Empresarios del sector de la construcción en México expresaron su beneplácito sobre la decisión del gobierno federal para considerar esta actividad como esencial, y permitir su reactivación a partir del 1 de junio próximo.
Víctor Manuel Escobar Sánchez, presidente estatal de la Asociación Mexicana de Ingenieros Constructores de Baja California (AMIC BC) aseguró que “todas y cada una de las empresas constructoras del estado y del país estaremos al pendiente de que se respeten y apliquen las medidas y protocolos de seguridad y sana distancia”, que son necesarias ante la epidemia del virus SARS CoV2 (COVID-19).
Desde el 12 de mayo, Eduardo Ramírez Leal, presidente nacional de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción CMIC, celebró la “decisión del Consejo de Salubridad General de incluir a la construcción en la lista de actividades esenciales, los constructores aplicaremos los protocolos de salud e higiene necesarios para proteger la salud de nuestros trabajadores y de la comunicad en general”.
En su cuenta de Twitter destacó que la CMIC elaboró un protocolo para el regreso a las obras de construcción, el cual contempla “medidas estrictas y necesarias” para proteger la salud de los 6.1 millones de trabajadores del sector.
El documento destaca la relevancia de esta industria que activa a 185 de 262 ramas económicas en el país, y establece 28 medidas preventivas dirigidas al personal de las obras, entre las que destacan: designar a un coordinador COVID-19 en sitio para asegurar el cumplimiento de las medidas de seguridad y proveer equipo de protección personal como mascarillas, caretas, lentes y guantes al personal. Estas tareas serán responsabilidad de gerentes y supervisores de las obras.
El personal del sitio deberá usar adecuadamente el equipo de protección personal y aquellos empleados con síntomas relacionados a coronavirus deberán ausentarse del lugar de trabajo, y contactar al supervisor y al servicio de salud.
Además de limpiar y desinfectar frecuentemente estaciones de trabajo, herramientas, equipo y cabinas de vehículos.
En las obras se establecerán filtros de acceso y personal que tenga fiebre u otros síntomas relacionados con COVID-19 deberán ser regresados a sus casas y buscar atención médica y aislarse. Al personal sospechoso se le enviará a cuarentena de 14 días a sus casas.
Las empresas motivarán a sus empleados a traer sus alimentos y termos y establecer horarios escalonados de hora de comida, así como limitar el acceso y uso de aparatos y utensilios compartidos, como cafeteras, dispensadores de agua, microondas, entre otros.
Al respecto el presidente de la CMIC en Mexicali, José Inzunza Ronquillo, dijo que las 80 empresas que integran esta organización en Baja California ya están incluyendo en sus costos la implementación de las medidas sanitarias.
“Tratar de no meter a todos en una sola parte a mucha gente, sino únicamente meter a los indicados, estar repartiendo los oficios. Si una construcción tiene dos o tres cosas que tienes que hacer, pues entonces metes uno en una parte, al carpintero en otra y al albañil en otra, para que no se estén cruzando. Va a tardar un poquito más en hacerse la construcción, pero el personal estará un poco más protegido”.
“Como en el gremio se trabaja mucho a destajo, casi toda la gente está de acuerdo con que se siga trabajando con todas las precauciones y con todo lo que se tiene que hacer, porque son personas que si no trabajan no ganan. En las constructoras únicamente el área administrativa es muchas veces el personal que está en nómina, pero casi todo el personal de oficio trabaja por destajo”, agregó.
Tanto Escobar Sánchez como Inzunza Ronquillo se pronunciaron a favor de que los tres órdenes de gobierno liciten más obras con el fin de reactividad al sector, que ya traía rezagos desde antes de la epidemia.
En entrevista con ZETA Inzunza Ronquillo comentó que este organismo empresarial está proponiéndole al Ayuntamiento de Mexicali adelantar el programa de obra pública y ver la manera de agilizar las licitaciones.
“Ver la manera de que dar anticipos, y de que se le pague a las empresas a las que se les quedó debiendo antes de la pandemia, para poder teniendo flujo y seguir trabajando”, agregó el líder empresarial, sin precisar el monto del adeudo y el número de compañías afectadas.