Al exterior de las instalaciones del Gobierno del Estado en Tijuana, el lunes 19 y el martes 20 de agosto maestros de distintas zonas escolares de la ciudad se mantuvieron bajo protesta por los retrasos en sus pagos que han registrado en los últimos meses y por la incertidumbre de que esta situación continúe en el ciclo de escolar que está próximo a iniciar.
La suspensión de cualquier actividad por parte del Magisterio se aplicó a partir del pasado 15 de agosto y así lo han mantenido desde entonces, comentó Alberto López Morales, secretario delegacional de la sección 37 del SNTE en Tijuana.
“El inicio del ciclo escolar peligra por varios puntos, el principal sería la falta de pago a los maestros interinos. También tenemos otras situaciones que atañe a la base, como a los jubilados y pensionados a los que no se les paga en tiempo y forma, los compañeros que no se pueden jubilar, y los atrasos en los pagos a los maestros activos”, comentó López Morales.
Las carencias en el ISSSTECALI es otra problemática por la cual los maestros aceptaron implementar el plantón y suspender cualquier actividad, estas carencias van desde falta de medicamentos hasta la postergación de consultas y cirugías por falta de insumos.
“Los medicamentos, que es una parte muy importante para los compañeros que padecen alguna enfermedad, como lo es el cáncer, llegan a sus citas y no les dan ciertos medicamentos. Los tienen que ir a comprar por su cuenta y en la mayoría del tiempo no existe el reembolso para su dinero”, explicó el secretario delegacional.
Añadió que existe un calendario de pagos para los maestros activos firmado por el propio secretario de Educación, Miguel Ángel Mendoza, pero este poco se respeta. Con un retraso de entre dos y tres días, los docentes han recibido su pago en los últimos meses y en este receso escolar no han recibido el pago de sus sueldos ni del bono que deben entregarles cada verano.
Este miércoles 21 de agosto los maestros se trasladaran a sus centros de trabajo, y a partir de este día estarían socializando con las comunidades, padres de familia y alumnos, sobre los motivos de la protesta y lo que implica.
De no llegar a ningún acuerdo para antes del próximo viernes 23, seguiría en pie el plan de postergar el inicio del ciclo escolar.