El duelo de vuelta que define al campeón de la Copa Libertadores 2018 se mantiene suspendido por los hechos de violencia que se suscitaron a la llegada del autobús equipo de Boca Junior que se mide al River Plate.
El bus de Boca fue atacado por los seguidores del River con piedras a su llegada al estadio Monumental de Argentina.
Según las imágenes de televisión de varias cadenas deportivas, el vehículo ingresó al escenario con varios vidrios laterales rotos y los jugadores, una vez descendieron, iban tosiendo y con los ojos llorosos por efecto de los gases.
Entre ellos se pudo observar a Carlos Tévez, Ramón Ábila, Edwin Cardona y Agustín Almendra, quienes presentaron vómitos y no se sintieron en buena forma para jugar.
Cabe recordar que el encuentro de ida concluyó empatado a dos tantos por lo que este día se definiría el título del certamen sudamericano entre los clubes argentinos.
El juego que estaba programado originalmente para el mediodía de este día, pero fue retrasado para arrancar a las 2:15 de la tarde.
Desde 2013 en Argentina existe una prohibición para que las hinchadas visitantes acompañen a sus equipos debidos a recurrentes hechos de violencia.