Con el fin de aliviar el congestionamiento vial y enfrentar la circulación de vehículos de pasajeros y mercancías, Estados Unidos y México construirán la nueva garita Otay Mesa II, entre San Diego y Tijuana. Proyecto que costará cien millones de dólares, informó el subsecretario de Infraestructura de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), Cedric Iván Escalante Sauri.
Al participar en la Conferencia Bilateral México-Estados Unidos para el Desarrollo de la Infraestructura, el funcionario explicó que el proyecto consiste en la construcción de un nuevo cruce internacional y puerto fronterizo en una superficie total de 314 mil 773 metros cuadrados. El cual estará ubicado al este del actual cruce en Mesa Otay.
Actualmente, en México se está en proceso de liberación el derecho de vía para la construcción de la conexión carretera hasta el nuevo cruce. Para lo cual se empleará el esquema de concesión vía licitación.
De acuerdo con un comunicado de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), el evento al que asistió Escalante Sauri contó con la presencia del Encargado de Negocios de la Embajada de Estados Unidos, John Creamer y del Presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción, Eduardo Ramírez Leal.
Ello, aun cuando desde hace un par de semanas la administración del presidente Donald Trump amenazó con imponer aranceles a los productos mexicanos en caso de que el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador no logre disminuir los flujos migratorios.
Asimismo, destacó que en el norte del país se ubican 54 cruces fronterizos. La zona Tijuana-San Diego (una de las 8 regiones norteñas), es considerada la más importante de toda la frontera pues concentra 30 por ciento de los cruces diarios de automóviles, 38 por ciento de los autobuses y 30 por ciento de peatones.
En 2017, la infraestructura usada para exportar bienes por tierra tuvo un valor de 384 mil 734 millones de dólares mediante el autotransporte y de 79 mil 944 millones de dólares por tren. Mientras que, 56 por ciento fueron exportaciones de México hacia Estados Unidos y 44 por ciento importaciones del vecino país a México.
