Con la facultad de colocar inmovilizadores a los vehículos, sanción que aplicará a los automovilistas que no paguen el uso de espacios públicos, la empresa Copemsa iniciará la instalación de los nuevos parquímetros el próximo lunes 8 de julio.
Al mismo tiempo, mediante una convocatoria a los ciudadanos de Tijuana, el regidor Manuel Rodríguez Monárrez busca impugnar la concesión que faculta a Compensa de controlar 9 mil 834 espacios de estacionamiento público durante 15 años, presentando un amparo colectivo contra lo que consideró “es un acto al margen de la Ley”.
Para ello instalará una mesa afuera de palacio Municipal para recabar firmas, al considerar que la concesión contraviene el artículo 17 de la Ley de Régimen Municipal para el Estado de Baja California.
La ordenanza establece que “con excepción de los servicios relativos a seguridad pública y tránsito”, los Ayuntamientos podrán concesionar bienes o la prestación de los servicios públicos a su cargo, a personas físicas o morales, luego de adoptar un acuerdo en el cual declare imposibilidad de prestar directamente el servicio a concesionar. “Los servicios de seguridad pública y tránsito no se pueden concesionar por Ley, y dos, ¿cómo va a estar imposibilitada una unidad administrativa que tiene utilidades anuales superiores a los 6 millones de pesos?”, cuestionó.
De acuerdo al recaudador municipal Juan Pablo Guerrero Mercado, actualmente los obsoletos estacionómetros generan al municipio un ingreso de 18 millones de pesos, pero la utilidad se consideró insuficiente para modernizarlos.
Dividida en cuatro fases, la colocación de los nuevos dispositivos de cobro de estacionamiento público iniciará con la instalación de los primeros104 parquímetros multiespacio que reemplazarán los 2 mil 500 aparatos de moneda que operan en Zona Centro y Zona Río de Tijuana.
Concluida esta etapa se continuará con la instalación de este sistema de cobro en la Zona Industrial de Otay, 5 y 10 y Playas de Tijuana, entre otros puntos, hasta llegar a controlar los 9 mil 834 espacios de estacionamiento del programa que generará a Copemsa un ingreso anual de 200 millones de pesos, recudo del que el municipio de Tijuana recibirá el 40%.
A esa cantidad se sumará el cobro de la multa de 10 UMAS (Unidad de Medida y Actualización), lo cual equivale a casi 900 pesos, que se estará cobrando por el retiro del inmovilizador.
De acuerdo a Daniel Rivera Basurto, secretario de Movilidad, los primeros parquímetros, que operarán a través de tarjeta estarán funcionando a partir de la última semana de julio y tendrán un periodo de prueba de dos semanas, tiempo durante el cual no se cobrará a los usuarios.
Sin embargo, una vez concluida la fase de ensayo para su operación, los ciudadanos que utilicen los espacios operados con parquímetro, deberán pagar la tarifa de 12 pesos la hora, la misma que se encuentra estipulada en la Ley de Ingresos de 2019.