Con 321 votos a favor, 124 en contra y 1 abstención, el Pleno de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión aprobó este martes 8 de octubre los ajustes que hizo el Senado a la Ley Federal de Austeridad Republicana, para aplicar una restricción a funcionarios públicos del Gobierno Federal para emplearse en el sector privado en un período menor a 10 años.
Al aprobar la citada Ley el pasado 1 de mayo, los diputados habían establecido un periodo de cinco años y la medida sería para todos los servidores públicos. Sin embargo, en la Cámara alta se acotó la disposición a quienes ocupen altos cargos de la Administración Pública Federal -como Secretarios de Estado, subsecretarios y directores generales-, y se amplió el plazo a 10 años de no poder emplearse en el sector privado.
“Los servidores públicos comprendidos en los grupos jerárquicos de mando superior a que se refiere el Manual de Percepciones previsto en la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, que por cualquier motivo se separen de su cargo, no podrán ocupar puestos en empresas que haya supervisado, regulado o respecto de las cuales hayan tenido información privilegiada en el ejercicio de su cargo público, salvo que hubiesen transcurrido al menos 10 años”, dice la reforma aprobada.
El pasado 1 de mayo, con 387 votos a favor, cero en contra y 33 abstenciones, el Pleno de la Cámara de Diputados aprobó en lo general el dictamen de la Ley Federal de Austeridad Republicana, propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador y su partido, Morena.
Esta nueva Ley permitirá al titular del Poder Ejecutivo Federal decidir en forma discrecional, a través de decretos, a dónde irán los ahorros generados en el ejercicio presupuestal gubernamental. En la actualidad, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) destina dichos recursos y sólo puede hacerlo a programas prioritarios.
“Los ahorros generados como resultado de la aplicación de dichas medidas deberán destinarse en los términos de las disposiciones generales aplicables a los programas del ejecutor del gasto que los genere […] Por cuanto hace al Poder Ejecutivo Federal, dichos ahorros se destinarán a los programas previstos en el Plan Nacional de Desarrollo o al destino que por decreto determine el titular”, indica el dictamen.
Ese mismo día, López Obrador afirmó que los recursos presupuestales producto de ahorros se destinarán a programas de Gobierno. “Nosotros consideramos que la mejor manera es que todo lo que se ahorre se entregue a la gente, que sea para el bienestar del pueblo”, indicó el presidente en su conferencia matutina.
El mandatario nacional consideró que los ahorros como los que se obtendrán del recorte de asesores y direcciones en secretarías podrán ser destinados a programas para apoyar a personas con discapacidad o adultos mayores. Sin embargo, afirmó que su Gobierno seguirá informando al Congreso de manera trimestral sobre el uso de dichos recursos.
“Si ahorramos porque ya no van a haber tantos asesores o estas direcciones adjuntas, que se van a quitar todas, si va a haber ahorro, ya no se van a comprar vehículos nuevos para funcionarios, ni va a haber renta, entonces toda esa bolsa, todo eso que se obtenga se va a reasignar para dar más apoyos a personas con discapacidad”, aseguró.
“Para darle suficiencia presupuestal al programa de adultos mayores, para que se pueda aplicar el programa Sembrando Vida, pero eso lo tenemos que informar al Congreso […] Cada 3 meses tenemos que informar cómo va el ejercicio del Presupuesto, y además si hay una modificación tanto a la Ley de Ingresos como al Presupuesto pues se tiene que solicitar la autorización del Congreso”, abundó López Obrador.
“Que incluso es probable que en el transcurso del año se haga un ajuste al Presupuesto, una reasignación de recursos, tienen que haber transferencias en el marco de la ley y se hace poniendo a consideración de la Cámara”, dijo el presidente.