Federación modificará reglas de Comercio Exterior para permitir “regularización” de vehículos usados de procedencia extranjera, sin declaración de pérdida total en Estados Unidos y pagando impuestos
El mismo día que el pleno del Senado de la República desechó nuevamente incluir el Artículo 15 en el decreto de la Ley de Ingresos de la Federación (LIF) 2020, que permitiría legalizar los llamados autos “chocolate”, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) embargó en Tijuana 22 de los 52 vehículos decomisados en el país a lo largo de 2019.
De acuerdo con la administradora general de Auditoría de Comercio Exterior, Sylvia Saucedo, el fisco continuará con los operativos como el efectuado el 5 de noviembre de 2019 sobre el Bulevar Cucapah “no nada más en esta área de Tijuana, sino en toda la ciudad, donde tenemos identificados que es una práctica común la venta de estos vehículos”, advirtió.
Respecto a si los operativos subsecuentes también se harán sobre los autos irregulares que circulen por las vialidades, la funcionaria federal expuso a ZETA: “No se descarta que sea así. Facultades las tenemos y, conforme a la estrategia que vamos presentando ante las autoridades, vamos variando la forma de verificar la legal estancia de los vehículos”.
Abundó que en el operativo del martes participaron alrededor de 140 funcionarios públicos: 45 auditores del SAT, 60 elementos del Ejército Mexicano, 35 de la Guardia Nacional y “otros elementos de una fuerza especial que tiene el SAT”.
Se revisaron aproximadamente 60 unidades y se embargaron 22 (15 automóviles y siete camionetas) de diferentes marcas, como Toyota, Nissan, Volkswagen, Mercedes Benz, Ford y Honda, ya que no se exhibió documentación que acredite su legal estancia.
Los modelos son de mínimo diez años anteriores, por lo que alcanzaban las facilidades del decreto de importación de vehículos. Su valor estimado, considerando el precio de venta de estos en lotes, asciende en total a 1.8 millones de pesos.
Saucedo explicó que cuando la autoridad embarga un vehículo se finca un crédito fiscal que determina los impuestos omitidos, así como multas establecidas en la Ley Aduanera y por omisión de gravámenes como IVA e ISAN. Posteriormente, las unidades embargadas son transferidas al Servicio de Administración y Enajenación de Bienes.
La funcionaria negó que hubiera personas detenidas en el operativo de esta semana. No obstante, el Código Fiscal de la Federación tipifica como contrabando la introducción a México de vehículos sin cubrir los impuestos correspondientes, vía que se activa ante el Ministerio Público.
Agregó que la última vez que se hizo un operativo en la Zona Este de Tijuana (hace un año), se embargaron poco más de 60 vehículos.
El director adjunto de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), Guillermo Rosales Zárate, reconoció al SAT por el operativo, y se pronunció a favor de que este sea el inicio de un cambio en la forma en que se enfrenta el contrabando.
“Son muy pocos los autos embargados en comparación con la abierta forma en que venían operando los introductores, comercializadores y protectores de la circulación de los vehículos de contrabando”, manifestó el líder empresarial.
El miércoles 6 de noviembre, el gobernador de Baja California, Jaime Bonilla Valdez, dijo que la regularización de autos “chocolate” es un tema importante para la región, por lo que no lo soltarán. Mientras que el presidente municipal de Tijuana, Arturo González Cruz, consideró “positivo” el operativo del SAT, el cual no fue contra la ciudadanía, sino contra loteros que tenían autos irregulares en venta.
“El problema de la regularización no está fácil, ya vieron el voto del Senado, ya tenemos un parque vehicular que se ocupa identificar, porque muchos de los vehículos ‘chocolate’ se usan en delitos”, argumentó.
En entrevista con este Semanario, el representante de la AMDA afirmó que “el primer compromiso de alcaldes, gobernadores y del Gobierno Federal es combatir esas prácticas delictuosas”, y opinó que Bonilla Valdez debería sumarse a ese esfuerzo, en vez de alentar la proliferación del “contrabando rodante”.
Asimismo, desestimó el argumento de regularización de estos vehículos por un tema de inseguridad y consideró esa intención como una estrategia político-electorera.
Rosales Zárate pugnó por que el Gobierno de México prorrogue de nueva cuenta el decreto que regula la importación definitiva de vehículos usados (cuya vigencia termina en diciembre de 2019) “en sus términos, sin ninguna modificación, y que eso permita que continúe abierta la posibilidad de que haya una importación legal, sobre todo para atender los requerimientos de la franja fronteriza”.
En ese sentido, dejo entrever -como lo hizo recientemente el senador Ricardo Monreal- que la Federación podría emitir reglas generales de comercio exterior para permitir la importación de vehículos usados de procedencia extranjera sin que retornen al extranjero y vuelvan a ingresar al país.
Dichos cambios eliminarían subterfugios y “prácticas fraudulentas” que dañan a los consumidores, al fisco y generan un perjuicio al sector automotriz, al introducir vehículos que cuentan con declaración de pérdida total en Estados Unidos, “que mediante artilugios se blanquean los documentos para proceder a la importación”.
La AMDA tampoco está de acuerdo en eximir a quienes pretendan regularizar autos irregulares de los pagos que conlleva la importación formal, “mucho menos que se dé la regularización de vehículos con reportes de participación en actos criminales en Estados Unidos”, agregó el director adjunto.
Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía correspondientes a octubre de 2019, refieren que la producción de autos en México reportó una caída anual de 16.35 por ciento, la mayor en la historia de los registros, al producirse 60 mil 799 unidades menos que las de octubre del año previo.
En el décimo mes de 2019, se exportaron 252 mil 292 unidades, lo que significó un descenso anual de 19.52%, Mientras que las ventas retrocedieron 8.92% en el mismo periodo, puesto que en octubre de 2018 se comercializaron 107 mil 094 unidades
