Ricardo Rodríguez Vargas, renunció a su cargo como director del Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado (INDEP), mismo en el que permaneció un año y 10 días -llegó al mismo el 21 de mayo del 2019-, según lo informaron los diarios El Universal y Milenio, basados en fuentes gubernamentales.
“De acuerdo con los funcionarios consultados, el motivo de la salida de Rodríguez fue porque su encargo era el de de transformar un organismo opaco sobre el destino de los recursos públicos en una institución transparente con cuentas claras a la ciudadanía, misión que ya fue cumplida, dijeron”, señaló El Universal. La renuncia se hará efectiva a partir del próximo 15 de junio, detalló Milenio.
Según este último rotativo, Ricardo Rodríguez les informó a los trabajadores del organismo descentralizado de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), que, “después de esta decisión, espera indicaciones de sus jefes para seguir trabajando a favor del Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador”.
Antes, Rodríguez Vargas fungió como director general del Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE), dependiente de la SHCP. Ya en su nuevo cargo, el ahora ex titular del INDEP organizó la primera subasta “con sentido social”, donde se pusieron a la venta vehículos de lujo, y cuyos recursos fueron entregados a municipios pobres de Oaxaca.
Apenas el 26 de mayo pasado, el todavía titular del Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado, entregó un cheque por 250 millones de pesos a la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero Dávila, para los premios que se otorgarán a médicos y enfermeras que atienden a los pacientes infectados con coronavirus SARS-CoV-2 (que causa la enfermedad COVID-19).
Según Rodríguez Vargas, se trata de recursos obtenidos de cuentas de delitos contra la salud, corrupción y otros procesos judiciales, porque “vamos a apoyar con los recursos para reconocer la labor heroica de nuestros médicos y enfermeras”, dijo durante la conferencia de prensa matutina presidencial.