El presidente estadounidense Donald Trump, reveló este sábado, que aprovechó el breve saludo de ayer viernes, en Osaka, Japón, con el canciller mexicano, Marcelo Ebrard Casaubón, para agradecerle su “increíble” trabajo a la hora de contener la migración de centroamericanos en la frontera sur de México.
“Me reuní con México, con sus representantes, que han hecho un trabajo increíble. Lo aprecio y quiero darles las gracias por ello. Tienen 6,000 tropas en su frontera sur, es muy difícil entrar ahora”, señaló Trump durante una conferencia de prensa al término de su participación en la cumbre del G20.
“México está haciendo un trabajo realmente [bueno]”, subrayó Trump, quien opinó, además, que el Gobierno mexicano también está intentando “anegar a los cárteles” de la droga.
El mandatario estadounidense confirmó, también, que planea seguir adelante con su amenaza de hacer redadas masivas contra familias indocumentadas que se encuentran en el interior de EE.UU., si no hay un acuerdo esta semana en el Congreso estadounidense para reformar el sistema de asilo.
“Deportaremos a grandes cantidades de personas a partir de algún momento después del [próximo jueves] 4 de julio”, aseguró el presidente estadounidense.
Ebrard Casaubón, representa a México en la cumbre del G20, junto al titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Carlos Urzúa Macías.
A través de su cuenta de la red social Twitter, el jefe de la oficina del canciller mexicano, Gonzalo Fabián Medina Hernández, ya había informado ayer viernes acerca del saludo entre Ebrard Casaubón y Trump, en la que lo describió como un “encuentro amistoso”.
“La relación de México con nuestro vecino del Norte llegará a buen puerto en este encuentro”, tuiteó, además, Medina Hernández.
El jefe de la oficina de la SRE agregó que el contacto entre el canciller y Trump fue para seguir con el diálogo que hubo hace varias semanas en Washington entre representantes estadounidenses y mexicanos, para evitar que la Casa Blanca impusiera nuevos aranceles a México.
Por su parte, el presidente Andrés Manuel López Obrador, envío una carta al Primer Ministro de Japón, Abe Shinzo, ofreciendo una disculpa por su ausencia de la Cumbre del G20, que se lleva a cabo en la ciudad de Osaka y en la que destacó el fenómeno migratorio.
En la misiva, fechada el 24 de junio y compartida ayer viernes en redes sociales por Ebrard Casaubón, el mandatario mexicano explicó a Shinzo que “en México hay retos urgentes que reclaman mi atención y permanencia en el país”, además de que ponderó el asunto de la migración.
“En la actualidad, entre otros asuntos globales, sobresale el fenómeno migratorio. Nosotros pensamos que optar por la cooperación para el desarrollo es mucho más constructivo que cerrar las fronteras o recurrir al uso de la fuerza”, escribió López Obrador en su misiva.
Además, el político tabasqueño apuntó los ejes sobre los que se mueve la política exterior de México, como la autodeterminación de los pueblos, la no intervención y la cooperación internacional para el desarrollo, entre otros.
El mandatario mexicano recordó, además, que la Agenda 2030, acordada por todos los miembros de la Organización de las Naciones Unidad (ONU), llama a impulsar actividades productivas, crear empleos y bienestar en los pueblos más pobres y marginados del mundo.
López Obrador dijo, también, que ese enfoque es aplicable a todas las donas de origen de la migración y en cualquier circunstancia.
El mandatario mexicano relató que después de hacer a un lado la confrontación, los gobiernos de México y Estados Unidos acordaron, entre otras cosas, “responder al fenómeno migratorio mediante la promoción al desarrollo en Centroamérica y el sur-sureste de nuestro país”.
El político tabasqueño destacó en su texto que “por encima de las fronteras están la justicia y la fraternidad universal”.
