Alrededor de 200 elementos de la policía de la Ciudad de México y de la Policía de Investigación trasladaron al Reclusorio Sur a 17 detenidos vinculados al atentado perpetrado contra el secretario de Seguridad Ciudadana de la capital del país, Omar García Harfuch, el viernes pasado.
En sendos comunicados, la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México informó que se habían trasladado a 12 hombres tras el atentado en contra García Harfuch, hecho en el que tres personas perdieron la vida y cinco más resultaron lesionadas.
En una primera etapa, el representante social de la Coordinación General de Delitos de Alto Impacto solicitó a un juez de control se efectúe la audiencia inicial en la que formulará imputación en contra de las personas detenidas en inmediaciones del lugar del atentado, por su probable responsabilidad de los delitos de homicidio, homicidio en grado de tentativa y portación de arma de fuego de uso exclusivo de las fuerzas armadas, añadió.
“El juzgador en turno del Sistema de Justicia Penal Acusatorio concedió la celebración de la audiencia por lo que, durante la madrugada de este domingo 12 hombres fueron trasladados para ser puestos a disposición de la autoridad jurisdiccional, quien determinará su situación jurídica”.
Por la tarde -expuso la dependencia- se trasladó a cinco personas (tres hombres y dos mujeres). Entre ellos estaría José Armando Briseño de los Santos, alias “El Vaca”, quien presuntamente es el autor intelectual del atentado, y está identificado como jefe de los sicarios del Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) en Tonalá, Jalisco. El cual fue arrestado en cateos a inmuebles en Tláhuac, en el sur de la capital del país, el 26 de junio pasado.
“Una vez que las primeras doce personas quedaron a disposición de la autoridad jurisdiccional esta madrugada, el representante social de la Coordinación General de Delitos de Alto Impacto determinó el traslado de las cinco personas referidas, quienes fueron detenidas como resultado de diversas diligencias realizadas por personal de la Fiscalía General de Justicia y de la Secretaría de Seguridad Ciudadana en la alcaldía Tláhuac, donde se aseguraron sustancias con características de droga así como diversas armas de fuego”, agregó la FGJCDMX.
Según el periódico El Universal, el traslado al Reclusorio Sur participaron dos unidades blindadas conocidas como “Rino”, donde estuvieron los detenidos, mientras cámaras del C5 vigilaban el trayecto ante el temor de que integrantes del crimen organizado pudieran tratar de rescatarlos.
Se prevé que esta tarde, un juez del Tribunal Superior de Justicia local determine la legalidad de los acusados en una sesión judicial que será a puertas cerradas por la epidemia de coronavirus.
CNDH EXHORTA A ACKERMAN A RESPETAR DERECHOS HUMANOS DE PERIODISTAS
Este domingo, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) exhortó al académico de la Universidad Nacional Autónoma de México, John Ackerman a respetar los derechos humanos de los periodistas.
Ello, luego de que el aspirante a ser consejero del Instituto Nacional Electoral expresara en Twitter que “los sicarios del narco son la contracara del sicariato mediático”, al compartir un video sobre el atentado que sufrió García Hafuch el viernes pasado.
El organismo rechazó las expresiones de Ackerman y lo llamó a conducirse con civilidad y respeto a los derechos humanos de los periodistas, e indicó que las expresiones del también esposo de la secretaria de la Función Pública Irma Eréndira Sandoval Ballesteros pueden contribuir a agravar las condiciones en las que los comunicadores hacen su trabajo.
“La violencia contra los comunicadores ha sido ampliamente documentada por la propia Comisión Nacional, y es esta una batalla que tenemos que librar evitando, entre otras cosas, la estigmatización y el descrédito de las y los profesionales de la comunicación”, abundó la CNDH en un comunicado.
El viernes pasado, luego de las expresiones de Ackerman, el Comité para la Protección de los Periodistas (cuyas siglas en inglés son CPJ) calificó de “irresponsable” el lenguaje empleado por el académico de la UNAM contra el gremio periodístico.
Ante ello el CPJ manifestó que “durante los últimos años” los periodistas en México “han sido caracterizados como sicarios, incluso por parte de funcionarios públicos”, lo cual redunda en un “lenguaje irresponsable”, que “expone aún más a la prensa en un contexto de incesante violencia e impunidad”.
