Familiares y amigos de Kevin Alejandro Leyva, así como de Rubén Chávez Pérez, se manifestaron en la glorieta donde se ubica el monumento de Cuauhtémoc, en la Zona Rio, para exigir que las autoridades les den respuestas sobre el paradero de ambos, quienes fueron privados de la libertad el 17 de mayo en una residencia ubicada en la colonia Obrera en Tijuana.
La de este domingo 14 de junio fue la segunda marcha realizada por las familias, la primera la organizaron el 3 de junio.
De manera pacífica los manifestantes llegaron a la glorieta y colocaron mantas y pancartas con consignas en contra del Gobierno y así como con los datos generales de los jóvenes para que la comunidad los apoye a localizarlos.
Bertha Karina Pérez Paz, madre de Rubén Chávez Pérez, expresó que ya casi se va cumplir un mes desde que su hijo y Kevin Alejandro fueron plagiados y ninguna autoridad les ha dado algún avance de relevancia.
Cristina Leyva, madre de Kevin Alejandro Rodríguez Leyva, dijo que después del 3 de junio, cuando fueron atendidas por el Fiscal Central, Hiram Sánchez Zamora, hubo más acercamiento con quienes investigan el caso, sin embargo, siguen sin tener alguna información que las haga sentir que la investigación avanza.
Ambas madres aseguraron que quieren saber ¿qué pasó con sus hijos? y si las autoridades no lo hacen ellas harán su propia investigación.
“No me voy a quedar callada, no nos vamos a quedar callados, son dos muchachos que tienen toda una vida por delante. Queremos respuestas, es lo único que le exijo al Gobierno, repuestas, ya es un mes, es mucho tiempo”, señaló Bertha Karina Pérez Paz.
“La última vez nos mandaron llamar para hacernos unas pruebas, nos sacaron sangre, y hay más contacto, pero nadie nos dice nada”, dijo Cristina Leyva.
El día de los hechos, por la tarde del domingo 17 de mayo, vecinos de Kevin le reportaron a Cristina Leyva que unos hombres que preguntaban por Rubén se llevaron a los 2 jóvenes con violencia.
Kevin Alejandro Rodríguez Leyva, trabajaba como recepcionista de un hotel, además de ser entrenador del equipo de futbol americano Gorilas Football, Rubén Chávez Pérez, trabajaba en una sucursal de KFC y fue jugador del equipo que entrena su amigo Kevin.
