Alejandro Ruiz Uribe, delegado federal único en Baja California, señaló que los derrumbes en las colonias Sánchez Taboada, Lomas y Cumbres del Rubí, Alfonso Ballesteros y Laderas de Monterrey, son consecuencia de una mala planeación de gobiernos municipales y estatales anteriores, donde se privilegió a los empresarios y no a la comunidad.
“Es la historia del pasado reciente, que autoridades anteriores no hicieron caso, y si lo hicieron, fue para beneficiar a los empresarios que provocaron los derrumbes”, dijo.
A través de una transmisión en vivo, donde se dedicó a responder preguntas de los medios de comunicación, el funcionario federal comentó a ZETA que en el caso de Lomas del Rubí, ya se está en la etapa de construcción de nuevas viviendas, en el fraccionamiento Verona, y se espera que para octubre y noviembre estén listas las casas.
En cuanto a los vecinos de Sánchez Taboada, el gobierno del Estado consiguió recurso federal, para otorgar dinero para que puedan rentar, en lo que se construyen nuevas viviendas en la zona de Cueros de Venado, en donde se pretenden construir más de 100 casas.
“Desde luego va a haber gente que se va a oponer, pero es la mejor solución posible. Lo ideal hubiera sido que no se hubieran caído las casas, debido a autoridades irresponsables que se llevaron a personas del Río a una zona que ya tenía este problema geológico”, mencionó.
En cuanto a Cumbres del Rubí, Ruiz Uribe reconoció que el problema tiene años, pero apenas salió a la luz hace unos meses, ya que el gobierno de Francisco Vega de Lamadrid no les entregó el catálogo de problemas, “así como no entregó cuentas claras en ninguna rama”.
Mientras que en la colonia, donde ya hay 13 casas impactadas, el gobierno estatal se comprometió a realizar estudios de suelo, y ver su situación geológica, y prevenir lo sucedido en la Sánchez Taboada, aunque admitió que sus residentes están algo recelosos con las autoridades.
Y en lo correspondiente a Laderas de Monterrey, recordó que al ex gobernador Alejandro González Alcocer, le regalaron una casa en la zona, que también se derrumbó.
“En ese fraccionamiento, los permisos de construcción fueron entregados por José Guadalupe Osuna Millán y Kiko Vega, en su calidad de alcaldes, y hay que voltear a ver el porqué otorgaron permisos, cuando no se verificó la calidad de la tierra y las consecuencias son lo que están viendo”, expresó.