La Policía Federal brasileña arrestó este jueves en São Paulo al ex presidente Michel Miguel Elias Temer Lulia, en un caso vinculado a Lava Jato, como es conocida la mayor operación de combate a la corrupción en la historia de Brasil y que destapó los desvíos de la petrolera estatal Petrobras.
La detención de Temer Lulia fue ordenada por el juez federal de Río de Janeiro, Marcelo Bretas, que también solicitó el arresto del exministro de Minas y Energía, Wellington Moreira Franco, un importante colaborador del expresidente y su correligionario en el partido Movimiento Democrático Brasileño (MDB).
Según la agencia española EFE, la Fiscalía llegó a solicitar dos veces ante la Corte Suprema brasileña la apertura de juicios por corrupción contra el político, quien se desempeñó como presidente entre 2016 y 2018, y ocupó el cargo de vicepresidente de Brasil desde el 1 de enero de 2011 hasta el 31 de agosto de 2016.
Sin embargo, el Congreso se negó a autorizar los procedimientos, por lo que todas las causas en contra de Michel Temer, de 78 años de edad, dependían de la pérdida del fuero privilegiado con el fin de su mandato.
En septiembre del año pasado, una investigación de la Policía Federal sobre el caso Odebrecht determinó que Michel Temer, entonces presidente, recibió sobornos de dicha constructora.
Según el autor del informe policial, el comisario Thiago Delabary, además de los indicios de que se benefició de “ventajas indebidas”, hay sospechas de que cometió los crímenes de corrupción pasiva y lavado de dinero.
La investigación fue abierta en marzo de 2017 con base en un testimonio presentado por Claudio Millo Filho, exejecutivo de Odebrecht, en el marco de un acuerdo en el que se comprometió a colaborar con la justicia y revelar sus delitos a cambio de reducciones en sus condenas.
El exejecutivo confesó haber participado en mayo de 2014 en una cena en el Palacio de Jaburu, la sede de la vicepresidencia, en la que dirigentes del MDB pidieron un soborno a Odebrecht, a cambio de beneficiar a la empresa en contratos con el Ministerio de Aviación Civil.
En esa época Michel Temer ejercía como vicepresidente de la destituida presidenta Dilma Rousseff y Moreira Franco era ministro de Aviación Civil, y ambos estaban involucrados en la recaudación de fondos para las campañas electorales del partido.
Temer admitió que participó en la cena mencionada por el denunciante, pero alega que en ningún momento se negociaron valores o ventajas indebidas y que solo conversaron sobre posibles donaciones legales de Odebrecht al partido.
Temer dejó el cargo a fines de diciembre, luego de que el entonces candidato de ultra derecha, Jair Bolsonaro, quien prometió combatir el crimen y la corrupción, ganó las elecciones.
Otro ex presidente, Lula da Silva, quien gobernó Brasil de 2003 a 2010, está encarcelado desde casi un año en la prisión de Curitiba por un caso relacionado, también, a Lava Jato. Fue condenado por dos casos que suman 24 años de prisión. El primer juez que le condenó, Sérgio Moro, es ahora ministro de Justicia en el Gobierno de Bolsonaro.
-Con información de EFE.
