De cara a su primer presupuesto, Marina del Pilar Ávila reculó en sus intenciones de aumentar el Impuesto Predial en un 5%, pero mantuvo la modificación del valor catastral en algunas colonias y un gravamen a la construcción, el cual generó reclamos por parte del sector empresarial, donde se representó la primera confrontación con la presidenta municipal de Mexicali
Aunque la alza generalizada del Impuesto Predial en un 5 por ciento fue descartada por la alcaldesa de Mexicali, Marina del Pilar Ávila Olmeda, a escasos días de presentarse el proyecto al Cabildo, un nuevo conflicto se generó con el sector empresarial a raíz de un gravamen a la construcción que no fue consultado en ningún espacio y del que desconoce el impacto que generará.
Este sería uno de los puntos más destacables del proyecto de Ley de Ingresos y Presupuesto de Egresos que presentará la presidenta municipal al Congreso del Estado, donde también contempla aumentar la tasa de valores catastrales en varias colonias, lo que generaría un incremento hasta del 300% del valor en algunas comunidades populares.
Los proyectos ya fueron avalados por el Cabildo de Mexicali, de mayoría morenista, aunque mostró rechazo por parte de la oposición.
Al respecto, el regidor perredista Fernando Rosales, señaló algunos de los puntos más cuestionables definidos en ambos proyectos que fueron revisados el 2 de diciembre en la Comisión de Hacienda, y una semana después aprobados por el resto de los regidores.
Rosales aseguró que ellos se inconformaron por el incremento al Predial en un 5%, argumentando que afectaría a la ciudadanía en general, además de contravenir el plan de austeridad y la política de no incremento a los impuestos, expuesta por el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
Pese a ello, Movimiento Regeneración Nacional (Morena) intentaba continuar con el proyecto, pero un revés de la alcaldesa terminó con la discusión. Los ingresos que pretendían obtener con ello, serán sustituidos por una inversión de grandes proporciones que se realizará en la Zona Dorada de Mexicali, donde se pretende construir una torre de vivienda vertical con 80 condominios, entre otros proyectos importantes previstos para 2020.
Sin embargo, el regidor Fernando Rosales vaticinaba ya un problema con el impuesto a la construcción que presentó el paquete de Ley de Ingresos para 2020, pues si bien se incrementó el pago de derechos para la autoconstrucción, se amplió de 60 a 120 metros cuadrados, la tasa a pagar aumentó un 0.75% y tiene un tope de 4 millones de pesos, lo que repercutiría de sobremanera a cualquier construcción que supere estas medidas.
Según Rosales, el impacto se dará a las empresas constructoras y a la clase media alta, así como aquella que no cuenta con el sustento debido, lo que fácilmente abriría la posibilidad para que los constructores tramiten amparos.
Por su parte, Marina del Pilar Ávila aseveró que se trata de un impuesto simbólico que no causaría mayor impacto financiero, aunque existe la posibilidad de tramitar algún amparo.
Ante ello, la respuesta del sector empresarial tanto de la Cámara Nacional de la Industria de la Construcción (CMIC) como de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), levantaron la voz al considerar un acto irresponsable imponer un impuesto de esta naturaleza, sin haberlo consultado con el sector empresarial.
A través de comunicados de prensa, Jorge Inzunza Ronquillo y Ernesto Elorduy Blackaller, representantes de los gremios empresariales, reclamaron que no existen estudios ni análisis sobre el impacto que generaría un impuesto de este tipo a sus negocios.
Inzunza Ronquillo fue claro al decir que Ávila Olmeda estuvo presente en un desayuno días atrás para hablar sobre los proyectos venideros. Sin embargo, jamás explicó el tema, por lo que decidieron marcar su distancia y solicitar a los diputados no aprobar el nuevo tributo.
Rosales también denunció el impuesto a los valores catastrales, los cuales no se verán reflejados en el Impuesto Predial de 2020, pero reconoció que entrarían en vigor al año siguiente, al momento de realizar una compra de propiedades.
Afirmó que en colonias como Valle del Progreso, La Bodega y Armando Gutiérrez, hay incrementos en la tasa catastral hasta del 300%, lo cual representa un movimiento desmedido que logró amortiguarse, al no hacerse efectivo para el siguiente año. Mientras en zonas como San Pedro Residencial, una de las más exclusivas de Mexicali, solo tendrá un aumento del 25%.
Fernando Rosales, uno de los pocos regidores que mantiene oposición en la administración, criticó también la intención de destinar 25 millones de pesos para la rehabilitación del Centro Histórico de Mexicali. A su juicio, se trata de un recurso excesivo cuando existen otras prioridades, como el combate a la contaminación, no reflejado en el presupuesto. Y es que a la Dirección de Protección al Ambiente se le destinarán apenas 11 millones de pesos, es decir, menos de la mitad de lo estimado para la rehabilitación del primer cuadro de la ciudad.
De igual manera, se contempla mantener el arrendamiento de camiones de basura con Integradora de Apoyo Municipal, SA de CV, propiedad de Luis Humberto Montaño García, empresario ligado al Gobierno del Estado de México cuando estaba al frente el hoy ex Presidente Enrique Peña Nieto y el ex mandatario Arturo Montiel.
Para esto se contempla un recurso de 42 millones de pesos, lo cual no fue mal visto por el edil, salvo porque este fue precisamente uno de los puntos que más criticó durante la administración de Gustavo Sánchez Vázquez, pero ahora será el esquema que utilizará para su operación.
Será el martes 17 de diciembre cuando la alcaldesa de Mexicali presente su proyecto de Ley de Ingresos ante el Congreso del Estado, donde se ha anunciado que serán muy rígidos con el tema de los impuestos.
