El primer grupo de la caravana de migrantes hondureños, que salió de San Pedro Sula el pasado lunes por la noche, llegó este jueves hasta el puente internacional Rodolfo Robles, en la frontera con Guatemala, buscando ingresar a México. Según la cadena Milenio Televisión, hasta el momento se encuentran alrededor de 100 personas formadas en el puente a la espera de que se les permita el ingreso a territorio mexicano.
Una vez que ingresen, los migrantes deberán presentar un documento de identidad y el Instituto Nacional de Migración (INM) les colocará una pulsera para señalar que iniciaron el proceso que habría de concluir en un plazo no mayor a 5 días. El mismo medio indicó que algunos centroamericanos esperan ser trasladados al albergue que se habilitó a unas calles del cruce fronterizo, mientras que otros ciudadanos hondureños, también integrantes de la caravana, han comenzado a cruzar por el Río Suchiate para no detener su camino.
Los migrantes pernoctaron en la Ciudad de Guatemala y este jueves continuaron su caminata rumbo al municipio de Tecún Umán, en el departamento de San Marcos, fronterizo con México, en su ruta a Estados Unidos. Mujeres, hombres y niños acamparon en la Casa del Migrante, donde voluntarios les donaron alimentos y ropa. Sin embargo, muchas familias se quedaron en la calle debido a que el espacio es muy pequeño, indicó la agencia británica Reuters.
Según las autoridades migratorias guatemaltecas, hasta ayer se habían registrado mil 219 hombres hondureños, de ellos 189 menores; también 489 mujeres adultas y 136 niñas de la misma nacionalidad. Asimismo, 107 salvadoreños, de los cuales 87 son hombres -solo un menor- y 20 mujeres mayores de edad.
En tanto, al menos 283 hondureños que desistieron de seguir en la caravana han comenzado a regresar a su país de forma voluntaria a través del plan “Retorno Seguro” que impulsan Honduras, México y Guatemala, informó el director de la estatal Comisión Permanente de Contingencias (Copeco), Lisandro Rosales.
El plan “Retorno Seguro” fue lanzado por las autoridades de Honduras el pasado 20 de octubre, una semana después de la salida desde la ciudad hondureña de San Pedro Sula de la primera caravana migrante. Rosales señaló que las autoridades han proporcionado transporte para regresar a su lugar de origen a 484 hondureños, muchos de ellos menores, que no pudieron cruzar el punto fronterizo de Agua Caliente, por no portar documentos en regla.
Del total de hondureños a los que se le impidió salir, 323 son menores de edad, muchos de los que viajaban solos, y fueron remitidos a la Dirección de Niñez, Familia y Adolescencia (DINAF), para su acompañamiento, agregó Rosales, según lo citó la agencia británica Reuters.
El nuevo contingente de personas se enfrentará a las crecientes presiones del Gobierno de Donald Trump, con medidas que han dejado varados a miles en Tijuana, Baja California. El mandatario estadounidense alertó que ante la llegada de la nueva caravana solamente un muro dará seguridad a su país, por lo que exigió a los líderes demócratas en el Congreso que liberen los fondos necesarios para construirlo, negociación que mantiene al Gobierno estadounidense en un cierre parcial, el más largo de la historia.
“Una gran caravana nueva se dirige a nuestra frontera sur desde Honduras. Díganle a Nancy y a Chuck que un Dron que vuela alrededor no los detendrá. Sólo un muro funcionará ¡Solamente un muro, o barrera de acero, mantendrá nuestro país seguro! ¡Dejen de jugar a los juegos políticos y terminen el Shutdown!”, escribió Trump hace algunos días a través de su cuenta de la red social Twitter.
