14.6 C
Tijuana
lunes, febrero 19, 2024
Publicidad

El éxodo en el mundo

Desde antes cristo, el antiguo testamento habla del éxodo, el éxodo es la salida del país de la esclavitud hacia la tierra prometida. Dios libera a su pueblo con gran poder, mano fuerte y brazo extendido. Emigrar es salir, salir es éxodo, así como emigran los animales, la mariposa monarca, la ballena de Alaska a tierras californianas.  Así como lo describe National Geographic el éxodo de animales al buscar vivienda, reproducción y buen vivir. Así ha emigrado o ha tomado el camino del éxodo el ser humano. Recordemos a Cristóbal Colón, los Franciscanos, etnias, tribus que han buscado una mejor oportunidad de vida.

Así como emigran parvadas de flamencos, las golondrinas y animales que buscan supremacía y luchan por la vida, así ha emigrado el humano y el éxodo es su iniciativa. El libro del éxodo en la Biblia habla, se escucha el gemido del pueblo oprimido, despierta en él la esperanza de una liberación real y completa. Ejemplo de todas las verdaderas liberaciones humanas.


Publicidad


Las rutas del éxodo que señala la biblia son extensas, allá en Egipto, cerca del Mar Rojo, Mar Mediterráneo, desierto de Paran etcétera. El éxodo está ahorita en todo el mundo, en el viejo continente salen en balsas y con datos mortales. El éxodo lo genera un mal gobierno, anarquía, corrupción  y raquíticos modos de vivir. Hay países que cierran sus fronteras; acá en México las leyes débiles y flexibles han provocado la invasión de hondureños, guatemaltecos, salvadoreños hacia nuestro país que es a la vez es el co-culpable del problema tan grave que vivimos en Tijuana.

El hambre aprieta y nace del éxodo, y por ello es primitivo, desde el hombre de las cavernas hasta hoy en día. Todos tenemos derecho a vivir, el hambre no conoce fronteras, pero hay duros gobiernos en el mundo que frenan el éxodo humano. Si emigran los animales: ¿El humano por qué no? No es nuevo esto, sapientísimo lector de ZETA, y en el mundo animal no existe la corrupción y aun así emigran.

Romper las reglas del éxodo y comportarse bestialmente en tierras ajenas, hacer desmadres y violar la ley; que emigren los criminales y drogadictos como lo que se vio acá en Tijuana, es en verdad de dar vergüenza. Y de allí nace la xenofobia y el racismo y el reproche total: La conducta habla por sí sola, la violencia será contestada con violencia.


Publicidad

 


 

Atentamente,

Leopoldo Durán Ramírez

Tijuana, B.C.

Autor(a)

Carlos Sánchez
Carlos Sánchez
Carlos Sánchez Carlos Sánchez CarlosSanchez 36 carlos@zetatijuana.com
- Publicidad -spot_img

Puede interesarte

-Publicidad -

Notas recientes

-Publicidad -

Destacadas