La delegación del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Hidalgo, asignó a Cyber Robotics Solutions, propiedad de León Manuel Bartlett Álvarez -hijo del director general de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Manuel Bartlett Díaz-, un contrato por 31 millones de pesos para la adquisición de 20 ventiladores respiratorios.
Según un reportaje realizado por la organización no gubernamental Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), cada equipo fue vendido en un millón 550 mil pesos, que es el precio más alto desde que se declaró la emergencia sanitaria por el coronavirus SARS-CoV-2 (COVID-19).
La adquisición se dio con una diferencia de hasta 85 por ciento, en comparación con el ventilador respiratorio más barato, ello a pesar de que los ventiladores que venderá al IMSS son fabricados por la marca mexicana Imágenes y Medicina S.A de C.V., y no deberá asumir el costo de importación.
El contrato a Cyber Robotics fue asignado el pasado 17 de abril por el IMSS y ese mismo día la delegación del Instituto en Hidalgo pagó 880 mil pesos a otro proveedor llamado Conduit Life, por un ventilador de similares características, pero importado de Eslovaquia.
En la revisión de contratos realizada por MCCI, se compararon los precios pagados por el Gobierno Federal por ventiladores de similares características, descritos por el Consejo de Salubridad General como “equipo electromecánico controlado por microprocesador, de soporte de vida para apoyo ventilatorio en pacientes que tienen comprometida la función respiratoria”.
Según la ONG, desde el pasado 27 de marzo, cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador firmó un decreto para que el Gobierno Federal pudiera adquirir de manera directa y sin licitaciones equipo médico, se han efectuado 30 procedimientos de asignación para la compra de ventiladores respiratorios.
El IMSS realizó el pasado 30 de marzo, la primera compra de equipo médico a Levanting Global Servicios LLC, empresa que se comprometió a entregar dos mil 500 respiradores provenientes de China, a un precio promedio de 888 mil pesos.
Ese mismo día, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) asignó a la empresa Gestión en Riesgos de Desastres SA de CV, el contrato para comprar 1,330 ventiladores originarios de China y España, cada uno a un precio de 898 mil pesos.
El 20 de abril, el IMSS acordó pagar 983 mil pesos por ventiladores provenientes de Estados Unidos a la empresa Bidcom Energy, y el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) asignó, al día siguiente, un contrato a Médica D SA de CVM para comprar cada equipo en 980 mil pesos.
Luego, el pasado 29 de abril, la empresa Comercial de Especialidades Médicas SA de CV obtuvo un contrato para vender a la delegación del IMSS en Guanajuato, un total de 40 ventiladores fabricados en Alemania, cada uno a un precio promedio de 826 mil 455 pesos.
El pasado 16 de abril la jefatura de Servicios Médicos del IMSS solicitó a través de un oficio, realizar el proceso de contratación para los ventiladores, “un bien indispensable para brindar atención médica a los derechohabientes”. Ese mismo día solicitó cotizaciones a los proveedores, entre ellos a la empresa de Bartlett Álvarez.
Un día después, el 17 de abril, tras evaluar las propuestas económicas, el IMSS determinó que Cyber Robotics Solutions suministraría los ventiladores para el Hospital General de Zona con Medicina Familiar número 1 de Pachuca, Hidalgo.
Según el reportaje de MCCI, la jefatura de Servicios Médicos del IMSS adjudicó a otra empresa llamada Conduit Life un contrato por dos ventiladores respiratorios, cada uno con un costo unitario de 880 mil y 1 millón 110 mil pesos, respectivamente.
Los representantes de las dos empresas debieron presentarse el 30 de abril para firmar el contrato y la vigencia de la garantía, que será de 18 meses. El fallo de la adjudicación está firmado por Salvador Cháidez Hernández, titular de la Coordinación de Abastecimiento y Equipo del IMSS.
LA EMPRESA “FANTASMA” DEL HIJO DE BARTLETT
Cyber Robotics Solutions fue constituida el 20 de marzo de 2010 por Alejandro Marina Vales, socio de Bartlett Álvarez, según consta en el acta constitutiva con folio mercantil 414723, inscrita en el Registro Mercantil de la Ciudad de México.
Según el reportaje de MCCI, ambos son los apoderados generales de una filial espejo registrada en Panamá el 11 de marzo de 2019, en la que figuran como supuestas accionistas dos empleadas de un despacho legal especializado en crear empresas offshore “o de gaveta” (es decir, que carecen de instalaciones y sólo existen en el papel).
Un reportaje de Arelí Quintero para el portal del periodista Carlos Loret de Mola Álvarez, difundido el pasado 24 de septiembre de 2019, reveló que Cyber Robotics Solutions es propiedad del hijo de Bartlett Díaz, y que desde su creación en 2010, había obtenido cerca de 800 millones de pesos en contratos por la venta de equipo médico al ISSSTE y a hospitales de la Secretaría de Salud (SSa) Federal.
El reportaje aseguró que la empresa había obtenido su primer contrato con la administración del presidente López Obrador, el pasado 12 de marzo de 2019, a través de una adjudicación directa de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), por 2 millones 209 mil pesos, para el “mantenimiento preventivo y correctivo” del sistema Da Vinci, un robot utilizado para cirugías.
MCCI indicó que corroboró que en los anteriores procesos de licitación de equipo médico del IMSS, León Manuel Bartlett Álvarez ha sido el responsable de presentar la propuesta económica de Cyber Robotics, como apoderado de la empresa, misma que se dedica a la distribución de equipo médico de alta tecnología, construcción y equipamiento de centros oncológicos y hospitales, según describen en su página de internet, donde también aparece en el directorio su filial en Panamá.
FILIAL PANAMEÑA CON PRESTANOMBRES
Cyber Robotics Panamá SA -filial de la empresa mexicana de Barlett Álvarez- fue constituida el 11 de marzo de 2019, con la presencia del notario público Hermes Ariel Ortega Benítez. El acto se formalizó en el despacho de abogados C&M Cedeño y Méndez, ubicado en Urbanización Obarrio Calle 60, en la ciudad de Panamá.
Como supuestas dueñas e integrantes del Consejo de Administración, el notario anotó a cuatro empleadas del mismo despacho en que fue constituida la empresa, según documentos obtenidos por MCCI). En el acta, se menciona que el día de la creación de la filial, comparecieron María Pía Bandera Alvarado y Anayansi Ávila Vásquez, ambas de nacionalidad panameña, quienes se asumieron como las únicas dueñas de la compañía.
En su perfil de Linkedin, Bandera Alvarado menciona que es asociada junior del despacho C&M en el que se constituyó la empresa, mientras que Ávila Vásquez aparece como accionista y directiva en más de 500 empresas en Panamá; es decir, según MCCI, “se trata de una prestanombres”.
El reportaje de la ONG indica que ese mismo día, Zanya Segundo, fue nombrada como presidenta de Cyber Robotics Panamá SA, ello a pesar de ser asistente administrativa en C&M y de participar como supuesta integrante en más de 200 empresas de Panamá. La tesorera de la compañía es Ritza Almengor, otra empleada en el despacho de abogados, e involucrada en 180 empresas panameñas.
En el acta constitutiva se menciona que la empresa se dedicará principalmente a la renta, venta, administración, fabricación, ensamble, reparación, servicios de mantenimiento de equipo médico, electromédico, laboratorio, curación y de diagnóstico, ortopedia, prótesis, medicamentos, y en general, cualquier equipo que se relacione en uso o práctica médica.
El capital social de la filial es de diez mil dólares, dividido en 100 acciones comunes con valor de 100 dólares cada una. En la cláusula 14 del acta constitutiva quedó establecido que las dueñas e integrantes del Consejo de Cyber Robotics Panamá SA, otorgaron poder general a favor de León Manuel Bartlett Álvarez y de su socio Alejandro Marina Vales.
El poder es para que tanto el hijo del director general de la CFE, como Marina Vales, actúen en nombre y representación de la empresa en Panamá y en cualquier parte del mundo, con las siguientes facultades:
Para que adquieran bienes raíces y administren los bienes inmuebles a favor de la sociedad mercantil; para que celebren en nombre y representación de la empresa toda clase de contratos relativos a la administración y especialmente la compra, venta y negociación de acciones, títulos valores.
Además, el poder otorgado fue para que en nombre de la empresa celebren con los bancos e instituciones de crédito contratos de cuenta corriente o de crédito, abrir cualquier clase de cuenta bancaria, depositen en ellos los dineros de la empresa y ejecuten toda clase de operaciones bancarias, con facultad para firmar cheques, endosar documentos negociables o evidencias de obligación, constituir garantías y hacer, en fin, todo cuanto la empresa pudiera hacer en persona.
El acta indica, que en general, se dio poder “para que León Manuel Bartlett Álvarez y Alejandro Marina Vales asuman la personería de la empresa siempre que lo consideren necesario, pues el poder que para ello se requiere se confiere ampliamente y sin restricción alguna”.
BARTLETT ÁLVAREZ DECLARA VIVIR EN CASA DE SU PADRE
Ante el notario panameño, Bartlett Álvarez aportó como su domicilio el ubicado en Calle Sierra Aconcagua 510, en Lomas de Chapultepec, en la Ciudad de México, que es la casa es propiedad de su padre, el actual director general de la CFE.
En la investigación que entre septiembre y noviembre de 2019 realizó la Secretaría de la Función Pública (SFP) sobre los bienes de Bartlett Díaz, se identificó que dicho domicilio pertenece a una empresa en la que el funcionario federal ha sido accionista.
El inmueble es propiedad de Cawaret SA de CV, que fue constituida el 3 de noviembre de 1997, y en la que tiene participación accionaria otra empresa de nombre Comercial Lebasi SA de CV. Esta segunda compañía fue declarada como suya por Bartlett Díaz, y por lo tanto, tiene participación en la casa que su hijo reportó como su domicilio en el acta constitutiva de la filial de Cyber Robotics en Panamá.
El pasado 20 de diciembre, el presidente Andrés Manuel López Obrador defendió al director de la Comisión Federal de Electricidad, por las denuncias por corrupción en contra del funcionario, mismas por las que un día antes fue exonerado por la Secretaría de la Función Pública (SFP).
Durante su conferencia de prensa matutina, el mandatario nacional sacó un pañuelo blanco e instó a la oposición a comprobar que existe corrupción en su Gobierno. “Y los reto a que me tapen la boca. No somos iguales, ahora que están pasando por un mal momento dicen: ‘Bartlett es corrupto’. No, pruébenlo”, dijo.
“El señor es el director de la CFE, a ver ahí, ¿cuáles son las tranzas?, los contratos entregados como se hacía antes, por influencia”, retó el presidente, quien, además, se deslindó el pasado de Bartlett Díaz y enfatizó que la investigación de la SFP ya determinó que el funcionario federal no incurrió en corrupción durante su administración.
“Ahora, lo que hizo antes eso se juzga y cada quien tiene que responder. Pero entiendo que la denuncia que se presentó fue por su desempeño en esta administración y eso es lo que se resolvió”, insistió el titular del Poder Ejecutivo Federal desde el Palacio Nacional.
“Además yo tengo en estos casos un criterio que considero amplio, no se puede solo acusar sin pruebas, yo fui opositor mucho tiempo y presenté denuncias, pero siempre probé, siempre, nunca me presentaron una denuncia por calumnia”, indicó el político tabasqueño.
“Tenemos que ser muy objetivos, muy profesionales, si hay una denuncia de corrupción sobre todo en lo que corresponde al Gobierno que represento, si hay un servidor público corrupto no solo se va a su casa, se va a la cárcel”, advirtió López Obrador, un día de después de que Irma Eréndira Sandoval Ballesteros, titular de la SSP, dio los resultados de la investigación a Bartlett Díaz.
“Una vez agotadas las diligencias de investigación, respecto al posible conflicto de interés, se concluye que el señor Manuel Bartlett no tiene algún conflicto de interés, el investigado no tiene control o injerencias en dichas empresas, que pertenecen a sus hijos”, dijo la funcionaria federal en conferencia de prensa.
“Durante este periodo el único cargo que ocupado es de es el de la Comisión Federal de Electricidad, por ello solicitamos a la contraloría una copia de las declaraciones patrimoniales […] para rechazar categóricamente que en la nueva SFP se proteja a alguien”, abundó Sandoval Ballesteros.
La titular de la SFP informó que se recibieron tres renuncias promovidas por el Partido Acción Nacional (PAN), y otras más por el de la Revolución Democrática (PRD), las cuales se sustentaron por una investigación periodística, en la cual se dieron a conocer presuntas irregularidades en la declaración patrimonial de Bartlett Díaz.
Previamente, Sandoval Ballesteros explicó que sobre este tema la SFP fue “muy cuidadosa”, además aseguró que “todo el caso será muy transparente”, se ha actuado conforme al marco normativo aplicable, y así se hará hasta el fin de la presente administración federal.
La funcionaria federal aseguró que la dependencia actúa con plena libertad y autonomía. Asimismo, afirmó que en este Gobierno Federal no hay intocables, ni perseguidos, además de que su actuación no ha sido, ni será, por consigna, ni arbitraria, sino conforme a la ley.
LA INVESTIGACIÓN DE LA SFP
La SFP inició en septiembre pasado una investigación en torno a las propiedades, empresas e ingresos de Bartlett Díaz, y los de su pareja sentimental, Julia Abdala Lemus, así como la de sus respectivos hijos.
Sobre el posible enriquecimiento oculto y ocultamiento de conflicto de intereses, la SFP informó que el titular de la CFE no faltó a la veracidad en sus declaraciones patrimoniales, ni respecto al segundo tema, con la finalidad de encubrir el incremento en su patrimonio o el uso y disfrute de bienes o servicios.
En torno a los bienes de su pareja, la SFP dijo que Bartlett Díaz no estaba obligado legalmente a declararlos, conforme a la ley vigente, debido a que no tienen el carácter de cónyuges o concubinos, porque no hay entre ambos un vínculo matrimonial conforme a la legislación civil, ni cumplen los criterios jurídicos para considerar que están unidos en concubinato.
En relación con los bienes inmuebles a nombre de los hijos del servidor público, tampoco existía la obligación legal de manifestarlos en sus declaraciones, al ser mayores de edad y no depender económicamente de su padre, señaló Sandoval Ballesteros.
Sin embargo, precisó que si bien Abdalá Lemus no es esposa ni concubina del investigado, a partir del próximo año todos los servidores públicos deberán declarar todos los bienes de las personas con las que tienen un vínculo sentimental. Es decir, en 2020 Bartlett Díaz deberá rendir cuentas del patrimonio de su pareja.
Acerca de la participación del funcionario en diversas empresas, la investigación de la SFP no pudo acreditar que haya pretendido ocultar el incremento en el patrimonio o el uso y disfrute de bienes o servicios de Bartlett Díaz, que no sea explicable o justificable.
Respecto al conflicto de intereses, la SFP indicó que de acuerdo con las constancias recabadas, en la temporalidad de los hechos denunciados y hasta la fecha, Bartlett Díaz no tiene ninguna injerencia en la administración o control de las empresas por las que fue cuestionado en las denuncias presentadas, como tampoco ha intervenido en la atención, tramitación o resolución de asuntos relacionados con las mismas.
LA POLÉMICA DECLARACIÓN DE BARTLETT
Bartlett Díaz aclaró el pasado 27 de septiembre, que desde hace 20 años Julia Abdala Lemus es su pareja sentimental, pero aseguró que no tiene concubinato, ni matrimonio con ella, sin embargo, aseveró que eso no significa que niegue su “afortunada relación”.
Antes, el funcionario federal aseguró que sus hijos no fueron incluidos en su declaración patrimonial y de intereses, porque no dependen económicamente de él, como tampoco existía “vínculo jurídico alguno” con Abdala Lemus.
“Felizmente, Julia Abdala es mi pareja sentimental desde hace más de 20 años. Aclarar jurídicamente que no hay concubinato ni matrimonio, no significa negar mi afortunada relación. La campaña en mi contra ya no solo es falaz sino cobarde y misógina”, tuiteó Bartlett Díaz.
Algunos usuarios de las diversas redes sociales criticaron al funcionario federal de negar su relación con Abdala Lemus, luego del reportaje titulado ‘Bartlett S.A. de C.V.’, en el que se dio a conocer que el político poblano omitió en su declaración presentada ante la Secretaría de la Función Pública (SFP) cuando inició en el cargo de titular de CFE, su relación con 12 empresas, y 23 casas, cuyos propietarios son sus hijos o su pareja sentimental.
“Yo no estoy protegido por el presidente, agradezco su confianza expresada en múltiples ocasiones, pero sé que él es implacable en contra de la corrupción […] No tengo ningún bien, no tengo ninguna posesión más allá de lo declarado en mis declaraciones patrimoniales”, aseguró Bartlett Díaz, ayer 26 de septiembre, además de calificar como “invenciones” los reportajes firmados por Arelí Quintero, publicados en el medio digital del periodista Carlos Loret de Mola Álvarez.
“De 2001 a 2017, la familia Bartlett constituyó diez sociedades, cinco encabezadas por su pareja Julia Abdala Lemus y cinco por su hijo León Manuel Bartlett Álvarez. Y en otras dos, el titular de la CFE participa directamente: ambas fueron creadas antes del año 2000 y están aún vigentes en el Registro Público de la Secretaría de Economía”, señaló el periodista, el pasado 24 de septiembre, en su columna de opinión ‘Historias de reportero’, publicada en el diario El Universal.
Según Loret de Mola Álvarez, una de las empresas de Abdala Lemus, pareja sentimental de Bartlett, llamada JAL Consultoría Especializada, ofrece servicios relacionados con el sector en el que Bartlett Díaz tiene responsabilidad pública: fibra oscura y ahorro de energía.
Por su parte, León Manuel Bartlett Álvarez encabeza la compañía Cyber Robotics, que en la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador ya obtuvo un contrato por más de 2 millones de pesos, una asignación directa de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), afirmó el periodista.
El pasado 11 de septiembre, el presidente López Obrador respaldó a Bartlett Díaz, titular de la Comisión Federal de Electricidad, ello luego de que la Secretaría de la Función Pública abrió una investigación al funcionario público por sus bienes patrimoniales.
El titular del Poder Ejecutivo Federal aseveró desde el Palacio Nacional, que se siente “muy satisfecho” con el trabajo de Bartlett Díaz, quien con su trabajo “ayuda a limpiar de corrupción” a la CFE, y dijo que “los opositores” quieren confundir con el propósito de enrarecer el ambiente.
Durante su conferencia de prensa matutina, el mandatario nacional expresó que los intentos de desprestigio contra Bartlett Díaz no prosperarán, pero dijo, además, que respetarán el derecho de disentir y se va a investigar “absolutamente todo”, y que no habrá impunidad.
“Podría parecer un contrasentido, porque nuestros adversarios los que se dedicaron a saquear, que ahora son opositores quieren confundir y hacer creer que somos iguales y no es así […] Estos reportajes tienen que ver con los grupos de interés creados que lucraron con la llamada política neoliberal, que no fue más que una política de pillaje, por eso los ataques a Manuel Bartlett”, afirmó el político tabasqueño.
“Si no se ponía orden en la Comisión Federal de Electricidad iba a desaparecer, recuerden ustedes que el propósito de los que se sentían dueños de México era desaparecer Pemex y a la CFE, y se esmeraron para lograr ese propósito”, acusó López Obrador.
El presidente aclaró, además, que hay quienes dicen que Loret de Mola Álvarez salió de la cadena Televisa porque lo pidió su Gobierno, pero que eso “es mentira, es una calumnia, nosotros somos respetuosos de la libertad de expresión”.
Por su parte, el titular de la CFE indicó que jamás lo han acusado de corrupción, además de que destacó que cada año presenta su declaración patrimonial a la SFP, institución de la que, dijo, aprecia inicie una investigación, “porque estoy seguro que mis datos son correctos”.
“He presentado cinco años anteriores como establece la ley para que puedan tener un conocimiento preciso de cómo se fue construyendo ese patrimonio […] En todos estos años he manejado recursos en diversas funciones y todo está en la declaración patrimonial”, abundó Bartlett Díaz.
El funcionario federal agregó que la investigación periodística encabezada por Loret de Mola Álvarez, es falsa, ya que “me atribuye propiedades que no son mías. No hay manera de que haya escondido esas cantidades”, afirmó el titular de la CFE.
“Casi me atribuyen la propiedad de una manzana, pero lo importante es la instrucción del presidente, que tenemos que aclarar el patrimonio de toda una vida, repito jamás se me ha acusado corrupción alguna, en este caso se me atribuye una propiedad que no es mía”, insistió Bartlett Díaz.
LA INDAGATORIA DE LA SFP CONTRA BARTLETT
La Secretaría de la Función Pública abrió la noche del lunes 9 de septiembre, un expediente para investigar la declaración patrimonial y de intereses del director general de la CFE, Manuel Bartlett Díaz, derivado de una denuncia ciudadana anónima recibida a través del Sistema Integral de Denuncias Ciudadanas (SIDEC).
Según detalló en un comunicado la institución cuya titular es Irma Eréndira Sandoval Ballesteros, “[la denuncia ciudadana] será atendida de forma rigurosa, imparcial y apegada a la legalidad en las oficinas centrales de la Función Pública, a través de la Dirección General de Denuncias e investigaciones”.
La SFP resaltó que una vez concluidas todas las etapas del proceso, informará sobre los resultados de la indagatoria, a fin de cumplir con el compromiso del Gobierno de México de transparentar la vida pública, y de seguir “implacable en su lucha contra la corrupción”, además de refrendar “su compromiso de cara a la ciudadanía de dar puntual seguimiento a las denuncias por presuntas faltas administrativas de todos los servidores públicos”.
“La apertura del expediente concuerda con la convicción de la Secretaria Sandoval Ballesteros de, como ha sostenido previamente, no hacer un uso faccioso de la institución y que no se investiga por consigna, sino siempre en respeto a la legalidad”, indicó la SFP en su comunicado.
El pasado 28 de agosto, un reportaje reveló que el titular de la CFE del Gobierno encabezado por Andrés Manuel López Obrador, tiene un “imperio” inmobiliario de 25 propiedades (23 casas y dos terrenos) con un valor aproximado de más de 800 millones de pesos, ello a pesar de en su declaración patrimonial que hizo pública el pasado mes de enero, aseguró que tiene una fortuna de 51 mdp e ingresos anuales por 11 millones en moneda nacional.
Sin embargo, minutos después de que la SFP anunciara la apertura del expediente sobre la denuncia ciudadana, el director de la CFE negó, otra vez, a través de su cuenta de la red social Twitter, tener dichas propiedades y se ofreció a colaborar con la institución en su investigación.
“Como dije antes, es falsa la información sobre los inmuebles que se me atribuyen; mi declaración patrimonial está en regla […] La @SFP_mx ha abierto una investigación y presentaré toda la documentación e información que se me requiera”, tuiteó Barlett Díaz.
El pasado 29 de agosto, el titular de la CFE sostuvo que el periodista Carlos Loret de Mola Álvarez y la reportera Areli Quintero, quien hizo la investigación, montaron un “sainete” con mentiras y afirmaciones que, enfatizó, rechaza categóricamente.
El pasado 30 de agosto, el titular de la CFE había emitido un comunicado para asegurar “bajo protesta de decir la verdad”, que lo que indicó en su declaración patrimonial, misma que hizo pública el pasado mes de enero, es su único patrimonio que posee, “ni un peso más ni un peso menos”, aseveró.
“Frente a los señalamientos sin prueba alguna que han circulado en los medios de comunicación, expreso mi categórico rechazo”, agregó Bartlett Díaz en el comunicado difundido por la propia CFE.
EL REPORTAJE SOBRE LAS PROPIEDADES DE BARTLETT
Un reportaje publicado en la página de noticias del periodista Loret de Mola Álvarez, y firmado por la reportera Areli Quintero, encontró que la fortuna del ex gobernador de Puebla es 16 veces más grande que lo que reportó en su declaración patrimonial. Y esto sólo en propiedades, mismas que ha adquirido a través de familiares, empresas y presuntos prestanombres.
Bartlett Díaz, quien en la actualidad milita en el Partido del Trabajo (PT) y por el cual fue senador, se desempeñó durante el sexenio de Miguel de la Madrid Hurtado como secretario de Gobernación (SEGOB), y durante la administración de Carlos Salinas de Gortari, fue titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP).
El político poblano aseguró en su declaración patrimonial que es dueño de dos edificios y tres locales. Dos de ellos los compró en la década de los setenta del Siglo pasado, mientras otro fue una herencia materna en 1998, y en el 2001 adquirió dos terrenos contiguos en Tacubaya, en la Ciudad de México.
Sin embargo, a partir de 2001, cuando Bartlett Díaz había dejado de ser gobernador postulado por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), y se vuelve senador por primera vez con el PT, dejó de registrar los bienes a su nombre. “Y justo a partir de esa fecha, se multiplicaron de forma acelerada los inmuebles a nombre de su pareja, Julia Elena Abdala Lemus, y de los hijos que ambos tienen de matrimonios anteriores”, según lo indica el citado reportaje.
Con base en documentos inscritos en el Registro Público de la Propiedad, la familia del político poblano empezó a adquirir “vertiginosamente” casas y departamentos en las zonas más caras de la Ciudad de México: Polanco, Reforma, Tecamachalco, la Roma y, “su preferida”, Lomas de Chapultepec.
En esta última colonia, los familiares del titular de la CFE tienen, en conjunto, al menos 11 propiedades en un radio de 2 kilómetros, todas situadas en esquinas, en los alrededores de la zona de embajadas, “ubicación privilegiada, y fueron adquiridas a sorprendentes precios de ganga”, por lo que “es casi su colonia”, dice el reportaje.
Julia Elena Abdala Lemus, tiene a su nombre nueve de las 25 residencias que ha adquirido la familia en los últimos 20 años. Dos de dichas propiedades de la pareja sentimental de Bartlett Díaz fueron compradas con sólo tres meses de diferencia. Así era hasta el pasado mes de julio, cuando se obtuvieron las copias en los registros oficiales de la Ciudad de México.
La pareja sentimental del titular de la CFE es hija de un fabricante textilero de ascendencia libanesa. Al igual que él, ella es originaria de Puebla, en donde realizó estudios de periodismo e historia. Ha dicho que conoció a Bartlett Díaz -con quien tiene una diferencia de edad de 30 años- cuando lo entrevistó para un programa de televisión local, por lo que formaron una pareja sentimental desde 1999.
Según el reportaje publicado en el medio digital de Loret de Mola Álvarez, no hay registro de que Abdala Lemus -quien en la actualidad preside una fundación llamada Casa de las Mercedes- fuera dueña de algún inmueble o empresa antes de su relación sentimental con Bartlett Díaz.
“Su afición por los bienes inmuebles se inició en octubre de 2003, cuando su pareja era senador de la República. Adquirió la casa ubicada en Fray García Guerra 175, en Lomas de Chapultepec. La construcción de 736 metros cuadrados en un terreno de 500 metros aparece con el sensacional precio de compra de 4 millones 500 mil pesos. De acuerdo con inmobiliarias de la zona su precio comercial estaría en un rango de 48 a 70 millones de pesos”, dice el reportaje.
“Sus compras siguieron en julio de 2006, con la casa ubicada en Lord Byron número 28, en Polanco. Esa propiedad es reconocida no solo por su deseada ubicación para las inmobiliarias sino por el operativo que realizó ahí la PGR en 2016 para detener a José Juan Janeiro [Rodríguez], abogado que presuntamente diseñó la cadena de empresas fantasma que permitió a Javier Duarte [de Ochoa], ex gobernador de veracruz, desviar recursos públicos”, abundó la investigación.
Solo tres meses después de dicha compra, en octubre de 2006, Abdala Lemus adquirió una casona antigua en el número 14 de la calle Flora, en la colonia Roma, de la capital de la República. Para su siguiente compra eligió la llamada “milla de oro” del Paseo de la Reforma: dos departamentos, el 2106 y 1601, del hotel de lujo St Regis, una de las cadenas más exclusivas del mundo.
El primero departamento la pareja sentimental de Bartlett Díaz lo compró el 26 de enero de 2010, y el siguiente, en julio de 2011. Según las escrituras públicas, por cada uno de estas propiedades Abdala Lemus pagó poco más de 4 millones y medio pesos. Sin embargo, el precio comercial actual de las mismas es de 22 millones de pesos.
“En 2012, la compra de inmuebles por parte de Julia Abdalá alcanza niveles desesperados. En julio de 2012 adquirió una casa en Sierra Mojada 523-A, en Lomas de Chapultepec. Tres meses después, octubre de 2012, una más, en Prado Norte 325. Y otros tres meses después, otra, en avenida Tecamachalco 146, Lomas de San Isidro. Esta vez es copropiedad con los hijos de Manuel Bartlett, León Manuel y Alejandra Bartlett Álvarez”, abundó el reportaje.
“Este periodo de furor inmobiliario coincide con el regreso al senado de Manuel Bartlett. En marzo de 2015, la pareja del senador lopezobradorista compra otra casa en Las Lomas, en Sierra Vertientes 645. Las propiedades de su pareja fueron omitidas en la declaración patrimonial del director general de la CFE. No están casados”, dice la investigación firmada por Areli Quintero.
“En Las Lomas. Media manzana. Son tres casas en una. Uno de sus lados ocupa toda una calle de Sierra Aconcagua en Las Lomas de Chapultepec, da la vuelta hacia Paseo de las Palmas y termina a la mitad de esa avenida. Una mansión. Desde el aire pueden verse sus amplios jardines y palmeras y varias construcciones que ocupan los más de 2000 metros de terreno”, abundó el reportaje publicado en el medio digital de Loret de Mola Álvarez.
“En el registro público de la propiedad, esa casa ocupa los números 510 y 520 de la calle Sierra Aconcagua. En avenida de Las Palmas tiene el número 1410. Para quedarse con las tres propiedades, constituyeron una empresa llamada Cawaret SA de CV, y al día siguiente compraron la casa de Sierra Aconcagua 510. Según esto, pagaron 4 millones de pesos”, detalló la investigación periodística.
“Inicialmente la empresa compradora, Cawaret, no. Tenía nada que ver con los Bartlett. Pero poco a poco se fueron dando a conocer. León Manuel Bartlett, hijo del funcionario federal, se hizo comisario del Consejo de Administración, y su tía apoderada legal. Luego el propio Bartlett fue apoderado legal. Y sus dos hijos, Alejandra y Leon Manuel, consejeros, vocales y apoderados. Hasta el yerno entró de secretario del Consejo”, se afirmó en el reportaje.
“León Manuel y Adriana Bartlett Álvarez, hijos del primer matrimonio de Manuel Bartlett, fueron inscritos en el Registro Público con cinco propiedades. Las propiedades a nombre de León Manuel empezaron a surgir cuando él cumplía 24 años y salía de la universidad. Tres terrenos, uno de 10,000 metros cuadrados, en diciembre del 2010. Siguiente año, enero del 2001, compró uno mas de 2 mil 249 metros cuadrados. Tercero, de mil 959 metros cuadrados”, se lee en la investigación.
“En total, a sus 24 años de edad, el hijo de Bartlett ya tenía 14 hectáreas ni más ni menos que en Valle de Bravo. En diciembre de 2012, Leon Manuel Bartlett adquiere otra casa en Las Lomas, calle Sierra Fría. Y en julio de 2017, una más, en Cuarta Cerrada de Juárez 59, colonia Contadero. Alejandra Batlett, la hija, es propietaria desde 2016, en Lomas de Chapultepec, calle Sierra Nevada 410”, dijo el reportaje.
“Julio de Regil Abdala, hijo del primer matrimonio de la pareja de Manuel Bartlett, es dueño de un departamento en Polanco, en Seneca 350, esquina con Presidente Mazaryk. Se quedó con ella a los 24 años, trabajando como asesor en la CFE. El usufructo es de su mamá, Julia Abdala de Bartlett. Veinticinco casas después, el imperio inmobiliario de la familia luce potente. Algo así como Bartlett Bienes Raíces”, finalizó la investigación.