Ésta es la quinta y última entrega de la serie de reportajes sobre el estado de la inseguridad en los municipios de Baja California. Ahora se analiza la información oficial de Tijuana, donde más de 2 mil ejecuciones se contabilizan en el año, arrojando un promedio de ocho personas asesinadas por día
Aun sin órdenes de aprehensión en contra de los jefes de célula, las autoridades identifican a 14 sicarios generadores de la violencia que opera actualmente en las calles de Tijuana, y detecta varias pugnas internas. El municipio supera los 2 mil 282 asesinatos. Mientras una investigación reciente de homicidio exhibe la intención y capacidad de Roque García, líder criminal del CAF, de intervenir en la operatividad de las autoridades, matan a uno de los participantes en el asesinato de la doctora Ciani
Con un promedio de ocho asesinatos diarios, la jornada de sangre en Tijuana durante noviembre, tuvo días en los que sus calles acumularon 10, 11, 12 y hasta 14 hombres y mujeres ejecutados. Los homicidas aprovecharon que los patrullajes disuasivos se redujeron, debido a la participación de las autoridades en la contención de la problemática generada alrededor de la caravana migrante que llegó a la ciudad.
En ese contexto, el noviembre tijuanense concluirá por encima de los 200 homicidios, para sumar 2 mil 282 personas asesinadas en lo que va de 2018, convertido en el año más violento de la historia del municipio a partir del 20 de septiembre, cuando se igualó la cifra de mil 781 muertos que se contabilizaron durante 2017.
Los responsables de la violencia de sangre en Tijuana siguen siendo los cárteles Jalisco Nueva Generación (CJNG), De Sinaloa (CDS) y Arellano Félix (CAF), los dos últimos, con pugnas internas que los mantienen divididos en células. Las muertes se siguen sumando por el control de la venta de droga en las calles de la ciudad.
Como sus competidores no los han asesinado, ni las autoridades los han detenido, las cabezas de las células criminales siguen siendo los mismos: del CAF, Jorge Ávila “El Chacal”, Francisco Rabadán “El Aguacate”; del CDS, Edgar Morán “El Turbo”, José Luis Mendoza Uriarte “El Güero Chompas”, Loreto Capoema “El Versi”; y por Jalisco, Edgar Herrera Pardo “El Caimán”, Antonio Álvarez “El Cabo 39”, Rodolfo López “El Cabo 30” y “El Búho”.
En las calles, como autores materiales, reportes del Consejo Estatal de Seguridad, determinan que la jornada recrudecida de violencia en Tijuana en noviembre, tiene 14 protagonistas principales ya identificados, se trata de:
Marco Antonio Valdivia “El Marquillos”, Damián “El Flaco” Loera, Rigo Lorenzo Garrido Alvarado “El Solo”, los primos Jesús Enrique Rodríguez Ricvaldi “El Ricky” y Carlos Guillén Rodríguez; Sergio Aarón Lizárraga García “El Oscuro”, Juan Abel Osuna Luna “El Jeje”, Alfredo García Navarro “El Chicali”, Carlos Alberto Gutiérrez Gutiérrez “El Bóxer”, José Pedro Tadeo Zamora “El Joker”, Gilberto Morales Cuevas “El Chaparro”, Leonel y Antonio Sorzano López “El Titi Perro”; y Sergio Alberto Cornejo Morales “El Beto”.
Actualmente las autoridades trabajan en la solicitud de órdenes de captura en contra de cada uno de ellos, ya que han sido obtenidas sólo en algunos casos.
ROQUE GARCÍA Y LOS HOMICIDAS DE LA DOCTORA CIANI
Entre las 197 personas asesinadas que acumula noviembre de 2018, a las cuatro de la mañana del día 22 se localizó el cuerpo de un hombre de 28 años, identificado esta semana como Salvador Ortega Ruiz “El Retén”. El cuerpo tenía diez heridas de bala, de entrada y salida en pecho, estómago y cabeza., además de golpes y escoriaciones.
En vida, Ortega residía en el fraccionamiento Soler, pero su zona de influencia criminal era la Zona Norte de Tijuana, donde estaba involucrado en la venta de droga para el CAF, pero su nombre no estaba incluido entre los jefes delictivos.
Sus antecedentes criminales indican un delito menor cometido en 2010 en Mexicali, acusado de homicidio en 2011, investigado por lesiones a una mujer y violación equiparada en 2006, incumplimiento de obligaciones familiares y una larga lista de presentaciones en barandilla por alterar el orden en pandillas.
Al corroborar la identidad del cuerpo, tres puntos llamaron la atención de los investigadores.
Uno. Que Ortega era el hombre que la fiscalía buscaba desde un año atrás, por encabezar el pequeño grupo de delincuentes que asesinaron, por equivocación, a la doctora Alma Angélica Ciani en su consultorio de la colonia Libertad el 3 de julio de 2017.
Un familiar del esposo muerto de la psicóloga María Isabel González -con un consultorio en la misma plaza comercial- , los había contratado para matarla. Detenido el 14 de julio del mismo año, David Ortega Ramos, autor material del asesinato, expuso la equivocación e informó que le pagarían 10 mil pesos.
De acuerdo a la información en el expediente, “El Retén” organizó quién haría qué y cómo, en el asesinato de Ciani; después coordinó todo por teléfono.
Dos. El interés personal que mostró el líder criminal de una célula del CAF para que las autoridades investigaran este asesinato. Se trata de Roque García, originario del Barrio Logan, detenido y liberado en 2004 por narcotráfico, secuestro y cobro de plaza. De acuerdo a la información recabada por un grupo binacional de inteligencia que investiga grupos del narcotráfico, en abril de 2017 planeó atacar las instalaciones de ZETA como parte de una serie de delitos de alto impacto para retomar el liderazgo criminal en Tijuana para el CAF.
“El Roque” fue el hombre que “convenció” de declarar al testigo que ayudó a iniciar la investigación de las extrañas condiciones en que se dio la muerte del “Retén”.
Según un documento presentado para conocimiento del Grupo Coordinación, el capo fue quien presentó al testigo al grupo de inteligencia de la Policía Municipal de Tijuana, corporación donde se originó la alerta para la indagatoria.
Tres. Respecto al homicidio, a las once de la noche del 21 de noviembre de 2018, la Policía alertó a la fiscalía de un posible asesinato. Fuentes extraoficiales les informaron de un homicidio, en el cual habían metido el cadáver de un hombre a un bote de basura para después llevárselo.
Siguen los asesinatos en Tijuana, con 2 mil 281 víctimas
Un policía, un adolescente, cuatro mujeres y 44 hombres fueron asesinados durante los últimos seis días en Tijuana, sumándose a los homicidios dolosos cometidos hasta la mañana del jueves 29 de noviembre, con 2 mil 281 víctimas.
Con base a estadísticas, noviembre cerrará con menos crímenes que los perpetrados en octubre (217), ya que hasta las siete de la mañana de ayer jueves, 198 personas habían sido privadas de la vida durante el mes.
Entre los hechos recientes destaca la muerte del agente municipal Joel Huerta Ramírez, asesinado las primeras horas del sábado 24, cuando circulaba en su vehículo particular en las inmediaciones del fraccionamiento El Florido. El uniformado, adscrito al Distrito Cerro Colorado, iba a bordo de un Toyota Tercel 1997, placas fronterizas BHB-46-59, cuando fue atacado por hombres desconocidos. Trece tiros fueron contabilizados por agentes periciales en la carrocería del automóvil, en cuyo interior se localizó una fornitura de color negro, una chamarra y un chaleco balístico del mismo color.
Versiones en la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, señalan que el elemento no tenía antecedentes y hasta el momento se desconoce el móvil del crimen.
Griselda Guadalupe Barraza Pérez, de 48 años de edad y su hijo Pedro, de 15, fueron asesinados a tiros la tarde del martes 27 de noviembre en la colonia Chihuahua. Testigos del lugar refieren que la víctima presuntamente se dedicaba al narcomenudeo. Como indicios, agentes periciales localizaron en la escena dos casquillos con la leyenda 40 S&W, un casquillo con la leyenda 40 S&W RP, un casquillo con la leyenda 40 S&W Win y una bala.
Lunes 26. En la colonia Niño Artillero se localizó el cadáver de un desconocido. Por los disparos de arma de fuego que le propinaron, Carlos Rosendo Sandoval, de 26 años, murió en la Cruz Roja tras ser atacado en Hacienda Las Delicias. Carlos Enrique Aguilar Bellos, de 18 años, fue privado de la vida de por lo menos cuatro balazos de arma 9 milímetros en la colonia Amparo Sánchez. Los cuerpos de un hombre y una mujer se encontraron en un domicilio en Camino Verde, donde agentes periciales embalaron siete casquillos 18 WMA. Silvia Mendoza Zamora, de 52 años, murió presuntamente por anoxemia al interior de una vivienda en Antorcha Campesina. José Antonio Partida Solís, de 22 años, fueron hallado muerto en un domicilio con las características de un ‘picadero’ en Lomas de Tlatelolco; 12 casquillos 9 milímetros fueron localizados en la escena del crimen, En Paseos del Vergel se reportó el cadáver de una persona de 30 años, envuelta en una cobija. Al parecer murió por asfixia.
Martes 27. Un hombre fue asesinado a tiros en Margarita Residencial; a un costado del cuerpo se encontró una bicicleta y un casquillo calibre 45 milímetros. En Cumbres del Sol fue acribillado Irán Espinoza González, de 39 años; en el lugar se hallaron 12 casquillos calibre 9 milímetros y una camioneta Ford Edge color negro. A balazos fue ultimado José Armando González Solís, de 24 años. En un domicilio con estructura de madera en Lomas del Encinal, se dio el hallazgo del cadáver de un hombre calcinado y con disparos de arma de fuego. En la colonia Llamas Amaya un masculino fue abatido por disparos de arma de fuego; junto a la víctima, de 30 años, había tres casquillos calibre 9 milímetros. Un desconocido de 20 años fue ultimado de por lo menos dos tiros de arma calibre 380 en un domicilio en Lomas Taurinas. Salvador Gallardo Morales, de 31 años, fue ejecutado de seis balazos en Infonavit Presidentes. Tras los hechos, el presunto responsable huyó de la escena del crimen, enfrentándose con policías municipales. El occiso oscilaba en los 30 años.
Miércoles 28. Javier Arturo Bares López, de 30 años, fue asesinado a tiros cuando se encontraba en la colonia Natura; en el lugar se embalaron cuatro casquillos calibre 40. En la Clínica 1 del IMSS murió un desconocido de 35 años, víctima de arma de fuego. En un lote baldío en Altiplano se encontró el cadáver de un desconocido de 30 años, a su lado, había tres casquillos calibre 380. Miguel Hilario Gamiz Castro, de 28 años, fue asesinado de por lo menos cinco tiros de arma calibre.40 en Nueva Tijuana. Un masculino con las extremidades superiores en sujeción hacia la espalda y con lesiones en la cabeza, fue encontrado sin vida sobre el Corredor Tijuana-Rosarito 2000.
De acuerdo a estadísticas de la Procuraduría General de Justicia del Estado, hasta el 29 de noviembre, Baja California registró 2 mil 862 homicidios dolosos.
Los investigadores llegaron a una plaza comercial en la Avenida Sonora -popularmente como “La Recta”-, en el número 3330. Afuera del bar llamado Mäb encontraron lo que parecían manchas de sangre, después, con orden justificada ingresaron al lugar, donde encontraron un gran desorden, sangre y casquillos. Horas más tarde, de nuevo el cuerpo de inteligencia municipal reportó haber encontrado el cadáver en La Presa, donde los peritos procesaron la escena. Y horas después, de nuevo la Municipal reportó la localización y repentina aparición del bote de basura en el que habían transportado el cadáver de Salvador Ortega en la misma zona. El auto en el que movieron el cuerpo fue un “sedán cuatro puertas, vidrios polarizados, color azul gris metálico, reciente modelo, con placa inicial AHJ de Baja California”. La investigación sigue en curso.
De la presencia de Roque García, la versión del primer respondiente fue que no lo identificó. En cuanto a las autoridades que lo reconocieron, pese a los antecedentes conocidos por las áreas de inteligencia, no tienen órdenes de aprehensión en su contra.
GRUPO COORDINACIÓN INVESTIGA A SICARIOS Y SUS “BATACAS”
De vendedores de droga y adictos, ahora están convertidos en sicarios a cargo de “batacas”, sus matones de soporte. En las zonas donde delinquen son ampliamente conocidos, por los vecinos y sobre todo por los adictos. Por eso han sido delatados con relativa facilidad por algunos de sus socios criminales, clientes e integrantes de células contrarias que antes traficaban con ellos.
Diversos indicios que incluyen las versiones de socios y competidores criminales, se están terminando de integrar en los expedientes para emitir las órdenes de aprehensión en contra de los hombres que actualmente han elevado los niveles de violencia en la ciudad, y que de acuerdo al Grupo Coordinación, son los siguientes:
Zona Este en Las Delicias: Valdivia contra Loera
* Marco Antonio Valdivia “El Marquillos”, ligado al CDS. En su expediente hay antecedentes por lesiones calificadas en 2017. Encabeza un grupo de diez sujetos dedicados a matar, al “ajuste de cuentas”. Su jefe es “El Julio Bola”.
* Damián “El Flaco” Loera es su enemigo y está del lado del CJNG. En octubre, Valdivia asesinó a Edgar “El Paisa” Loera, hermano del “Flaco”; y Los Paisas mataron a tres vendedores del “Marquillos”, apodados “El Fabián”, “El Güero” y “El Trapitos”.
Los del Cártel de Sinaloa en Otay, también se “depuran”
Los jóvenes Jesús Rodríguez “El Ricky” y Carlos Guillén Rodríguez, con antecedentes por robo de autos, lesiones y allanamiento de morada, fueron relacionados con los asesinatos de Francisco Fuentes y Manuel Arreola en agosto de 2018. De acuerdo a información de inteligencia, se mantienen en pugna de sangre con los matones de quien fuera su jefe, Alfredo Heynez, del CDS, del ala de “Los Aquiles”: los hermanos Alfonso y René Arzate García. Homicidas de la célula a la que pertenecían, también mataron a su primo Carlos Rodríguez “El Toro” y a su pareja, Griselda Osorio, en octubre de 2018.
En Zona Norte, Sinaloa vs CAF
* José Pedro Tadeo Zamora “El Joker”, con cinco capturas por narcomenudeo.
*Alfredo García Navarro “El Chicali” con dos aprehensiones por narcomenudeo.
* Carlos Alberto Gutiérrez “El Bóxer”, con ocho aprehensiones en los últimos dos años por venta de droga al menudeo.
Acorde con las autoridades, los tres fungen como brazo ejecutor en la zona de tolerancia de Tijuana, con Luis Arturo Jain Peña “El Arcángel”, operador y también matón del Cártel de Sinaloa. Éstos mantienen un enfrentamiento con la célula del CAF.
* Rigo Lorenzo Garrido “El Solo”, con antecedentes por delitos contra la salud, es quien hace de homicida para la célula arellanista identificada como Los Monitos y/o Los Cuates, integrada por miembros de la familia Toscano Rodríguez.
Zona Este, para “El Oscuro” y “El Chaparro”, del “Güero Chompas”
* Sergio Aarón Lizárraga García “El Oscuro”, capturado en diversas ocasiones por narcomenudeo, robo de auto y homicidios, lo ubican en equipo delictivo con Juan Abel Osuna Luna “El Jeje”. Informaron que ambos matan para servir delictivamente al Cártel de Sinaloa, a la célula encabezada por Luis Mendoza Uriarte “El Güero Chompas”. Los ubican en asesinatos en vía pública con otros dos sujetos a los que hasta el momento sólo identifican como “El Monkey” y “El Güerito”.
* Gilberto Morales Cuevas “El Chaparro”, con expediente por delitos contra la salud, a quien también lo ubican como parte de este grupo de homicidas en el que también incluyen a tres hombres aún no identificados: “El Táison”, “El Freddy” y “El Moreno”, que operan en Los Valles, Antorcha, Maclovio Rojas y otras colonias. A esta célula la investigan por un ataque a policías municipales.
Pugna interna del CJNG en La Presa
* Sergio Alberto Cornejo Morales “El Beto” vendía droga para el CJNG encabezado por los Sorzano en la zona, pero en junio asesinó a Julio Sorzano López “El Casani” y las autoridades ignoran con cuál de las células de Sinaloa se afilió; desde entonces la familia de traficantes se convirtieron en sus enemigos.
* Leonel y Antonio Sorzano López “El Titi Perro”, sicarios para el CJNG. En contra del segundo, existe orden de aprehensión por el homicidio -cometido el 4 de junio- de un hombre en la Avenida Emiliano Zapata de la colonia Batalla Nacional en La Presa. Francisco “El Pancho” Sorzano, el hermano mayor que encabeza el grupo, fue detenido el 22 de noviembre.