La Policía Provincial de Ontario (OPP, por sus siglas en inglés) informó este lunes que liberó a 43 ciudadanos mexicanos -en su mayoría hombres- quienes se encontraban en condiciones de “esclavitud” y que eran forzados a trabajar como limpiadores en hoteles de varias ciudades del centro y este de Canadá.
Los mexicanos, que fueron rescatados la semana pasada tras una operación policial, vivían en precarias condiciones en unas barracas en la localidad de Barrie y eran transportados por una red de trata de personas, para trabajar en hoteles y establecimientos turísticos en la provincia de Ontario.
La OPP señaló que los mexicanos habían llegado ilegalmente a Canadá a través de la red de traficantes de personas, quienes a cambio de una gran suma de dinero, les prometieron que podrían estudiar en dicho país y obtener visas de trabajo, además de un estatus permanente de residencia.
Pero una vez allí fueron alojados en “condiciones sórdidas”, obligados a trabajar en hoteles de la zona, explicó la Policía, la cual señaló, también, que está buscando más sospechosos y es posible que se anuncien cargos en los próximos días.
Los trabajadores tenían que pagar por su vivienda, la comida y el transporte a sus lugares de trabajo. Además, sus salarios eran controlados por sus empleadores, quienes a veces les daban menos de 50 dólares estadounidenses al mes para vivir.
Después de una investigación, los mexicanos pudieron recuperar su libertad la semana pasada. Todos estos trabajadores estaban en una situación regular, pero en los últimos días se les ofreció un trabajo legal y fueron alojados un hotel del área de Barrie.
Los dos responsables de una empresa de limpieza en el área de Barrie, que trabajaban con hoteles de la zona, están siendo investigados por las autoridades, sin embargo, no fueron arrestados.
“El tráfico de seres humanos es una forma moderna de esclavitud […] La explotación está en el corazón de este delito”, dijo el comisario adjunto, Rick Barnum, durante una conferencia de prensa. El también subdirector de la OPP, afirmó que creen que las víctimas “pagaron a los traficantes elevadas sumas de dinero para abandonar su país”.
“Las víctimas eran transportadas diariamente a hoteles y establecimientos turísticos del centro y sur de Ontario para trabajar como limpiadores […] Se les cobraba por alojamiento, transporte y muchos otros conceptos. Los traficantes controlaban sus salarios. Tras pagar esos costes, los trabajadores se quedaban con cantidades mínimas, en algunos casos de menos de 50 dólares al mes”, añadió Barnum.
“Es impensable que esto haya ocurrido en nuestra comunidad”, agregó el jefe de la Policía de Barrie, Kimberley Greenwood. Según Barnum, citado por la misma agencia de información, una de las víctimas le dijo a la Policía local: “Ayer fui a dormir como un esclavo y esta mañana me levanto como un hombre libre”.
La Policía aseguró que los propietarios de los hoteles que contrataban a los mexicanos no sabían en qué condiciones se encontraban. La investigación se inició en 2015, cuando la Policía recibió denuncias de la operación de una red criminal que explotaba a trabajadores extranjeros.
La operación culminó el pasado martes cuando cerca de 250 agentes de OPP, la Policía de Barrie y la Agencia de Servicios Fronterizos de Canadá rescataron a los trabajadores mexicanos en varios lugares de Barrie.
-Con información de EFE y AFP.