Un total se 742 armas de fuego fueron destruidas esta mañana en las instalaciones de la Segunda Zona Militar, ubicada en Tijuana, como parte de las acciones de seguridad que el Gobierno Federal realiza en todo el país para mantener la estabilidad social y ciudadana.
De total de armas demolidas, 458 fueron cortas y 284 largas de diversos calibres, así lo dio a conocer el General de Brigada de la zona, Pablo Alberto Lechuga Horta.
Durante la ceremonia, el General señaló que para toda sociedad, un estado de seguridad es instintivamente clave para su productividad, sobre todo cuando incide de manera directa en cada persona, grupo o empresa.
Agregó que las armas en manos indebidas son símbolo de violencia y su uso ilegítimo son una ofensa a la paz social.
Razón por la cual desde el Gobierno Federal se llevan a cabo este tipo de actividades, que forman parte del nuevo plan de seguridad, con el objetivo de “construir una cultura de paz que va de la mano con instituciones y la población”.
El General refirió que en ese sentido se trabaja día y noche para garantizar la seguridad en todo Baja California, además con programas sociales y gubernamentales para combatir la delincuencia y bajar los índices delincuenciales.
Resaltó que este evento fue replicado en todos los estados de la República y las armas fueron proporcionadas por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
En lo que va del año se habían destruido mil 129 armas, más las 742 de este día, en total van mil 871 armas que quedaron fuera de las manos de la delincuencia, dijo.
Jaime Bonilla Valdez, gobernador del Estado, refirió que “es estimulante” que se lleven a cabo este tipo de eventos, sobre todo cuando son en coordinación con las autoridades y la comunidad.
Principalmente porque son con el fin de abatir la delincuencia “tan grande que nos invade en los últimos años, en los que Baja California no se queda atrás con los homicidios”.
El Gobernador resaltó que pese a que las armas están prohibidas, no lo parece, porque continuamente se presentan eventos delictivos.
Destacó también que los altos mandos “velan noche y día por nosotros, sé cómo se la juegan y tienen mi máximo respeto por ello”, razón por la cual puso a disposición su gobierno para seguirlos apoyando y trabajando de manera coordinada.