabajadores al servicio de la educación (intendentes, secretarias, bibliotecarios, prefectos, directores, inspectores, maestros, maestras, etcétera), se les brinda atención médica en el Issstecali (Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores al Servicio del Estado de Baja California). Desafortunadamente desde hace varios años se observan grandes deficiencias en su operación o funcionamiento, tales como: insuficientes médicos generales y especialistas; medicamentos; suspensión de operaciones ya programadas; citas de 3 a 10 meses de espera para ser atendido por un médico especialista; falta de reactivos para exámenes clínicos, etcétera.

Esto a pesar que todos los trabajadores aportan una importante cantidad para su funcionamiento y mantenimiento, y otra el patrón-gobierno (el estado).

Por este motivo, no me explico cómo pretende el gobierno de López Obrador que se atienda a “Juan Pueblo”, cuando la infraestructura hospitalaria y de servicios no es suficiente ni para los de casa, que quincena tras quincena aportan para su sostenimiento.

No es posible pretender atender a la población en general, en las condiciones antes mencionadas. Celebro la intención de López Obrador de brindar atención médica a todo aquel que lo necesita, mas no puedo estar de acuerdo con la forma. No puede brindarles atención médica a unos, quitándosela a otros. Imaginen el caos que se ocasionará con semejante medida.

Se está vulnerando el derecho a la salud de todos los trabajadores al servicio de la educación. No es posible que se nos quite o se deterioren más los servicios médicos para atender a otros que no aportan, ni han aportado un centavo al Issstecali.

Y si se diera atención a personas con COVID-19, pues estaría bien, sería una medida transitoria; pero de ahí a atender enfermedades de todo tipo, mujeres embarazadas, partos, hospitalización, dar medicamentos gratuitos y a los no derechohabientes o afiliados… hay mucha distancia.

El universo de pacientes que atiende Issstecali es muy grande y necesita que se le inyecten recursos para eficientar su funcionamiento. Meterle más gente a un navío a punto de zozobrar es irresponsable y hasta criminal.

Aquí no se trata de “donde come uno, comen dos”. Aquí se trata de calidad de servicios médicos y de la vida de los trabajadores al servicio de la educación.

Este tema debe ser abordado por los distintos sindicatos en Baja California, para intentar contrarrestar esta grave situación que perjudicara a los actuales derechohabientes y trabajadores afiliados al Issstecali.

 

Atentamente,

Profr. Francisco Heredia Guzmán.

Tijuana, B.C.

Autor(a)

Carlos Sánchez
Carlos Sánchez
Carlos Sánchez Carlos Sánchez CarlosSanchez 36 carlos@zetatijuana.com
- Publicidad -spot_img

Puede interesarte

-Publicidad -

Notas recientes

-Publicidad -

Destacadas