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martes, octubre 1, 2024
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El verdugo de Diana

Evidencia tecnológica de los enlaces telefónicos, prueba que el taxista Juan Manuel de Mateo Uribe fue la última persona en tener contacto con la joven de entonces 15 años de edad. Estaban en el mismo lugar poco antes que ella desapareciera en 2018. También tienen evidencia de que él mintió y obtuvo una coartada bajo amenaza. Dos años después lo detienen y acusan por el delito de desaparición  cometida por particulares agravada,  y enfrenta una pena de 37 a 87 años de prisión

Diana Piggeonountt

Juan Manuel de Mateo Uribe era once años mayor que la quinceañera Diana Laura Gómez Piggeonountt cuando la conoció. Aun así la enamoró, tuvo sexo con ella y, el 8 de junio de 2018, cuando la adolescente sospechaba estar embarazada, la desapareció.

Considerado por familiares y amigos como principal sospechoso desde el primer día de la desaparición de la menor, a los investigadores les llamó la atención la frialdad y falta de empatía con la que el hombre se refería a Diana. Lo mismo que la arrogancia y prepotencia con que se conducía frente a la autoridad en los interrogatorios.

Apoyado en la falsa coartada que le dio su novia Mayra, el individuo evadió la justicia por dos años, pero la mujer desistió y admitió haber mentido porque tenía miedo que De Mateo la golpeara como en ocasiones anteriores. Respecto a la fecha del crimen confesó: “…hubo lapsos del día en que no estuve con él”.

En su segunda versión, la mujer también manifestó preocupación por el destino de Diana, porque días después de la desaparición, Juan Manuel le había comentado que no iría a la cárcel “por una muchacha pendeja”.

Los antecedentes del también apodado “Manuelón” incluyen:

* Dos cargos por robo calificado a casa habitación y robo calificado de vehículo en 2008

* Un cargo por robo con violencia en 2015

* Dos carpetas iniciadas en su contra por amenazas en 2017.

Quieren saber dónde está Diana

 Para la familia de Diana Gómez Piggeonountt, la detención de Juan Manuel de Mateo Uribe no significa mucho, debido a que todo sigue igual: no se ha podido dar con el paradero de la joven, que al momento de su desaparición, cursaba sus estudios en la Preparatoria Federal “Lázaro Cárdenas”.

Desde las primeras horas del miércoles 15 de julio se informó que Juan Manuel, taxista que desde un principio se mencionó como sospechoso de participar en la desaparición de Diana, había sido capturado.

La Fiscalía General del Estado (FGE) dio una conferencia de prensa el mismo día para informar los detalles sobre la detención, sin embargo, aún se desconoce el paradero de la menor de edad, quien este verano se graduaría.

Por ello, Judith Piggeonountt declaró a ZETA que para su familia todo sigue igual, porque no saben dónde está su hermana, qué ocurrió y por qué, o cuántas personas participaron en la desaparición de Diana.

Agregó que su familia sigue igual de dolida porque en verdad no consideran que haya algún avance por parte de las autoridades, por ello aún no se han posicionado sobre el tema de manera pública.

“La verdad no tengo un punto de vista (sobre la detención Juan Manuel), todo está igual, para mí no hay nada nuevo, ya si dan a conocer algo nuevo entonces podría tener un punto de vista”, expresó Judith a este Semanario.

Raúl, compañero de aula y amigo de Diana, coincide con la familia. La mañana del miércoles, cuando se enteró que había un resultado importante respecto al caso de la joven, se sintió triste, porque esperaba saber de su paradero y han pasado dos años desde la desaparición, sin saber algo de ella.

A Raúl le gustaría que su amiga estuviera con sus compañeros de la preparatoria la próxima semana, para graduarse juntos.

El joven mencionó a ZETA que un día, hablando de sus planes a futuro, Diana le comentó que ingresaría a una capacitación de Diseño Gráfico, de carrera no lo mencionó muy segura, solo como posibilidad “porque estábamos en eso, en decidir”, dijo el compañero de Diana.

Respecto a Juan Manuel de Mateo Uribe, el próximo lunes 20 de julio será presentando para que se realice la audiencia de vinculación a proceso, al enfrentar cargos por desaparición cometida por particulares agravada.

En cuanto a Diana, el fiscal central Hiram Sánchez Zamora confirmó que siguen buscándola. (Luis Gerardo Andrade)

Sin embargo, en marzo de 2018 estaba libre y trabajando como chofer de Taxis Rojo con Blanco, AC Solidaridad, en la ruta de Zona Centro a Divina Providencia, precisamente donde conoció a Diana Laura.

La investigación en la carpeta de Diana se inició el 9 de junio de 2018 en la Unidad de CAPEA (Centro de Apoyo  Personas Extraviadas y Ausentes), apenas 12 días después, la Fiscalía de Desaparecidos realizó el primero de varios operativos caninos de rastreo en cerros y baldíos de la colonia Divina Providencia buscando el cuerpo de la chica. Consideraron el homicidio, incluso a De Mateo Uribe como presunto responsable, pero no tenían un cuerpo como evidencia.

Con la nueva administración estatal, el expediente fue asignado a la Fiscalía de Unidades Especializadas a cargo de Ricardo Carpio Sánchez. Ahí rearmaron el expediente para conseguir la captura del sospechoso principal. Ignoraban la suerte o paradero de la víctima, pero sabían quién fue el último hombre que la vio, que mintió al respecto y pidió a dos testigos falsear declaraciones para darle una coartada que lo deslindara de los horarios en que la menor desapareció.

De acuerdo con los elementos en poder del Ministerio Público y los que aún podían obtener, decidieron que la fiscalía estaba en posición de acreditar la probable participación del taxista en la desaparición de la víctima, porque podían probar que toda la mañana Diana mantuvo comunicación telefónica con De Mateo, que fue la última persona

con la que habló y, al momento de la desaparición, “la menor y el imputado estaban en la misma ubicación geográfica”.

Decidieron acusarlo por el delito de desaparición cometida por particulares”, que en este caso por ser perpetrado contra una mujer y menor de edad, es agravado y tiene una penalidad  de 37 a 87 años de cárcel. Pero si el asunto llega a juicio, el imputado admite culpa y proporciona información del paradero de la víctima, podría ser reducida.

EL TAXISTA

La primera referencia a Juan Manuel, la tuvo la familia de Diana a las ocho de la noche del mismo viernes 8 de junio de 2018, cuando empezaron a buscarla y a preguntarles a los amigos si conocían su paradero. “Pregúntenle a Juan Manuel, el chofer”, respondieron los jóvenes, e informaron que él podía saber algo “porque a veces la llevaba a la escuela”.

Esa misma noche la familia contactó a De Mateo Uribe, les

Cae “El Peinado”, líder del Cártel de Sinaloa en Rosarito

Al querer recuperar un vehículo Ford F-150 con placas de circulación 21688Z1 del Estado de California, serie 1FTPW125X6F A43858, el miércoles 15 de julio fue detenido Jonathan Díaz Sánchez “El Peinado”, de 35 años de edad, identificado como líder operativo del Cártel de Sinaloa en Rosarito.

El originario de San Luis Río Colorado, Sonora llegó alrededor de las 3:30 pm al Ayuntamiento de Rosarito con un documento de devolución del pick-up color azul, supuestamente suscrito por un agente del Ministerio Público Federal, bajo oficio número EIL-BC-E1C1-1056/2020, el cual resultó falso, por lo que quedó detenido por el probable delito de documentación apócrifa, que alcanza fianza.

Acorde con fuentes de inteligencia en BC, “El Peinado” es el sucesor de Iván Carrasco Camacho “El Ranas”. Se le vincula con Marco Tulio Carrillo Grande “El Marlon”, ex policía municipal, todos al servicio de los hermanos René y Alfonso Arzate García.

Tiene registrados por lo menos cinco domicilios: tres en Tijuana, en Infonavit-Alba Roja, en Camino Verde y en la colonia Centro; y dos en Rosarito, en Villa Corona del Mar y Lucio Blanco.

Además, se le han cumplimentado diversas órdenes de aprehensión por los delitos de abuso de autoridad, homicidio calificado y cohecho entre los años 2008 y 2013, así como órdenes de reaprehensión en 2010 y 2015 por portación de arma prohibida.

Otros registros penitenciarios de Díaz Sánchez son por los delitos de posesión de cartuchos y arma de fuego en  2012; portación de armas prohibidas en 2009-2010; y homicidio calificado en 2008. Aparte,  tiene averiguaciones previas por homicidio calificado, abuso de autoridad, lesiones agravadas por razón de parentesco, robo simple, portación de arma de fuego, robo en casa habitación, amenazas, abuso de autoridad y lesiones; así como un expediente de investigación por robo con violencia, amenazas y abuso por retención. En 2015, la extinta Policía Estatal Preventiva lo detuvo por delito contra la salud.

Foto: Cortesía

respondió que no sabía nada, pero se ofreció a pedir un taxi prestado para ir a buscarla; los contactaría más tarde, pero eso no sucedió.

Después, los amigos más cercanos a Diana Laura informaron que la menor mantenía una relación con el taxista Juan Manuel de Mateo Uribe, primero comentaron: “Al parecer andaban quedando”, ya que la llevaba a casa y la esperaba para llevársela.

En conversaciones posteriores declararon que por dichos de la propia Diana, sabían que ya habían tenido relaciones sexuales. Que ella le decía “Lob” o “Manuelón” y vivía cerca del sitio de taxis, que se veían a diario, salían a caminar por la Zona Centro y en la colonia se veían en una tienda de abarrotes.

Ofrecieron más detalles, el primer beso se lo dieron en marzo de 2018 y desde entonces, cuando Diana se quedaba sola en su domicilio, iba a la casa de Manuel a ver películas.

Diana les platicó que la primera semana de mayo tuvieron sexo sin protección, pero el taxista le compró la pastilla “del día siguiente”. Sin embargo, el 27 de mayo les externó su preocupación al no haber tenido su periodo menstrual, pero creía era por efecto de la pastilla.

Al ser declarado, otro vecino dijo que el 8 de junio vio a Diana frente a la tienda Karina, caminando desde su casa rumbo a la de Juan Manuel, “puede saber dónde se encuentra”, manifestó respecto al taxista hace dos años.

 

LAS MENTIRAS DE JUAN MANUEL

La primera entrevista ministerial de Juan Manuel de Mateo Uribe fue el 11 de junio, dijo que se enteró de la desaparición de Diana por Facebook, “no sé ni tengo idea del paradero de Diana”.

Del día de los hechos detalló que no trabajó, pero por la mañana fue al gimnasio con su novia Mayra, comieron en la Zona Norte, conversaron con algunos amigos en un sitio de taxis, pasearon un rato por el Centro y después regresaron al domicilio de él en la colonia Divina Providencia, a una cuadras de la casa de Diana en Corona Encantada, conocida como Vista Encantada.

En julio, ya en una segunda declaración, con los testimonios de testigos en contra,  De Mateo Uribe admitió que la conocía por su trabajo de chofer de ruta, que platicaban y habían tenido una relación -no admitió lo sexual-, pero cuando Diana desapareció, tenía más de quince días sin hablar con ella. Solo recordó que una semana antes la vio subiendo a otro taxi porque estaba enojada, tras enterarse que él tenía novia, una ex mujer y tres hijos.

En su primera versión, Mayra, quien también vivía en Vista Encantada, aseguró que el 8 de junio estuvieron juntos desde las 8:15 de la mañana hasta las seis de la tarde, pero después se desistió: explicó que el 18 de junio de 2018, Juan Manuel le dijo que si le preguntaban acerca de Diana, dijera que habían estado juntos todo el viernes 8, pero era mentira.

LAS LLAMADAS DE DIANA LAURA

De acuerdo con los videos y testimonios, el 8 de junio de 2018, Diana Laura salió de sus casa pasadas las diez de la mañana rumbo a la escuela, y de la Preparatoria Federal “Lázaro Cárdenas” con destino a la Zona Centro a las doce del mediodía, y a las 12:25 abordó el taxi 0228 de la ruta a la colonia Vista Encantada.

Datos técnicos del reporte del teléfono de la chica refutaron la versión del taxista, quien aseguró no haber tenido contacto con la menor en los quince días previos a su desaparición.

El análisis de su celular reveló que ese 8 de junio Diana Laura Gómez Piggeonountt empezó a contactar con él desde las 9:16 de la mañana. Antes de salir de su casa a las diez, ya habían intercambiado tres comunicaciones.

Cuando salió de la escuela a las 12:06, según les dijo a sus compañeros para resolver un problema, le marcó a Juan Manuel de Mateo Uribe, quien le devolvió la llamada un minuto después.

Las comunicaciones revelan que la adolescente lo estaba siguiendo, y al parecer, él la estaba evadiendo, ya que cuando ella le habló de la escuela, Juan Manuel se encontraba en Zona Centro y, cuando Diana llega a ese punto, él ya se había ido a la colonia Divina Providencia y ella tras él.

Rumbo a la colonia, entre las 12:20 y las 1:00 pm, hay otras tres comunicaciones entre la víctima y el presunto victimario. Una vecina declaró que el día de los hechos compartió el taxi

Policías de Tecate pasean a “El Moreno” en patrullas

Yiovanni Guerrero Arellano, supervisor de la Policía Municipal de Tecate, fue detenido el 13 de julio por elementos de la Secretaría de Marina Armada de México, Guardia Nacional y Guardia Estatal de Seguridad e Investigación, y presentado como integrante del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

“Con su aprehensión no solo se afecta la estructura criminal, sino la logística para la protección de los integrantes y líderes del CJNG, así como la obtención de información sensible, confidencial y privilegiada”, detallaron las autoridades.

Se le capturó en posesión de 90 gramos de metanfetamina, 100 gramos de marihuana, un fusil de asalto AR-15 y una pistola calibre 9 milímetros, en compañía de Horacio Grijalva González, de 42 años de edad, con antecedentes por robo y delitos contra la salud; y Josie Ramírez Amaro, durante la cumplimentación de una orden de cateo en un domicilio de la colonia Juárez de Tecate.

Guerrero Arellano forma parte del grupo de 19 policías que Ismael Gómez Sierra “El Chiquilín”, identificado como número dos del CJNG en Tecate, traía como contactos en su teléfono celular, de quienes recibía información, lo cual pudieron constatar las autoridades cuando lo detuvieron el 6 de julio en posesión de armas y droga en Ensenada. Gómez Sierra también es ex policía, y, en 2009, fue condenado junto a otros agentes por lesionar a balazos a los agentes de la entonces Policía Federal Preventiva, César Becerra Mondragón y el suboficial Ulises Rodríguez Hernández.

Estas dos aprehensiones permitieron a las autoridades integrantes de las Mesas Estatales de Coordinación para la Paz y Seguridad de Baja California, determinar  que Danny Isaac Ortiz Covarrubias “El Moreno”, operador y cabecilla de sicarios del CJNG,  acostumbra viajar en las patrullas municipales, transportado por los uniformados para proteger cargamentos o privar de la libertad y asesinar a sus contrarios.

Pero los agentes municipales corruptos no solo sirven de choferes del cabecilla criminal: “Mueven a otros integrantes de la célula delictiva, distribuyen droga en tienditas, recolectan el dinero en los puntos de venta de los enervantes y les avisan de cualquier movimiento que realicen las otras autoridades en el territorio de Tecate”.

De igual manera, investigan la presunta participación de mandos policíacos en el asesinato de los agentes Rosalba Santillán Esqueda y Pedro Ignacio González Pineda, quienes se desempeñaban como escoltas del recién estrenado director de la Policía, Mayor Orlando Hernández Porras.

Respecto a Flavio Roberto Ortiz Muñoz alias “Basuras” y/o “Flavio”, detenido el 8 de julio  en la colonia Hindú de Tecate y objetivo prioritario de las Mesas de Seguridad, -identificado como sicario del CJNG y con orden de aprehensión por intento de homicidio-, lo aprehendieron en compañía de su hermano Juan Luis en posesión de dos fusiles de asalto (un AR-15 y un AK-47), un arma corta y aproximadamente dos libras de metanfetamina.

del Centro a Vista Encantada con Diana, e informó que al llegar a la parada la menor iba hablando por teléfono y se le cayó, por lo que se dio cuenta que el identificador decía “Amor”.

Los mismos análisis de las comunicaciones, revelaron:

* Pasada la una de la tarde del viernes 8 de junio de 2018, Diana y Juan Manuel estaban en la misma ubicación.

* “El Manuelón” y su novia Mayra se encontraban en lugares diferentes el día y al momento de los hechos.

* A partir de marzo y hasta el 8 de junio de 20018, De Mateo Uribe se había convertido en el contacto telefónico principal de Diana.

* Contrario a lo dicho por el presunto victimario, habían tenido mucha comunicación los quince días previos a la desaparición.

* Diana no era el interés principal del taxista, y ocupaba el tercer lugar en el número de llamadas.

 

LA CAPTURA

Con datos de prueba suficientes para acreditar el presunto delito de desaparición cometida por particulares agravada por razón de edad y género en causa penal 02167/2020, la juzgadora Martha Elvia Luna Vargas concedió la orden de aprehensión contra Juan Manuel de Mateo Uribe el 10 de julio de 2020. Fueron a buscarlo a su dirección en la colonia Divina Providencia, pero no lo encontraron y nadie supo dar razón de su paradero.

A través de procedimientos judiciales, la autoridad solicitó información en diversas dependencias de servicios públicos hasta que lo localizaron en un domicilio en Calle de las Rosas, Colonia Rancho las Flores.

Los agentes investigadores estaban haciendo guardia y, cuando confirmaron su identidad, solicitaron una orden de cateo que les fue concedida y la ejecutaron alrededor de las dos de la mañana del miércoles 15 de julio. Ese día, en la primera audiencia, la juez de Control en turno, Leticia Larrañaga Vizcarra, decretó legal la detención y su permanencia en prisión preventiva hasta la audiencia de vinculación del 20 de julio, cuando se determine si será o no sometido a juicio por la desaparición de Diana Laura Gómez Piggeonountt.

Policías modificaron escena del crimen en caso de Bravo Reyna

 Ya declararon los cuatro agentes que participaron en el operativo policiaco que el 24 de mayo de 2020 terminó con la vida de Roberto Alfonso Bravo Reyna “El Razo”, cuyo cadáver presentaba 17 lesiones de bala y los uniformados ratificaron el contenido del Informe Policial Homologado.

Pese a que Bravo Reyna salió negativo a la prueba de Rodizonato de Sodio, insisten en que en persecución pie tierra, “El Razo” disparó a los agentes, hiriendo al de nombre Salomón Jesús Cruz Herrera, y al ver en peligro su vida, René Alejandro Chávez Roa lo abatió. Ninguno de estos dos agentes, ni Alfredo Galaviz y Antonio Ulloa, quienes también participaron, admiten que el occiso les pidió llamar a la ambulancia mientras moría, como dos testigos lo declararon ante el Ministerio Público.

“Lo que no digan los policías lo va a decir la mecánica de lesiones y la mecánica de hechos, eso nos permitirá saber si le dispararon corriendo o en el piso, de cerca o de lejos, de frente o de espaldas”, advirtió un investigador de la Fiscalía General del Estado.

“Sabemos que algo encubren porque tenemos claro que alteraron la escena del crimen, ellos aseguran que Bravo disparó y declaran que ellos le dispararon 12 o 14 veces, pero  no encontramos ni un solo casquillo”, agregó.

Autor(a)

Rosario Mosso Castro
Rosario Mosso Castro
Editora de Semanario ZETA.
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