Para el personal de la Fiscalía General del Estado de Sinaloa, José Rodrigo Aréchiga Gamboa “El Chino Ántrax” es uno de los tres cadáveres localizados a las 09:30 horas del viernes 16 de mayo en el interior de la camioneta X5 BMW sobre un camino de terracería, en las inmediaciones del puente del Arroyo del Toro en la carretera a Sanalona al poblado Ayuné en Culiacán, Sinaloa,
El mismo viernes, los investigadores expusieron sus dudas, respecto a que uno de los hombres encontrados sin vida, fuera el sicario reportado como prófugo de la justicia de Estados Unidos desde el 6 mayo cuando sus oficiales de condicional informaron que no lo pudieron localizar en la casa de San Diego a donde fue remitido el 3 de marzo del 2020, para purgar 5 años de libertad supervisada.
Este domingo 17 de mayo, esperan la llegada de los peritos de la Fiscalía General de la República para que lo confirme la identidad del criminal a través de las huellas y ADN de su base de datos.
De acuerdo a la carpeta iniciada el viernes, José Rodrigo Aréchiga Gamboa “El Chino Ántrax” habría sido privado de la libertad la noche del 15 de mayo en una colonia de Culiacán, se lo llevaron en compañía de su cuñado y de su hermana Ada Jimena Aréchiga Gamboa, y horas más tarde, después de asesinarlos, abandonaron los cuerpos encobijados en el interior de camioneta de la mujer.
“El Chino Ántrax” fue detenido por la Interpol el 30 de diciembre del 2013 en Ámsterdam, y entregado a la justicia de Estados Unidos en julio de 2014, donde enfrentó cargos por tráfico de drogas realizado en un lapso de 5 años. Después, gracias a la entrega de 1 millón de dólares y su valiosa cooperación con información, le redujeron cargos y obtuvo una sentencia generosa, 87 meses de prisión y 5 años de libertad condicionada. Lo dejaron salir a la calle un mes antes y se desapareció.
Quien fuera el cabecilla de los matones al servicio de Ismael “El Mayo” Zambada, llevaba 6 años y 3 meses fuera del estado de Sinaloa y de la actividad del cártel. Además, durante el juicio en contra de Joaquín “El Chapo” Guzmán, se filtró la versión de que Aréchiga habría sido uno de los testigos protegidos en su contra y para tener una sentencia generosa, aportó información respecto a los operadores criminales y las células delictivas que sirven a los hijos del capo que aun gozan de libertad y poder en Sinaloa.
