El huracán tocó tierra con ráfagas de viento de entre 120 y 150 km/h, golpeando sobre todo el sector rural de La Paz y parte de Los Cabos. Autoridades advierten que debido al cambio climático, la temporada de tormentas se extendió hasta el 30 de noviembre
Desde el 19 de septiembre, los sudcalifornianos sintieron los efectos del Huracán “Lorena” cuando tocó tierra en Los Cabos y La Paz, descargando su fuerza en Cabo Pulmo, ubicado en Cabo del Este en el municipio de Los Cabos.
La salida del meteoro fue por la zona rural de La Paz, ambos municipios fueron afectados gravemente, pues “Lorena” se mantuvo con vientos de huracán y lluvias de tormenta tropical.
Álvaro de la Peña Angulo, secretario general de Gobierno, expresó que la mayor afectación fue en zonas rurales, tramos carreteros y en menor proporción la zona urbana.
“El Gobierno del Estado de Baja California Sur solicitó al Fonden (Fondo de Desastres Naturales) la declaratoria de emergencia y desastre por el paso de ‘Lorena’, por ello sesionó el comité interinstitucional de evaluación de daños, junto con áreas técnicas de la Coordinación Nacional de Protección Civil a través de videoconferencia en tiempo real. Con lo anterior se inicia el proceso de documentación pericial y montos de las afectaciones a infraestructura pública, urbanas, rurales y carreteras, principalmente”, comentó.
Fue necesaria la Declaratoria de Emergencia y Desastre Natural para corregir las graves afectaciones en las zonas rurales de ambos municipios del sur, vías de comunicación, viviendas y otras afectaciones.
“Obtuvimos las declaratorias de Emergencia y de Desastre con el fin de tener apoyos suficientes para atender las afectaciones en las comunidades, desde luego hace falta atender los daños en los tramos carreteros, tenemos que corregir para que los ciudadanos no vuelvan a tener incomunicación”, afirmó Carlos Godínez León, subsecretario de Protección Civil de Baja California Sur.
Según expertos, en estos momentos el Pacífico mexicano se encuentra en el periodo crítico de formación de fenómenos meteorológicos, un ejemplo fue el huracán “Lorena”, que pegó con toda su fuerza a La Paz y Los Cabos, cuando se esperaba que bordeara por la costa y se disipara en el Pacífico. Pero atravesó la punta de BCS y se internó en el Golfo de California.
No obstante, “precisamente por el cambio climático que tenemos en el mundo, la temporada ciclónica se extendió del 15 de mayo hasta el 30 noviembre, entonces todavía nos queda un tramo importante que tenemos que estar muy atentos a lo que viene, todavía no ha terminado la temporada, por lo pronto vamos con muy buenos términos con la visita de ‘Lorena’”, afirmó De la Peña Angulo.
La intensidad del huracán Categoría 1 en la escala Saffir-Simpson, puso en alerta a la costa del Pacífico y Mar de Cortés, donde cientos de familias tuvieron que ser evacuadas de urgencia para evitar pérdidas humanas. Personas asentadas en invasiones, colonias en zonas de riesgo y puntos de inundación, fueron llevadas a uno de los 25 los refugios temporales.
“Tuvimos en términos generales más o menos mil 800 personas entre Los Cabos y La Paz, incluidas comunidades de la zona rural en La Paz, Todos Santos, El Carrizal, Los Barriles, Conquista Agraria; mil 800 más menos en términos generales entre Los Cabos y La Paz, con un saldo blanco”, dio a conocer Carlos Godínez León, subsecretario de Protección Civil del Estado.
Más de 250 personas se refugiaron en el albergue habilitado por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en la Universidad Autónoma de Baja California Sur (UABCS).
Aquí algunos testimonios de los ocupantes, como los de nombres María Vega, Amado, Ángela Ortiz y Martín Gutiérrez:
“Estoy en un cuartito donde no tiene techo ni ventana ni puertas”, “Mi casa no iba a resistir la lluvia y por eso tomé la decisión de venir aquí”, “Mi casa no tiene ventanas y se me mete todo el agua y se moja, y pues por eso estoy aquí”, “La casa donde vivo no tiene ventanas, son maderas y viene bien fuerte el aire, no vaya a ser que se tumbe toda la puerta cuando entre el aire”.
Al refugio temporal llegaron personas con discapacidad, adultos mayores, familias y mascotas que recibieron atención por parte de los elementos de seguridad.
Aunque fueron pocas las zonas de impacto, la descarga fue con ráfagas de viento de entre los 120 y 150 kilómetros por hora (km/h), golpeando sobre todo el sector rural de La Paz y parte de Los Cabos, donde “Lorena” descargó su máxima fuerza.
Desde el domingo 22 de septiembre fue emitida la Declaratoria de Emergencia por las autoridades federales para brindar atención a los afectados. “Lorena” no dejó la devastación que se esperaba al internarse rápidamente en el Golfo de California, pero afortunadamente incrementó su velocidad y salió del territorio estatal.
ZONA RURAL AFECTADA
“Actualmente se encuentran recabando y validando los comités de cada área, como el urbano, carretero, educativo, entre otros, por las afectaciones se sufrieron y para dar cuentas a la Federación. Se tiene la de emergencia y ahorita ya se cuenta con la de desastre para La Paz y Los Cabos”, comentó Carlos Godínez León.
La descarga de fuerza del meteoro fue de lleno en la zona rural de La Paz, afortunadamente los niveles esperados de lluvia no sobrepasaron los estándares pronosticados, de otra manera habría otra historia que contar.
“En algunos casos los techos se volaron, algunas bardas cayeron y hubo mucha precipitación, postes de luz en el suelo, también en El Sargento. No hemos podido comunicarnos con el delegado, pero hasta la información que teníamos fue mucho viento, mucha precipitación, al parecer un socavón en la parte del acceso para entrar al Sargento, La Ventana al igual, algunas techumbres que se volaron”, lamento Alejandro Mota Trasviña, secretario general del Ayuntamiento de La Paz.
“Tuvimos mucho miedo porque no esperábamos tanto, era mucho aire más que agua, gracias a Dios nos unimos, todos seguimos las instrucciones que nos dieron, que no saliéramos, mi hija se fue a comprar despensa temprano y nos encerramos, nadie salió, pero sí escuchábamos que salían cosas volando”, recordó María de los Ángeles, quien sufrió algunas pérdidas materiales.
Algunas viviendas tuvieron cuantiosos daños, cuyos costos de reparación no serán nada baratos, ya que se calculan en 50 mil pesos de reparaciones. “Lo más bajito unos 30 mil, lo mínimo, ya máximo de 50 mil para arriba, porque no es cualquier cosa reparar”, dijo Lucía Manríquez, cuyo vecino Daniel sufrió pérdidas menores, pero al final costosas.
“Tengo unos árboles y la rama voló, y pues aquí con los vecinos tumbó unos postes y unos árboles también. Con los daños de techumbre sí son cerca de 10 mil pesos con la lámina y los barrotes”, lamentó.
Afortunadamente entre los mismos habitantes se han estado apoyando en reparaciones, incluso los techos que se volaron fueron juntados por la gente y en espera de que alguien pueda reconocer sus láminas que, de no ser reclamadas, serán reutilizadas.
Además, mientras regresan a la normalidad, la ayuda entre vecinos también es muy notoria con la limpieza de las viviendas, las calles y un poco de comida para quienes prestan ayuda.
Mientras las autoridades presumen fotos de recorridos en la zona afectada., Daniel externó:
“Sería un llamado para el gobernador, que mire para estos lados, para esta población, porque nos vimos muy afectados en comparación de la Capital, aquí hay personas que se dedican a rancherías y son jornaleros, también fueron dañados”.
DESTRUCCIÓN EN CARRETERAS
Los mayores daños que dejó el paso de “Lorena” fueron socavones en la entrada a los poblados de El Sargento y La Ventana, de la misma manera en el Kilómetro 38 de la carretera La Paz- Los Planes, justo a la entrada de la comunidad.
Carlos Lascuráin, director de la Junta Estatal de Caminos (JEC), comentó que fueron más de 50 metros de carretera afectados por la corrida del arroyo, generando deslave al reblandecer la tierra debajo del asfalto, incluso al intentar reparar el tramo con apoyo de Servicios Públicos Municipales, la maquinaria quedó atascada y afectó por horas el tránsito alterno.
“El daño más importante que sufrió la red estatal de carreteras es ese socavón que tenemos en el Kilómetro 38 de la carretera La Paz -Los Planes, ahorita la prioridad es abrir paso en coordinación con el Ayuntamiento y la SCT por dos lados, para que por uno tenga acceso a vehículos y por otro lado estén trabajando”, expresó el titular de la JEC.
Además, desde el sábado 21 de septiembre, personal de la Dirección General de Seguridad Pública, Policía Preventiva y Tránsito Municipal de La Paz y de la Sedena iniciaron labores de limpieza tras el paso de “Lorena”. Personal militar y civil siguen cubriendo afectaciones.
“En este caso estamos llevando esta actividad, también en El Sargento no estamos descuidando lo que son los recorridos de sobrevigilancia sobre la zona, personal de la delegación anda aplicado porque tenemos que mejorar la imagen que nos dejó el evento climatológico, con muchos beneficios (lluvia)”, dijo Cruz Salvatierra Camacho, comandante de Peritaje de La Paz.
El servicio de agua potable ya fue restablecido en la zona, mientras se sigue trabajando para que la energía eléctrica sea restablecida a la brevedad.
UNA TORMENTA ERRÁTICA DESDE EL INICIO
“Lorena” fue un fenómeno tropical muy especial que se desarrolló en un momento en que factores climáticos propiciaron su desplazamiento: la temperatura del mar, la presión y la humedad.
Al inicio mantenía un desplazamiento hacia el nor-noroeste, planteaba recorrer el litoral por el Pacífico Mexicano y bastaron horas para que su trayectoria formara una curva que atravesaría el territorio estatal hasta llegar a Mulegé; de nuevo cambió, el ciclón pasaría por Los Cabos, apenas tocando una parte de San José del Cabo y se internaba al golfo, con posibilidad de ir hasta Sonora y Sinaloa.
De igual forma, atravesar Los Cabos por completo y tocar la zona rural de La Paz, dañando severamente a Buenavista en Los Cabos, Los Barriles, Los Planes, El Sargento y La Ventana. Su intensidad estuvo entre tormenta tropical y huracán Categoría 1, siendo la temperatura del mar un factor idóneo para su desarrollo.
“Una ebullición y nos tocó un momento crítico donde había cuatro eventos: ‘Kiko’, que ya se había ido; ‘Mario’, que estaba todavía presente; ‘Lorena’, que tomó un tránsito muy pegado al Macizo Continental y provocó que entrara al golfo, que es muy limitado el número eventos que entran por el golfo directamente, y otro más que está por formarse”, explicó Israel Camacho Gastélum, director Local de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Expertos prevén la formación de otro fenómeno tropical para la primera semana de octubre, el cual podría dejar afectaciones, pero están en guardia.
El desplazamiento y desenvolvimiento de “Lorena” fue errático para expertos de la Conagua, por lo cual se estuvo en extrema vigilancia, pues de una hora a otra cambió su trayectoria, fuerza e intensidad, incluso el momento que permaneció errático encendió las alertas.
“Errático dentro de los parámetros técnicos y científicos, pero hay protocolos para irse corrigiendo, una cadena de custodia cada cuatro horas. Esa ebullición y cierta atracción, por lo tanto, la predicción tan exacta se vio limitada, precisamente por ese conjunto de factores y su interacción”, reconoció el especialista.
Prácticamente “Lorena” tocó tierra en BCS como huracán, con fuertes vientos e intensas lluvias como de tormenta. Aunque muchas personas creen que no hubo afectaciones, las poblaciones donde sintieron la descarga, dan cuenta de su fuerza.
“La mayor precipitación fue en Los Planes, de 164 mililitros y en promedio andamos a 58, los números nos dan cuenta al último que el agua es el principal elemento, además del detonador de nuestro desarrollo, es vital, ya que no tenemos estaciones lluviosas y lo único en forma de nutrirse el Estado, es a través de eventos meteorológicos como el que acabamos de pasar”, finalizó el representante de la Conagua.