Durante la madrugada del miércoles 22 de abril, la Policía Municipal localizó en el Bulevar Nogales del Parque Industrial Florido 1 en la Presa Rural, en Tijuana, el cadáver maniatado de un hombre, a quien le dispararon en la cabeza y tiraron en la calle.
El occiso acompañaba a José de Jesús, un comerciante de 40 años con tiendas de abarrotes en Tijuana y con residencia en Estados Unidos al momento de ser secuestrado, pero cuando los criminales se dieron cuenta que no tenía poder adquisitivo para pagar un rescate, lo mataron.
Como la víctima tiene también la nacionalidad estadounidense y se trata de un grupo delictivo que lleva varios secuestros y está relacionado con por lo menos veinte homicidios, de acuerdo a lo dicho en conferencia el 23 de abril por el fiscal central Hiram Sánchez, las autoridades estatales se apresuraron a resolver el crimen.
El comerciante fue rescatado la noche del mismo miércoles, y en la casa de seguridad fueron detenidos como presuntos responsables de los delitos de secuestro y homicidio seis hombres: Germán García Yera Hernández, de 37 años; Bruno Alexander Padilla Miranda, de 25; José Antonio Galeana Alcántara, de 26; Óscar Bautista Valencia, de 29; Luis Enrique Ávila Moreno, de 27 y con antecedentes por posesión de arma blanca en 2011; y José Eduardo Mascorro Delgado de 21 años, adicto y con varias detenciones por actos que inducen al vicio entre 2015 y 2019. Su madre está presa por secuestro.
También fueron aprehendidas tres mujeres: Estefanía Reyes Estrada, 23 años; Victoria Camila Espinoza Gallardo, también de 23; e Iliana Alicia Oliveros Casas, de 25, con antecedentes por robo de auto y portación de arma prohibida en 2014.
De igual forma, se aseguraron dos armas cortas, una camioneta y dos autos sedán.
Considerado las dos decenas de homicidios cometidos en total impunidad por el grupo, ZETA consultó a las autoridades captoras respecto a la pertenencia criminal de esta banda a alguno de los cárteles. La respuesta fue que si bien “suponen su filiación”, los elementos de prueba a disposición hasta el momento no los vincula con alguna de las mafias que operan en la Zona Este de Tijuana.