El gobernador de Chihuahua, Javier Corral Jurado, calificó como un acto intimidatorio, el ataque armado en el que resultaron lesionados dos de sus escoltas, la mañana del domingo 23 de febrero a las afueras de la casa del mandatario en la capital del estado.
“Pretende ser, en el caso de nuestros agentes de seguridad personal, un mensaje intimidatorio, así lo contextualizamos… Vivimos un momento complejo, en donde los enfrentamientos y sobre todo estas agresiones cobardes, hacen reforzar todo tipo de cuidados y de medidas para que siempre estemos alertas”, refirió el gobernador de Chihuahua.
Destacó que el ataque armado, fue una respuesta por los golpes que su administración ha dado al crimen organizado, principalmente a las zonas de Madera y Cuauhtémoc, descarando que se haya tratado de un agresión en contra de su persona.
Por lo que, negó que vaya a aumentar su cuerpo de seguridad, toda vez que, confía en el trabajo y la capacidad de respuesta de los elementos que le resguardan.
En la rueda de prensa realizada esta mañana, el gobernador estuvo acompañado del fiscal, César Peniche, quien informó sobre la detención de tres personas, quienes fueron detenidas gracias al apoyo de la Policía de Tránsito, quienes los persiguieron hasta lograr someterlos.
Cabe mencionar que durante la tarde del domingo, se informó que entre los detenidos se encontraba un menor de apenas 15 años, sin que las autoridades confirmaran el hecho.
El ataque armado se dio a las afueras de la casa del gobernador Javier del Corral en el fraccionamiento El Campanario, cuando sujetos a bordo de un vehículo blindado detonaron sus armas en contra de los agentes Marco Antonio Carlos y Luís Arturo Mesa, quienes resultaron lesionados, pero ya reportan fuera de peligro.
