Por segundo año consecutivo, México ha sido durante 2018 el país en paz más peligroso para la prensa, con 9 periodistas asesinados, dos menos que en 2017, una disminución que no supone una mejora de la situación, amenazada por cárteles y Gobiernos corruptos, indicó este martes la organización no gubernamental Reporteros Sin Fronteras (RSF), en un informe anual.
Sin embargo, la organización no gubernamental Press Emblem Campaign (PEC, por sus siglas en inglés), indicó ayer lunes que en México han sido asesinados un total de 17 periodistas en lo que va de este año, la misma cantidad que en Afganistán. Ambos países encabezan el listado anual de dicha ONG.
Según PEC, en todo el mundo han sido asesinados un total de 113 trabajadores de medios de comunicación durante lo que va del 2018, un 14 por ciento más que en el año anterior. El listado de dicha ONG se basa en un conteo de asesinatos y no en una tasa comparativa con la población, como se reporta la mayoría de las cifras relacionadas con homicidios.
En México, que ya encabezó la lista de periodistas asesinados en 2017, murieron este año 17 informadores, los mismos que en Afganistán -país que duplicó sus cifras de 2017-, mientras que Siria se colocó en tercer lugar con 11 comunicadores fallecidos de forma violenta. Le siguieron Yemen y la India con 8 muertos cada uno.
Según PEC, durante los últimos cinco años, Siria es el país con más muertes, con 64, y en segundo lugar se encuentra México, con 61. En este mes de diciembre se sumaron dos periodistas a la lista de víctimas en México: Jesús Alejandro Márquez Jiménez y Diego García Corona, mismos que RSF está investigando y no contabiliza en su informe anual.
Esta última organización defensora de la libertad de prensa asegura en su listado mundial anual, que México solo se ve superado por Afganistán -con 15 muertos- y Siria -con 11 periodistas asesinados-, ambos países afectados por la guerra.
RSF cita el caso de Rubén Pat, abatido en plena calle el pasado 24 de julio en Quintana Roo, pese a que había pedido un dispositivo de seguridad urgente después de que un mes antes fuera asesinado su colega José Guadalupe Chan Dzib. Sin embargo, las autoridades le proporcionaron un “botón de urgencia” y un GPS, indica la organización.
El pasado 21 de septiembre, Mario Leonel Gómez Sánchez recibió un disparo mortal en plena calle en el estado de Chiapas, un día después de que denunciara una reducción de su protección por el recorte de las medidas del Gobierno, recordó la ONG en su informe anual.
Por otra parte, RSF indicó que durante este año, 63 profesionales de los medios de comunicación han sido asesinados en todo el mundo, un 8 por ciento más que en el año anterior, un incremento que acaba con cinco años de descensos, según el informe anual que denunció una degradación de la libertad de prensa.
Con esa cifra, la más alta en tres años, se registran 702 periodistas profesionales asesinados en diez años, con un pico de 87 en 2012, momento en el que comenzó una bajada que tuvo su punto más bajo el año pasado, con 55. Sin embargo, si se añaden los reporteros no profesionales, “muy presentes en países donde más limitada está la información”, y los colaboradores, “esenciales para el trabajo periodístico”, el número de asesinatos se elevó en 2018 a 80, un 8 por ciento más respecto a 2017, el nivel más bajo de la década.