El 17 de septiembre de este año fue detenido en Cabo San Lucas José Guadalupe Hernández Barrón, originario de Sinaloa y presunto autor intelectual del homicidio del director de Radio Kashana, el segundo periodista asesinado en BCS desde 2017
El 17 de septiembre de este año fue detenido en Cabo San Lucas, José Guadalupe Hernández Barrón, alias “El Lupito” o “El Javier”, originario de Sinaloa y vinculado como presunto autor intelectual del homicidio del director de Radio Kashana, Rafael Murúa Manríquez, ocurrido el de enero.
“El Lupito” era el eslabón que faltaba para dar justicia al segundo periodista asesinado en Baja California Sur; el primero fue Maximino Rodríguez Palacios, de Colectivo Pericú, el 14 de abril de 2017, y cuyo autor intelectual sigue sin ser juzgado o detenido.
El Moreno uno de los principales hombres a la orden de El Lupito o El Javier, era uno de los brazos armados de la Zona Norte.
La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) confirmó que en el caso de Murúa Manríquez, el detenido tiene vínculos con otros delitos, como desaparición de personas cometida por particulares y homicidio calificado; en esto último, de un joven conocido como Carlos Andrés Ramírez Ávila, desaparecido en septiembre de 2018 y encontrado en mayo de este año en una fosa clandestina en Mulegé.
“Tras la denuncia de los ofendidos por la desaparición de su familiar, el 23 de septiembre del 2018 en Bahía Tortugas, el agente del Ministerio Público de la Unidad Especializada en Investigación de Desaparición de Personas, peritos y agentes estatales de Investigación Criminal, iniciaron las indagatorias correspondientes y suficientes para obtener la orden de aprehensión en contra de José Guadalupe ‘N’ de 36 años”, confirmó Daniel de la Rosa Anaya, procurador general de Justicia del Estado.
José Guadalupe, alias “El Lupito” o “El Javier”, también utilizaba otros alias o nombres falsos, como Juan “N” o Conrado “N”, para poder atravesar el estado sin ser detectado. La autoridad dijo a ZETA que esta persona manejaba una célula delictiva dedicada a la desaparición de personas en el norte de la entidad; además, con operaciones en Los Cabos.
Se confirmó que el líder criminal fue buscado y ubicado mediante un operativo conjunto. Ya lo habían localizado, pero esperaron el momento en que no hubiera riesgos; fue así que, mediante un operativo ejecutado por elementos de la Agencia Estatal de Investigación Criminal y efectivos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), fue detenido sin realizar un solo disparo en el municipio de Los Cabos “tras contar con un mandamiento en activo por el delito desaparición cometida por particulares”.
Refieren las fuentes de inteligencia de la Procuraduría, que José Guadalupe fuera quien sufrió un percance vial con Rafael Murúa Manríquez, y que desde ese momento amenazó al comunicador, ordenando su privación de la libertad y asesinato, el cual se cometería aproximadamente un mes desde el incidente.
“Contra el imputado por el delito Desaparición de Personas Cometida por Particulares, hacemos mención que José Guadalupe “N” está relacionado con otras carpetas por este delito y por homicidio calificado. Uno de ellos -que está involucrado y que le habíamos compartido en la carpeta- como autor intelectual de la carpeta del periodista Murúa”, reiteró De la Rosa Anaya.
El procurador reveló que se ha ido avanzando en la judicialización de carpetas y expedientes; en lo que va de este año y el pasado, se ha incrementado el nivel de judicialización hasta un 500 por ciento, según revelan las cifras. Afirmó que la mayoría de los casos de homicidio se están judicializando; incluso algunos hechos recientes, como el asesinato del Policía Segundo de la Policía Municipal de La Paz -adscrito a la comunidad de El Triunfo de la Delegación de San Antonio- Jesús Salvador Sánchez Mendoza, ya se encuentra prácticamente resuelto y están por judicializar.
“Lo más que se judicializaba en 2017, en todo un año, eran 420 carpetas de investigación; el año pasado lo terminamos con dos mil carpetas, de todos los delitos. Crímenes de alto impacto, como es homicidio, desaparición, cualquiera de estos eventos delictivos; de enero a agosto, lo que llevamos judicializados son precisamente dos mil 80 carpetas de investigación”, celebró De la Rosa Anaya.
Carlos Andrés Ramírez Ávila fue privado de la libertad y después ejecutado cruelmente por El Lupito y sus cómplices, hoy es uno de los homicidios que lo mantienen tras las rejas.
En la actualidad, la PGJE trabaja sigilosamente con el expediente de “El Lupito” o “El Javier” para ponerle fin a la banda criminal que ha estado operando en la zona norte.
LOS CRIMINALES DEL NORTE
Desde principios de 2019, la banda criminal Zona Norte -encargada principalmente del trasiego de droga, venta al menudeo y desaparición forzada de personas- estaba en la mira de la Mesa de Seguridad Pública de Baja California Sur, sobre todo por la cantidad de denuncias que se habían recibido por personas desaparecidas.
Incluso hubo empresarios de aquella zona que se dirigieron directamente al Palacio de Gobierno para solicitar al propio gobernador del Estado, Carlos Mendoza Davis, que acabara con los homicidios dolosos y personas desaparecidas, situación que mantenía con preocupación a los habitantes -desde Santa Rosalía hasta Guerrero Negro- en el municipio de Mulegé.
“Era preocupante el poder publicar alguna información; estaba muy controlado todo, incluso los propios policías te amenazaban o recibías llamadas de miembros de la banda y te avisaban que, si no bajabas cierta información, te iría mal con ellos. La gente no podía denunciar los hechos con la Fiscalía en Santa Rosalía o Guerrero Negro; en mi caso, apenas llegabas a casa de poner la denuncia y ya te estaban hablando o ya te esperaban para amenazarte”, refiere un compañero de medios de comunicación en Mulegé.
La banda criminal fue desarticulada. El homicidio de Rafael Murúa Manríquez había escalada más allá de los límites de Mulegé; el hecho fue denunciado a nivel internacional y el gremio periodístico presionó a las autoridades.
Los presuntos criminales vinculados a proceso y que se encuentran tras las rejas son:
Héctor Mora García, “El Moreno”, operador de Mulegé Pueblo y Santa Rosalía.
Pedro Eduardo López Mendoza, conocido como “El Güerito” o “El Jaiba”, de 21 años y originario de La Paz, detenido la madrugada del 31 de enero; sicario de “El Moreno”.
Martín Salvatierra Amador, “El Martín” o “El Picaporte”, originario de Santa Rosalía e implicado como autor material del homicidio del comunicador; disparó hasta en tres ocasiones al comunicador de Radio Kashana.
Edson Reyes Reyes, alias “El Chucky”, “El 04” o “El Cuatro de la Baja”, controlaba Guerrero Negro, San Ignacio y Vizcaíno, con incursión en Mexicali, Tijuana y Ensenada (en Baja California).
Luis Santana Peña Nájera, “El Luisillo” o “El Luisito”, sicario y narcomenudista de “El Chucky”, y quienes participaron en la privación de la libertad de Héctor Humberto Banda Solís y Marco Antonio Ibarra González, cuyos restos fueron abandonados en el kilómetro 66 de la carretera Loreto-Santa Rosalía sobre, una cobija, el pasado 7 de abril del 2018.
José Guadalupe Hernández Barrón, alias “El Lupito” o “El Javier”, de Sinaloa; señalado como el autor intelectual del comunicador.
“Este grupo criminal se distinguió por operar los levantones y, al mismo, tiempo mantener el control de la venta de droga en la zona norte. Sus principales aliados, policías municipales y ministeriales, quienes les brindaba protección; algunos de ellos ya se encuentran señalados por los mismos sicarios y ya se les inició una carpeta de investigación. Unos han sido removidos de esa zona, otros permanecen; pero todo es estratégico, ya que en el sitio se ha revelado una nueva estructura criminal”, dijo a ZETA uno de los agentes de Investigación Criminal de la PGJE.
Los criminales se encuentran en procedimiento; lo cierto es que, según la PGJE, los propios cómplices del implicado revelaron las instrucciones, los modos y lugares en donde se deshicieron de las víctimas. “Fue así como se obtuvo una carpeta robusta, además de los hallazgos de los colectivos y familiares”, añadió el agente de Investigación Criminal.
LA CRUEL MUERTE DE CARLOS ANDRÉS
Carlos Andrés Ramírez Ávila, alias “El Menudo”, desaparecido el 23 de septiembre de 2018. Fue levantado por un comando armado en la comunidad de Bahía Tortugas; al momento en que fue privado de su libertad, según comentan familiares, fue visto por última vez vistiendo camisa rosa y pantalón de mezclilla. Desde ese domingo, la familia habría emprendido búsquedas con apoyo del Colectivo de Búsqueda BCS Sin Ellos No A.C.
Fue hasta un año después que Carlos Andrés obtuvo justicia, al capturarse a uno de los principales cabecillas de la célula que lo ejecutó.
“Desde siempre supimos que Carlos había sido decapitado y asesinado cruelmente; por ahí la familia recibió un mensaje en donde se le dijo cómo y por qué había ocurrido lo que pasó, pero desde luego que la familia no descansa hasta que tienes a tu tesoro. En ese momento es cuando el sufrimiento y la angustia termina”, reveló al Semanario uno de los cercanos a la familia Ramírez Ávila.
Rafael Murúa Manríquez, Director de Radio Kashana fue privado de la vida por el crimen organizado, chocó contra el auto de “El Lupito” o “El Javier”, quien ordenó su asesinato.
El 21 de mayo del 2019, “El Menudo” fue localizado en una fosa clandestina ubicada en Bahía Asunción, a 120 kilómetros de la carretera Pacífico-Norte, a la altura del kilómetro 87+100 del tramo Vizcaíno -Bahía Tortugas, municipio de Mulegé. El fallecido fue identificado por su madre por las prendas que vestía al momento de su desaparición.
“Su señora madre es quien hace el reconocimiento de la víctima, el joven aún vestía las prendas descritas tras su desaparición; para la familia era un secreto a voces que había sido asesinado cruelmente, pero el cuerpo no aparecía. Con su localización, su madre pudo hallar un poco de paz y hoy encuentra justicia tras la detención de José Guadalupe, detenido recientemente en Los Cabos por la Sedena y agentes de Investigación Criminal, atendiendo la Causa Penal J0092/2019”, informó el miembro de la Mesa de Seguridad Pública del Estado.
Justamente, colectivos de búsqueda de personas desaparecidas permanecen en el Pacífico Norte haciendo búsquedas de sus “tesoros”, como denominan a sus desaparecidos, pues afirmaron a ZETA que es un lugar poco tomado en cuenta (a pesar de las múltiples denuncias por desaparición de personas).
“Yo sé que pronto encontraremos a mi papá, no pierdo las esperanzas de que siga vivo. Donde quiera que estés, papi, te amo”, expresó Marissa Moreno, quien lleva mucho tiempo buscando a su padre.
El Colectivo de Búsqueda BCS Sin Ellos No, AC ha confirmado a este Semanario -en múltiples ocasiones- que las víctimas de desaparición se siguen registrando y las familias se sienten en abandono porque no siempre las autoridades acompañan a las búsquedas; es por ello que se requiere el funcionamiento en activo de la Comisión de Búsqueda de Personas Desaparecidas.
En la zona sur del estado siguen descubriendo fosas clandestinas; apenas la semana que pasó el Colectivo Búsquedas de Los Cabos hicieron el hallazgo, aproximadamente a cinco kilómetros del Puente “El Tule,” en Cabo San Lucas, del cuerpo sin vida de un masculino; el informe que se recibió fue a través de una llamada anónima que dio información sobre los restos de una persona sin vida.
“Los desaparecidos se han incrementado en los últimos tres meses, como la última vez que te dije; fue un mes muy difícil, el mes de junio, julio y ahorita el mes de agosto, ha incrementado en la zona sur, que es Cabo San Lucas y en La Paz”, refirió Iris Manríquez, fundadora del Colectivo Búsquedas por La Paz.
El jueves 22 de agosto, la familia Ramírez sufrió un duro golpe al seno familiar: su hijo, Iván Ramírez, fue privado de su libertad en pleno centro de La Paz. El joven, reconocido patinador, fue reportado por privación ilegal de su libertad por hombres armados; el reporte lo hizo su novia.
“Todo a ver si saben algo de mi hijo. Nosotros sabemos más lo que ella sabe, solamente ellos sabrán. Lo que queremos conocer es si está puesta la denuncia; que nos entreguen una copia de esa denuncia para que estemos conformes porque a nosotros no nos permiten. Soy su mamá y quiero que me traigan a mi hijo, como esté”, denunció María de Jesús Ramírez.
El Colectivo Búsquedas por La Paz dijo que activando los protocolos de búsqueda de inmediato es como podrán evitar que haya tantos desaparecidos; actualmente el colectivo lleva una cuenta superior a las 250 personas desaparecidas.
“Que hicieran caso en el momento que el familiar va a ir poner la denuncia. Y si cerraran las investigaciones correspondientes en ese momento, creo que mucha gente no estuviera desaparecida; pero no, se van a la semana, 15 días, a irse investigar a donde pasaron los hechos”, finalizó Iris Manríquez.
La única información que le brindaron a la familia respecto al caso del joven Iván Ramírez es que se lo llevaron cuatro personas armadas y encapuchadas desde su departamento. Y nada más. La familia pide a la ciudadanía que si tiene algún dato que dé con él, sería de gran ayuda.
