En el marco del Día del Trabajo, el presidente Andrés Manuel López Obrador informó este miércoles que iniciarán excavaciones para rescatar los restos de mineros en mina de Pasta de Conchos, para lo que se invertirán los recursos que sean necesarios, porque, dijo, es un acto de justicia y un compromiso que él hizo en enero de 2012.
“Hemos tomado la decisión de iniciar los trabajos, es una responsabilidad de la Secretaría del Trabajo, para las excavaciones para rescatar los cuerpos de los 65 mineros que quedaron enterrados en la mina de Pasta de Conchos desde el 2006”, dijo el mandatario nacional en su conferencia matutina.
“Ya los familiares tienen hasta dictámenes, han ido avanzando, ha sido su demanda principal. Tomamos la decisión de hacerlo nosotros”, señaló López Obrador, quien dio lectura a uno de sus discursos de campaña en el que prometió el rescate de los restos de los mineros que yacen en el socavón.
“Vamos a cumplir esto. Vamos a recurrir a especialistas y vamos a trabajar para rescatar los restos de los mineros de Pasta de Conchos”, comentó el presidente, para luego decir que el Gobierno Federal está dispuesto a pedir perdón por las injusticias cometidas en dicho caso.
“Nosotros estamos dispuestos a pedir perdón en todo lo que se haya hecho que haya significado una injusticia. No podemos dar la espalda a los dolores de la humanidad. Este es un Gobierno humanista. Vamos a llevar a cabo esta acción”, abundó el mandatario nacional.
López Obrador fue cuestionado sobre si consultó la decisión con Germán Larrea Mota Velasco, dueño de Grupo México. “[Dijo] que veía que es difícil, sin embargo hay otras opiniones. Difícil, en el sentido de que por la explosión era improbable encontrar los restos”, señaló.
En la madrugada del 19 de febrero de 2006, tras una explosión, colapsaron varios túneles en la mina 8 de carbón, Unidad Pasta de Conchos, operada por Grupo México -la compañía minera más grande del país-, y ubicada en la región de Nueva Rosita, en Coahuila, por lo cual quedaron atrapados 65 de los 73 obreros que laboraban en el turno de las 22:00 a las 06:00 horas.
Tras el estallido ocho trabajadores fueron rescatados. El Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos, Siderúrgicos y Similares de la República Mexicana aseguró que los trabajadores quedaron a 490 metros de profundidad. Sin embargo, Grupo México afirmó que las personas estaban sepultadas a 150 metros.