Desde hace tiempo he venido observando cómo algunas de nuestras palmas de pequeños dátiles son secadas desde la punta o cogollos, y poco a poco se van marchitando las hojas de los dos lados hasta que se caen; no así, su tronco permanece como todos los árboles que se mueren de pie.
No sé si en Tijuana exista un regidor de parques y jardines designado por el ayuntamiento para tratar las problemáticas de los árboles de la ciudad, ya que la epidemia se ha localizado en las palmas de la avenida Paseo de los Héroes, Sánchez Taboada de la Zona Río, así como en las avenidas Ensenada, Pedregal y Paseo Playas.
El principal causante de esta muerte de las palmas es un insecto de la familia de los coleópteros llamado mayate cogollero, mayate prieto, cuyo nombre científico es Rhynchophorus palmarum, que es una plaga importante de la palma de coco y otras palmeras, en toda América tropical. Y México no es la excepción. El daño principal lo causa por ataque directo de larvas al tronco, específicamente en el cogollo o células de crecimiento de la palmera, siendo además portador del nematodo Rhadinaphelechus cocophilus, causante de la enfermedad del anillo rojo.
El daño directo es causado por las larvas que se alimentan de los tejidos del tronco y en la región del cogollo. Sin embargo, la mayor importancia del insecto radica en que es el principal vector del nematodo que causa la enfermedad del anillo rojo, aunque por sí solo la larva de este insecto provoca la muerte de la palmera.
La endoterapia es el tratamiento, consiste en introducir un insecticida sistémico por vía xilema de la palma, con el objetivo de eliminar la larva R. Palmarum existente en la palma, esto se conjuga con otro insecticida de acción directa, rociándolo en la planta infectada para eliminar el insecto adulto. Hay que resaltar que este tratamiento es sólo para palmas con ataque de mayate prieto. Son varias las materias activas ensayadas para el control de esta plaga, así en condiciones de laboratorio con larvas de diferentes estadios, se ha comprobado que las materias activas: imidacloprid, oxamilo, fipronil y clopirifros presenta una eficacia del 100 por ciento.
Cabe mencionar que este método tiene éxito sólo cuando las palmeras desarrollan los primeros síntomas del ataque, las hojas jóvenes se marchitan, abortando de frutos y marchitez en la flor, ya que en el proceso de infestación de la planta el desarrollo larvario de R. Palmarum hace galerías en las células de crecimiento de la palma, o corona de la palma, por ello se debe actuar de manera rápida y sistémica, logrando con ello eliminar las larvas.
Lo más probable es que el mecanismo de transmisión sea por el transporte de Cocos Nucífera, de las zonas tropicales de Guerrero, Veracruz, Colima y Nayarit hasta Tijuana, de los cuales no existe hasta la fecha un control sanitario adecuado.
Atentamente,
Dr. J. Fernando Jaramillo C.
Tijuana, B.C.