“La verdad y la justicia no siempre van de la mano”.
-Julio N. Berna
Para tratar de convencer al señor José Luis Castillo, padre de Esmeralda, quien aún conserva la esperanza de que su hija esté viva, le decían los fiscales lo siguiente: “Ya tenemos detenidos a unos por el arroyo, también que carguen con el homicidio de Esmeralda”. Él respondía: “No estamos de acuerdo en que en algunas personas caiga la responsabilidad, cuando estos no son culpables… al menos de la desaparición de nuestra hija. Si vamos a encarcelar a cualquier persona que se les ocurra a ellos, los delincuentes siguen afuera y pueden dañar a cualquier otra persona”.
Tanto la mamá de Lidia Berenice como el padre de Esmeralda, coinciden en que la indiferencia de las autoridades para el resto de las víctimas es mayor a partir de que se emitió la sentencia en el “Juicio del Siglo”. “No me olviden, falto yo”, reclama el padre de una desaparecida, que se une a una marcha feminista.
El menor de edad que fungió como principal testigo de cargo de identidad protegida, públicamente identificado con las iniciales LJRL y de apodo “El Güero”, fue detenido el 2 de abril del 2013 en la zona centro de la ciudad con 48 envoltorios de marihuana, de acuerdo a los expedientes del Ministerio Público que sirvieron de base para reintegración de la Carpeta de Investigación No.2104/212.
Tras su arresto, aseguró que tenía información en relación al homicidio de una mujer apodada “La Gata” y a partir de ese momento los agentes de la Unidad de Menores Infractores lo entregaron a la Unidad de Homicidios de Mujeres, “porque podría estar relacionado con la desaparición y muerte de Andrea Guerrero Venzor, Deisy Ramírez Muñoz e Idali Juache Laguna (mujeres halladas en el Arroyo)”, según se documentó en el informe policial complementado elaborado el 3 de abril del 2013, y que obra dentro de la carpeta de investigación que integró el Ministerio Público.
Antes del primer juicio por las víctimas del arroyo El Navajo, en el 2013, “El Güero” rindió al menos cuatro declaraciones ante la Fiscalía General del Estado de Chihuahua; en todas cambió su versión, según el registro.
Inicialmente, este “testigo estrella”- como fue denominado públicamente- dijo conocer a las ocho víctimas del arroyo El Navajo; luego agregó tres más y declaró respecto a 11. Al principio señaló que él y los integrantes del grupo delictivo “Los Aztecas”, habían secuestrado a dichas mujeres; después se descartó su declaración durante el desarrollo de la investigación. También agregó el nombre de los presuntos implicados (que al principio no mencionó) y cambió versiones respecto a las personas que secuestraron a las mujeres. Además, identificó a través de fotografías a los acusados, que en un principio no reconoció.
En relación a Jesús Damián Pérez Ortega, apodado “El Papachu”, LJRL los señaló como el principal responsable de secuestrar a las mujeres; pero Ortega fue sentenciado en 2007 a 10 años de prisión y a pagar una multa cuatro mil 861 pesos por el delito de transportación de marihuana, dentro de la Causa Penal número 170/2005. Obtuvo su libertad y salió el 4 de diciembre de 2012, cuando las víctimas del Navajo ya habían sido asesinadas y localizado los restos óseos; así lo informo la titular de la Secretaría de ese juzgado, en el llamado “Juicio del Siglo”.
De acuerdo al análisis de la sentencia del denominado “Juicio del Siglo”, al principio el testigo dijo que los otros integrantes del grupo al que pertenecía, solo eran “halcones” en el centro de la ciudad fronteriza de Ciudad Juárez; pero ya en el juicio declaró que se dedicaban a la distribución de drogas, homicidio, trata de blancas y extorsión.
Benigno Licea González es Doctor en Derecho Constitucional y Derecho Penal. Fue presidente del Colegio de Abogados “Emilio Rabasa”, A. C. Correo: liceagb@yahoo.com.mx
