El gobernador de Hidalgo, Omar Fayad Meneses, informó lla tarde de este lunes que van 91 personas fallecidas y 52 heridas por la explosión de una toma clandestina en el ejido de San Primitivo, municipio de Tlahuelipan, en Hidalgo, ocurrida la noche del viernes 18 de enero pasado.
En entrevista con Radio Fórmula, el mandatario estatal actualizó la cifra de decesos y agregó que las estadísticas podrían incrementar. “Ya vamos 91 muertos, quemados, con quemaduras de tercer grado, con categoría de gran quemado, calcinados. Ha sido verdaderamente muy complejo”, dijo.
Hasta la mañana de este lunes, el número de personas fallecidas era de 89 y 51 más hospitalizadas, según las estadísticas que dio el titular de la Secretaría de Salud (SSa) Federal, Jorge Carlos Alcocer Varela.
Omar Fayad Meneses, aceptó que en la entidad que gobierna existe el “huachicol” y que las autoridades tienen conocimiento de este delito, “es un fenómeno que ha venido pasando, por lo que es un fenómeno que se ha venido enfrentando”.
“En el sitio se encontraron 68 restos humanos, de los cuales hemos identificado 9, 7 ya fueron entregados a sus familias y se localiza a los familiares de los otros 2”, señaló Fayad Meneses en su cuenta de la red social Twitter. En tanto, dijo, hay 52 hospitalizados que continúan internados en hospitales de Hidalgo, el Estado de México y la capital de la República.
El gobernador hidalguense pidió a la población, ayudar al Gobierno y autoridades a denunciar el robo de hidrocarburo en todo México, porque este delito podría “costarles la vida”. Fayad Meneses abundó que la tragedia de Tlahuelilpan, debería ayudar a la conciencia colectiva, ante el ultraje de combustible, “que nos sirva para dar la lección a todos, de lo que debemos de hacer para enfrentar el fenómeno”.
