Tras participar en una reunión con líderes empresariales en Palacio Nacional, Norma Rocío Nahle García, titular de la Secretaría de Energía (SENER) del Gobierno Federal, aseguró que la refinería de Dos Bocas, Tabasco, avanza sin un solo día de retraso, y ya hay avances en las obras de cimentación del proyecto.
“[En la refinería de] Dos Bocas ya estamos trabajando en la conformación del sitio, la plataforma, ya está la draga holandesa haciendo el relleno del sitio, ya tiene varias semanas que empezó con eso, vamos muy bien, de acuerdo al programa vamos exactamente, ni un día de retraso”, aseguró la funcionaria federal.
Nahle García precisó que las empresas que ganaron en mayo pasado los nuevos paquetes de contratos licitados para la refinería ya están realizando trabajos en el sitio, “haciendo la ingeniería de detalle, ya visitaron el sitio, ya tenemos todos los estudios de mecánica de suelos”, expuso.
“Ellos [las nuevas empresas que llevan los paquetes] han ido a hacer nuevas mediciones de mecánica de suelo, lo cual es muy bueno, porque con el estudio de la ingeniería básica, pues, hay total coincidencia, entonces nosotros ya vamos en ello, vamos bastante bien”, sostuvo Nahle García.
Este lunes 30 de septiembre, Carlos Slim Helú, presidente de Grupo Carso; Carlos Salazar Lomelín, del Consejo Coordinador Empresarial (CCE); y Antonio del Valle Perochena, del Consejo Mexicano de Negocios (CMN); se reunieron con miembros de Gabinete Federal encargados de obras prioritarias, encabezados por el presidente Andrés Manuel López Obrador, para revisar el Programa Nacional de Infraestructura.
El pasado 2 de junio, en plena jornada electoral, López Obrador dio el banderazo este domingo para el inicio de la construcción de la refinería de Dos Bocas, ubicada en el municipio de Paraíso, en Tabasco, obra que según estimaciones del Gobierno Federal, deberá quedar concluida en mayo de 2022, con una inversión máxima aproximada de 160 mil millones de pesos.
“No se justifica que en 40 años no se haya construido una nueva refinería en el país. Se decide remodelar las seis refinerías existentes y garantizar la producción de gasolinas y poder ofrecer mejores precios a los consumidores”, afirmó el mandatario nacional.
El presidente explicó, además, que se eligió Dos Bocas por ser un lugar estratégico y porque llegan un millón cien mil barriles de petróleo diarios que abastecen las seis refinerías del país, lo que representa un ahorro, según afirmó.
“Esto es un beneficio para el sureste, es un acto de justicia para Tabasco y esta zona del territorio nacional debido a que han aportado al desarrollo nacional”, abundó el político tabasqueño, quien reiteró su compromiso de no van a aumentar los precios de las gasolinas, del gas y la electricidad en términos reales.
Según datos de la SENER, la nueva refinería producirá 340 mil barriles diarios, 170 mil de gasolina y 120 mil de diésel. Sin embargo, el presidente nacional de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Gustavo de Hoyos Walther, criticó que la construcción de la refinería de Dos Bocas inicie sin los permisos básicos.
El 13 de mayo, la calificadora Moody’s afirmó que la construcción de la refinería de Dos Bocas, en Dos Bocas, Tabasco, costará más de 12 mil millones de dólares debido a la falta de experiencia del Gobierno de México y de la paraestatal Petróleos Mexicanos (Pemex), por lo que presionará más los recursos fiscales.
“Dada la falta de experiencia del Gobierno y Pemex en la construcción de refinerías, es probable que el proyecto termine costando más y tomando más tiempo de lo que el Gobierno anticipa, colocando más presiones sobre los recursos fiscales”, señaló la calificadora en un comunicado.
“La última vez que Pemex construyó por sí mismo una refinería fue hace 40 años, a finales de la década de 1970, con tecnologías y procesos muy diferentes”, afirmó Moody’s, que añadió existe, también, la posibilidad de que el proyecto no se complete debido a la complejidad de llevarlo a cabo.
“Bajo este escenario, el Gobierno tendrá un gasto menor a 8 mil millones de pesos en consultorías, trabajos de preparación y otros gastos”, afirmó la calificadora, que advirtió, además, que, aunque no será tan costoso, dicho resultado debilitará aún más la percepción sobre la calidad de las políticas públicas de la Administración Federal.