Trabajadores del sector salud en Tijuana han sido orillados a comprar su equipo de trabajo para evitar contagiarse de COVID-19, porque en las instituciones de salud no les proporcionan los insumos suficientes.
Pero además del desabasto, se enfrentan a los sobreprecios por parte de algunos proveedores que están aprovechándose de la situación.
Durante toda la mañana y parte de la tarde del lunes 13 de abril, se mantuvo una larga fila a las afueras de la empresa Industrial Safety, ubicada en la colonia El Porvenir, y donde poco más 500 médicos y personal de enfermería, -algunos sin haber tomado un descanso después de su jornada laboral-, esperaron cerca de seis horas para ingresar a comprar su equipamiento, que va desde guantes, cofias, gorros, cubre bocas, lentes, batas y overoles.
En un recorrido realizado por Semanario Zeta, se habló con trabajadores de diferentes clínicas del IMSS quienes por seguridad prefirieron no dar sus nombres.
Una de ellas, enfermera de la clínica número 7 del Instituto Mexicano del Seguros Social (IMSS) del área de medicina preventiva, no alcanzó a formarse en la fila porque ya habían llegado al tope de personas que iban a ser atendidas. Explicó que en la clínica 7 continúan atendiendo urgencias y otros pacientes, y que al inicio de la jornada laboral, les proveen de un cubre bocas que no resiste las ocho horas de trabajo, que al no haber suficientes, se esterilizan para ser reutilizados.
“Yo me compré una careta protectora porque sigo atendiendo pacientes, yo hago exámenes de mama y checo el azúcar; esas caretas me costaron 220 pesos cada una, me he hecho mis propios cubre bocas porque no teníamos suficientes al principio, me los cambio cada tres horas. En una semana he invertido cerca de mil 200 pesos. Ahora me van a cambiar a otra área porque se necesita personal; ocupo googles, gorro, overol, botas, guantes, y el precio depende de la calidad del material”, indicó.
Añadió que los cubre bocas N91 con filtro, los están encontrando en 250 pesos cada uno, mientras que el overol puede hallarse en 300 y 400 pesos. Sin embargo, ante la demanda, se ha topado con lugares donde están aumentando los precios. Puso de ejemplo que la careta que compró y que tuvo un costo de 220 pesos, en un principio estaba 150.
“Me gusta mi trabajo por eso seguimos allí, pero es incierto e inseguro, más porque tenemos familias que proteger también, no se trata solo de vocación, se trata de proteger lo que amamos, así que sí queremos seguridad”, sentenció.
Otra enfermera también del IMSS pero de la clínica 20, donde se están atendiendo a personas con COVID-19, narró que hay pocos insumos y se le dan principalmente a quienes trabajan con personas que tuvieron un resultado positivo. Destacó que sí han tenido donaciones de equipo por parte de la ciudadanía, pero no siempre es suficiente, por eso acudió a comprar los suministros que no le han entregado.
“Yo necesito overoles, mascarillas N95 y googles o caretas, pero no las he encontrado en otro lugar. Se compra material depende de lo que haya, me parece que aquí sólo hay cajas de mil 300 pesos que incluyen 10 mascarillas, sin contar los demás materiales, de comprar todo el equipo gastaría como unos dos mil 500 pesos, y me duran cerca de tres semanas”, detalló.
También señaló que en otros lugares han subido los precios, que intentaron venderle una caja de mascarillas N95 con 20 unidades, hasta en 7 mil pesos, lo cual hace imposible la compra de estos insumos por parte de personal médico. A la fecha no han sido informados si en el IMSS les compensarán el gasto que estén realizando por su cuenta.
“En caso de estar en contacto directo con pacientes COVID-19 me dan suministros para el turno, pero las caretas, los googles y los overoles que nos están dando, son donaciones que han hecho. El IMSS te da una bata desechable, guantes, un gorro y el cubrebocas N95, y tenemos que durar hasta 11 horas sin poder ir al baño ni a comer”, agregó la enfermera.
El gerente de finanzas de Industrial Safety, Alejandro Jaques, compartió que se tomó la decisión de vender los artículos que les quedan en bodega a los empleados del sector salud, al enterarse que tenían dificultad para recibir equipo de protección y ante el aumento de precios por parte de otros negocios.
“Nosotros no nos dedicamos a vender equipo a médicos o la industria médica, nosotros le vendemos a la industria maquiladora, les vendemos insumos y equipos de protección. A raíz de la pandemia nos dimos cuenta que hay mucha gente que está necesitada de equipo de protección y vimos cómo se estaba incrementando los precios en el marcado, por lo que hablamos con nuestro principal distribuidor para ver si podíamos utilizar el equipo extra que tenían guardado en bodega, y se decidió venderse sólo a empleados del sector salud que lo demuestren a través de una identificación”, indicó Alejandro Jaques.
Esta iniciativa comenzó del lunes 6 al miércoles 8 de abril, recibiendo en promedio 500 médicos por día. Entre los artículos que más están comprando esta el cubre bocas N95, el cuál pronosticó que se les acabaría este mismo lunes debido a la demanda que ha tenido, además están adquiriendo cofias, cubre calzado, overoles. La empresa venderá hasta agotar existencia, y solicitó a la comunidad médica revisar su página (Industrial Safety México) para saber si tendrán más insumos en el futuro próximo.